–Siento haberte gritado –Murmuré mucho más calmado.
–No importa –Contestó dejando que estuviera sentado sobre él mientras miraba algo en su teléfono.
–Ni siquiera te dejé comer –Me seguí culpando sin tener ningún impedimento por su parte para levantar su camiseta.
No me sentía con ganas de hacer absolutamente nada.
–Ya comeré más tarde –Respondió mientras yo pasaba un dedo por una cicatriz–. Me haces cosquillas.
–Todas son de la guerra? –Pregunté viendo muchas más cicatrices de las que yo tenía.
–No, muchas ya son de hace años –Respondió tecleando unas cosas en la pantalla.
–Pertenecías a un delta ofensivo, verdad? –Dudé inclinándome hacia delante.
–Defensivo –Corrigió apartando el teléfono para mirarme –. Creo que tenemos que ir a hablar con el director.
–Por que? –Pregunté sin dejar que se incorporara.
No quería tratar con ese hombre ahora.
–Zaira ha dicho que nos busca –Explicó viendo perfectamente que no quería ir–. Puedo ir yo solo si quieres.
–A veces siento que me consientes –Murmuré dejando que se incorporara sin levantarme de él.
–Mientras no te aproveches no me importa –Respondió revolviéndome el pelo.
Dejé que se levantara de cama quitándome de encima suya y me quedé sentado de rodillas en su cama mientras lo veía ponerse las zapatillas de nuevo, me sorprendió ver como sacaba unas gafas de pasta negra no muy anchas de su mesilla de noche y se las ponía.
–Son para la vista cansada –Respondió a mi duda sin necesidad de que la formulara.
Cogió una chaqueta de lana roja que parecía calentita y se agachó quedando nuestras caras al mismo nivel.
–Me vas a dar un beso después de lo que ocurrió a noche? –Preguntó pillándome por sorpresa.
–Quieres? –Dudé al no habérmelo esperado.
No creía que hubiera ninguna posibilidad de que algo así volviera a repetirse aunque me hubiera encantado besarle y no tenía ningún remordimiento sobre lo sucedido.
También era la primera persona que veía mis cicatrices tras la guerra sin contar a los médico.
–Si, ahora me apetece –Contestó sonriéndome con una calma que se me hacía contagiosa–, pero si no quieres...
Antes de que pudiera terminar la frase aparte la distancia que nos separaba y nos besamos de nuevo hasta que él se separó.
–Volveré lo más rápido posible –Se despidió revolviéndome el pelo por última vez.
Nada más irse me tiré en su cama y me hundí en sus sábanas y colcha.
Ahora tenía la sensación de que necesitaba seguir llorando mezclada con la tranquilidad que me había dejado volver a saborearlo y las ganas de no hacer nada y simplemente ser como una piedra.
*. *. *. *.
–Zaira me ha dicho que nos buscas –Comenté encontrándome al fin con el director.
Después podría pasar por la cocina a coger algo.
–Si, es sobre el estado de Allan, Linda dice... –Comenzó a hablar mientras yo me abstraía completamente de lo que decía.
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Llegada (Yaoi/BL)
FantasyTras una dura guerra contra Los Angeles Blancos llena de pérdidas y sangre Allan tendrá que seguir hacia delante y ser capaz de adaptarse a las nuevas decisiones y compañeros, sobre todo a los compañeros. (En la historia "Datos random" subo, literal...