Protective | l.h (Terminada)

19. ¿Fuiste tú?

Las horas que pasé con Ashton en la habitación fueron interminables. Lo peor de todo fue tener que hablar del beso “falso”. Me sentía realmente mal por ser deshonesta con Ashton. Además, estaba manchando el nombre de una chica que simplemente estaba diciendo la verdad. Ella pudo haberme humillado miles de veces, pero siempre dijo la verdad, y lo hizo por el simple hecho de no querer que Ashton saliera herido. Lo entiendo, ella se enamoró de él y sólo quiere su felicidad. Tal vez creyó que si me apartaba del camino ella podría hacerlo más feliz. Tuve que jurarle que no había pasado nada, fue difícil, y me sentí terrible, pero no quería verlo sufrir.

En fin, las cosas no mejoraron ese día. Cuando mis amigos llegaron todo fue de mal en peor. No me malinterpreten, su llegada me iluminó el día… hasta que Calum y Ashton se encontraron.

No sé cómo fue que comenzaron a hablar, luego a gritarse y, finalmente, a golpearse. Todo fue muy rápido. Mis amigas gritaban, los chicos intentaban separarlos, y yo también, pero terminé recibiendo un fuerte golpe en el estómago que me quitó el aire. Eso sólo hizo que Ashton se enfadara más y comenzaran a pelearse como si fueran dos animales. Luke intervino, Michael también y luego ya no supe nada porque mis amigas me sacaron del lugar.

Alexia gritaba enfadada muchísimas cosas sobre que los hombres siempre se comportan como bestias, que Ashton siempre es un tonto celoso y que Calum un bocón. Stella sólo me preguntaba si me dolía donde me habían golpeado. Yo contestaba negando con la cabeza mientras miraba hacia la ventana. Justo en ese momento logro ver como Ashton comienza a gritarle cosas a Luke y luego Calum comienza a gritar. Ashton mira incrédulo a Luke y luego comienza a gritar otra vez. Tenía una expresión de odio que jamás le había visto en la vida. Parecía que iba a matar a Luke en cualquier momento.

Bajo la cabeza e intento no mirar. Alexia seguía gritando, y diciendo que debía hablar con Ashton sobre sus celos y la forma de reaccionar que tiene ante conversaciones con mis ex novios o noviecitos de la infancia. Y que debió haber evitado que Calum venga. Y que no debió dejar que los convenciera a todos para venir porque él no estaba invitado. Y Stella intentaba callarla. Yo simplemente me agarraba el estómago e intentaba no llorar. Le había mentido a Stella, sí me dolía, pero ellas no necesitaban otro problema para preocuparse, así que preferí guardármelo y soportar el dolor. Lo peor es que también me habían golpeado sin querer el brazo y ahora me estaba doliendo bastante.

–¿Segura de que estás bien, __________? Estás pálida –Vuelve a preguntarme Stella. Me quita un mechón de cabello de la cara y me levanta la barbilla para observar mejor mi rostro.

–Estoy bien, Stella.

–No, no lo estás. Te traeré agua. Respira hondo y tranquilízate –Me ayuda a sentarme en el suelo y me hace unas señas para que respire hondo. Comienzo a hacerlo e intento tranquilizarme.

Escucho el portazo que da Stella. Ella comienza a gritarles y todo queda en silencio. Empieza con su sermón, que la hacía quedar como si fuera una madre o una hermana mayor. Siempre la he visto como eso. Stella no tuvo una madre que la criara, la crió su padre, y supongo que eso reforzó más su “lado maternal”.

Todo estaba en silencio. Sólo podía escuchar mi respiración agitada, haciendo que mi pecho subiera descontroladamente, y a Alexia murmurando cosas que no entendía. Stella sale de la casa con un vaso lleno de agua, intentando caminar entre las ramas sin caerse. Se agacha a mi lado y me entrega el vaso. Lo agarro y me tomo el agua a traguitos. Un portazo más fuerte se escucha, haciendo que me sobresalte y unas cuantas gotas se escapen del vaso.