Yeori
Taehyung había causado una... situación en mis bragas, y no podía esperar a mañana para su "trato".
Estaba arriesgando mucho al venir en este estado con Jungkook, pero sabía que era yo la que controlaba la situación; él únicamente se ceñía a mí.
Me abrió a los cinco segundos de llamar al timbre.
-Yeori, ¿qué haces a... -no le di tiempo a acabar de hablar; en cambio, sí cogí el cuello de su camiseta y le besé con necesidad. Me correspondió con la misma intensidad, tal vez incluso un poco más notoria.
Dejé que Jungkook cerrara la puerta principal tras mi espalda, que se creyera el dueño de la situación. Le permití que agarrara mi trasero con la desesperación propia de las hormonas, y no dije nada cuando que lo manoseó a su gusto.
Le hice creer que era el rey, cuando realmente solo era mi peón.
No le confesé que Taehyung me había dejado las bragas empapadas solo con miraditas y sonrisas; no le dije que le iba a utilizar como saco de boxeo para bajarme el calentón.
-Me pone mucho que tomes la iniciativa así... -soltó mis labios durante segundos, y me imaginé que lucirían tan resbaladizos como los suyos.
Levantó mi peso desde los muslos, y me hizo rodear su cadera antes de volver a comernos la boca. Su erección presionó mi entrepierna, los pliegues de la falda perdidos en la gravedad.
-Estoy solo en casa, vamos a mi habitación -susurró antes de correr por las escaleras, y besé su cuello solo para ver cómo se entorpecieron sus pies. Jungkook a veces era muy adorable.
Se le escapó un gemido cuando mordí su piel, y hundió los dedos en la carne de mi trasero como contestación.
-Nos vamos a caer por las escaleras si sigues así -gruñó entre trotes, y en un abrir y cerrar de ojos me sentó a horcajadas de él en la cama.
A pesar de que tenía una estricta política "sexual" (por llamarlo de alguna forma) con él, no le dije nada cuando sentí sus manos bajo la falda, ni tampoco cuando se entrometieron por la camisa escolar.
Lo nuestro era un lío, un rollo poco serio e inmaduro que se sustentaba a base de besos; todavía no habíamos hecho nada sexual, y de momento seguiría así.
Jugó a manosear mi culo por encima de las bragas, y le dejé porque me gustaba mucho cómo me estaba besando y tocando.
-Oye Yeori -se separó con la respiración agitada, y me dedicó una mirada confusa-, no has dicho nada sobre dónde tengo las manos...
Era raro que le dejara tocarme por debajo de la ropa, y le impactó hasta a él. Pero en vez de aprovechar la situación, me miró buscando consentimiento.
-Están bien, Kookie -apreté sus hombros en un aviso, y acabé de desabrocharme la blusa bajo su atenta mirada. Me deshice de la prenda con elegancia, y al volver a buscar su mirada, esta estaba en mis pechos-. ¿Estás bien?
Mi risa pareció sacarle del trance solo un poco, y me acercó de la cintura sin dejar de estudiar mi torso. Por poco me babeaba encima.
Parecía que era la primera vez que veía a una mujer, aunque sabía de primera mano que no era así.
-Es que...no sé qué te pasa hoy,pero podría acostumbrarme.
Aproveché el shock para quitarle la camiseta, y deleité a mis ojos con sus bonitos músculos.
¿Quién será más fuerte? ¿Taehyung o Jungkook?
-Maravillosas vistas estoy teniendo desde aquí, señor Jungkook -mi comentario le hizo reír, y sus manos me pegaron más a él.
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War of hormones ; kth, jjk [+18]
FanficA pesar de tener a varios chicos a sus pies, a Yeori solo le interesa Kim Taehyung, ese chico apático que parece inalcanzable. ¿Qué es lo peor que puede pasar si todos tus romances están en el mismo grupo de amigos? Es de esperar que surjan tensione...