War of hormones ; kth, jjk [+18]

❣28. Cumpleaños neutral

Yeori

-Jungkook frena, vas bebido y fumado -aprieto el agarre en su mano, acrecentando su sonrisa con la acción. Sus pies paran en seco y me mira desde arriba antes de inclinarse hacia mí.

¿Es imbécil o qué? Cualquier movimiento tonto puede hacer que resbale y...no lo quiero ni pensar.

-No te muevas -pido desesperada.

-Pero no te enfades, tonta -coge mi antebrazo y tira de él hacia arriba-, sube aquí conmigo.

-Mira Jungkook, no sé si es una broma pesada o si tienes un deseo de muerte preocupante, pero no voy a subir ahí.

Se encoge de hombros y sigue caminando por el perímetro de la terraza. No le sigo los pasos esta vez, haciendo que se gire desconcertado.

-¿No me vas a acompañar? -después de unos segundos en los que parece perderse en sí mismo, inclina la cabeza con una ceja alzada-. Si tan preocupada estás... bajaré -sonríe como un tonto enamorado-. Pero me tienes que dar un beso.

-¿Tienes un problema mental o qué? No sé si te has enterado, pero ahora estoy con Taehyung.

Mi comentario parece enfadarle, ya que se zafa de forma brusca de mi mano y comienza a caminar de forma peligrosa con los brazos estirados.

-Jungkook, ya hablamos de esto en su día, no vuelvas a abrir la caja de Pandora. No me hagas esto.

Me ignora completamente, siguiendo su camino.

La presión y la adrenalina del momento me llevan al extremo del desgaste emocional, y acabo llorando, captando su atención.

-Jungkook por favor -me aferro su pierna con delicadeza pero firmemente, no dispuesta a soltarle ni a permitirle que dé un paso más por la estrecha cornisa-, baja.

-¿Me darás un beso si bajo? -insite, su aliento cálido chocando con mi oído lento e intimidante, logrando congelar hasta el más mínimo músculo de mi cuerpo-. Tengo muy buenas vistas desde aquí arriba...

Asiento todavía pegada a su pierna, la tela del pantalón húmeda por mis lágrimas. Noto calidez física cuando baja y se acerca a mí, pero me siento vacía y enferma por dentro gracias al shock.

Mi mente no está presente cuando Jungkook me toma del mentón y me besa, simplemente me quedo paralizada por la experiencia tan extrema de chantaje emocional a la que me acaba de someter.

-Tus labios son tan suaves... -me acaricia la mejilla y contengo las lágrimas-. Vamos, estarán a punto de regresar.

...

-¡Pide un deseo y sopla las velas! -la perfecta sonrisa de Hoseok brilla más que las bengalas que todos zarandean en la mano.

Y pido estabilidad para mi floreciente relación con Taehyung, estabilidad mental para mí y para todos...y sobre todo para Jeon Jungkook.

En esta noche a mucha altura del mundo real y sentada con todos mis amigos en la fría terraza, me siento acompañada pero desprotegida.

-¡Un abrazo grupal! -Namjoon no tarda en comandar, y los chicos se lanzan a mí con tanta fuerza que casi me tiran al suelo.

No me dejan respirar bien y me agobia tanta cercanía, pero les quiero mucho y hago una excepción.

-Jimim coño, ¿dónde tienes la cabeza? ¡El regalo! -Jin rueda los ojos y entrelaza el brazo con Namjoon-. ¿Por qué nos ha salido tan despistado?

-Es un regalo de todos, es una tontería pero... -la voz de Jimin se vuelve tímida de repente cuando me tiende la bolsa de papel, pero el hecho de que se hayan tomado su tiempo para conseguirme un regalo ya vale la pena.