Cap. 6

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Ya completamente desnudos sobre la cama de Blake él me había puesto a cuatro patas encima suya quedando mi cara justo sobre su miembro que comenzaba a estar tan juguetón como el mío.

Sin dudar comencé a masturbarlo con mis manos ayudando por mi boca mientras lo sentía crecer entre mis dedos y mi lengua haciéndose cada vez más complicado tomarlo entero, hasta que se me hizo imposible al estar completamente erecto.

–Alguna vez has hecho algo de esto? –Preguntó sin dejar de masturbarme mientras jugaba con su lengua demasiado cerca de mi esfínter.

–No se nota que soy virgen? He estado demasiado preocupado entrenando como para acostarme con nadie –Contesté tratando de que los gemidos no me interrumpieran–. Y tú?

–Nunca con un hombre –Respondió antes de aceptar todo mi miembro en su boca.

Los gemidos entonces se me hicieron imposibles ya de controlar cada vez siendo peor tratar de seguir masturbandolo con mi boca aunque no fuera capaz de que entrara entera.

Aunque no lo hubiera hecho antes con un hombre la forma en la que lo hacía se sentía demasiado bien.

Pero nos detuvimos para que él me pusiera boca arriba sobre su cama con una almohada bajo mi cadera.

–Si tienes miedo parare –Advirtió sacando de su mesilla un bote de lubricante y un condón.

Pero no necesitó decir nada para que abriera mis piernas.

–Ahora lleguemos hasta el final, no? –Contesté dejando que el líquido del bote cayera directamente sobre mi miembro.

No lo habría hecho nuca, pero sabía cómo iban las cosas, fue extraño sentir como comenzaba a introducirse su dedo en mi interior, que alguien profanara mi cuerpo no era precisamente en lo que había pensado cuando entraba el tema de la virginidad, pero ahora estaba demasiado excitado para decir que no y sinceramente no me importaba, esto solo tendría que quedar entre nosotros.

–Si te duele en cualquier momento dilo –Advirtió poniéndose de nuevo a mi altura encajando entre mis piernas mientras su dedo empezaba a moverse en mi interior en busca de la próstata.

Lo rodeé con los brazos y volví a unir nuestros labios tratando de pensar lo menos posible en como se sentía mi cuerpo por tenerlo a él en mi interior, estaba siendo delicado, pero era una sensación tan extraña que mi cuerpo cosquilleaba sin dejarme claro si me estaba gustando o no.

Sin embargo sentía que no me importaría besarlo eternamente, nuestras lenguas parecían ser tan compatibles y él sabía tan bien.

Su mano libre dejó de masturbarme comenzando a subir por mi abdomen hasta llegar a los pezones, lo que no me esperaba es que me pellizcar uno e instintivamente gimiera en su boca.

–Eso es extraño –Me quejé con la cabeza invadida por las dudas.

No entendía como se estaba sintiendo mi cuero ante su tacto, yo no era tan sensible.

–Estas excitado, por eso cosquillea, eso es que se siente bien –Explicó siguiendo con su mano jugando en mi pezon.

Su boca comenzó a bajar por mi torso para dejar marcas poco visibles y mi cuero empezó a verse saturado de sensaciones nuevas que me hacían temblar y dejaban mi mente completamente en blanco mientras solo podía preocuparme en que él no se detuviera, incluso cuando entró el segundo dedo y dolió seguía gimiendo.

–Que tal ahora? –Preguntó con sus cuatro dedos ya dentro de mí mientras seguía dejando marcas en el interior de mi muslo izquierdo.

–Estoy a punto! –Gemí como respuesta sólo pudiendo pensar en que necesitaba que entrara ya.

Llegada (Yaoi/BL)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora