War of hormones ; kth, jjk [+18]

❣19. Educación física

La maniobra de reanimación cardiopulmonar, comúnmente conocida como RCP.

Jimin se ha puesto de pareja conmigo como es costumbre, pero no es consciente de lo que ha elegido.

Se tumba en el suelo y me inclino hacia él para presionar sobre su corazón.

-Ya no hablamos casi -dice desde abajo, sus labios en una sonrisa triste y su mano acariciando mi brazo.

-Eso no es cierto, estamos hablando ahora -digo obvia. Suspira y rueda los ojos, y aparta su mano de mi piel cansado de mi actitud evasiva.

-Sabes a lo que me refiero, hace semanas que no vienes a ver k-dramas -sus gruesos labios se convierten en una mueca y su ceño se frunce con molestia.

Tiene toda la razón, he pasado demasiado tiempo con Taehyung descubriendo nuevas experiencias en la cama, y sin querer he descuidado a mi mejor amigo.

-Se supone que estás muerto o a punto de hacerlo, actúa como tal -digo volviendo a la RCP, pero al ver la oscuridad que transforma sus ojos en pozos, me obligo a dejar de comportarme como una estúpida  sin sentimientos-. ¿Tienes un hueco libre en el sofá, Jimin-ssi?

No me contesta.

-Jimin, puedes hablar -insisto al ver su cabezonería.

-No, que estoy muriéndome. Si voy a morir será con la dignidad alta.

A veces me gustaría comprenderle mejor, saber el nivel de dolor que le provoco para acabar en cosas tan tóxicas; en comportamientos autodestructivos.

-CAMBIO -la profesora de gimnasia anuncia el cambio de turno, y esta vez me tumbo yo.

Jimin hace el amago de colocar las manos sobre mi corazón, pero abre la boca al ver la situación. Sí, Jimin se ha puesto conmigo, pero también con mi talla D de sujetador.

-Venga, me voy a morir si no me haces la reanimación -intento quitar la tensión con mis comentarios, no queriendo verlo tan serio.

-¿Esto...está bien? - mira a todos lados, pidiendo ayuda con la mirada.

-¿Qué ha pasado con el semental que tenía sexo todos los días? -recuerdo aquella tarde en su casa, y parece que haya pasado una eternidad.

Como esperaba que sucediese, Jimin se llena de orgullo y pone las manos sobre mi corazón, más bien sobre mi pecho izquierdo, y sus mejillas no tardan en colorarse, mostrando sus nervios. Noto el temblor de sus manos al presionar repetidamente, e intento esconder  la sonrisa al ver el carmesí apropiarse de su cara.

-No te rías de mí Yeori, sabes cuál es mi situación contigo y...

-Me estás haciendo cosquillas, ChimChim -aclaro sin dejar de reírme.
Giro mi cabeza hacia la izquierda, y veo a Tae observando la situación con una pequeña sonrisa.

-Lo siento mucho, pero yo así no puedo trabajar adecuadamente -Jimin se levanta digno y me abandona por otro chico al que pueda hacerle la  reanimación sin sonrojarse.

-YEORI QUÉ HACES SOLA, PONTE CON ALGUIEN QUE ESTÉ LIBRE.

-Pero mi compañero me ha dejado sola...

-JIMIN, MADURARÁS ALGÚN DÍA, ¿HIJO? -hace una pausa para recobrar la voz-. JEOOOOOOOON MUÉVETE Y HAZ COMPAÑÍA A LA SEÑORITA.

Estoy a punto de quejarme de mi nuevo compañero, pero justo aparece delante y apoya su pie en mi estómago sin llegar a apoyar todo su peso en esa frágil zona, pero lo suficientemente decidido como para que no me pueda levantar.

No tardo en mirarle con rabia, y que esté de pie enfrente mío solo le hace ver más impotente, ¿pero quién se cree que es?

-Quita el puto pie -mi voz suena seca, justo como planeaba que fuese, y retira el pie sin dejar de mirarme desafiante.