Niall
Sería tan fácil. Fácil desaparecer un día y simplemente sacar de mi esta sensación extraña.
Ni siquiera puedo comportarme como antes y eso es no es lo más jodido del asunto, si no el echo de que ni el sexo sabe a lo mismo.
¿Has sentido esa adrenalina de un juego mecánico cuando subes y luego bajas,pero multiplicado por mil? Así me sentía, ahora era como una maldita Granada que explotaría en cualquier momento en que Harry me dijera que tengo alguien más porque yo ya no puedo pensar en alguien más que no sea él. Y maldita sea mi vida y mi mente porque vaya que lo he intentado y hasta el alcohol me hace solo recordarlo un poco más.
No puedo y no quiero sentirme como un esclavo de esto. Quizá para la gente friki este bien pero no para mi.
No para quien soy o más bien finjo ser.Me acomodo por quinta vez en la pequeña cama y luego juego con los rulos del durmiente a mi lado.
El no podía enterarse jamás de lo que yo siento porque cuando el sepa la verdad yo deberé huir y dejar todo a la deriva.
Y para largarme primero debería desaparecer Harry Styles de Chicago.Salgo de la cama sólo por hacer algo y fijo la vista por un momento fuera de aquella pequeña habitación con el olor exclusivo a Harry y miro la vista.
No es como que fuera el lugar más bello, más bien esta parte de Chicago era la más aburrida y fea pero harry styles existía aquí y aquí en este horrendo lugar es donde me iba a quedar.Quisiera volver a casa a ducharme y cambiarme de ropa pero no puedo porque Dorian me mataría y no literalmente, lo haría enserio por lo que le hice la última vez.
Rebuscó en el closet y sacó una camiseta blanca roida y unos pans que están a la mano, sorteo levantar al ruloso y preguntarle si puedo ducharme pero terminó descargándolo porque solamente me haría ver aún más sospechoso.
Cuando entro en el pequeño cuarto de baño y me miró al espejo sólo puedo ver la realidad.
Que nunca he sabido quien mierda soy, y que esto es solo una fachada absurda y estúpida que me inventé de mi porque estaba harto de mi vida de antes. Jamás volvería a ser el mismo niñito tonto que había salido de Irlanda casi echado por su propio padre.Mis ojos parecen aún más hundidos que la última vez que mire mi reflejo y mi piel parecía enfermizamente pálida pero no solo notaba eso, alrededor de mis ojos y cerca de mis cejas había múltiples marcas que habían sido nada a comparación de toda la mierda que había sufrido cuando había llegado a EE.UU múltiples cosas pasan por mi mente y bajo la mirada a mis manos temblorosas, yo ya no soy quien fui.
Templo el agua de la regadera con la mano y decido qué me da igual como se encuentre, me despojó de la única prenda que traigo puesta y me acomodo bajo el chorro de agua que cae directo a mi cabello y lo empapa como un perro mojado.
Me dan ganas de cerrar los ojos y lo hago.
El agua me hace temblar y sólo dejo que resbale sobre mí, mis dientes comienzan a castañear y me arden las heridas abiertas recientes pero me he hecho inmune al dolor físico.Mi mente se desconecta en un lugar perdido y que parece muy antiguo.
Recién había nacido Theo, Nina y yo caminabamos por la acera y la gente ponía luces navideñas y otros adornos en las puertas, ventanas y tejados.
Nina me contaba que Daniel su novio la había invitado a salir y yo lo maldecía en broma por querer quitarme a mi única hermana mujer.El recuerdo va perdiendo forma y coherencia al pasar del tiempo y puedo palparlo porque hace años que no veo a Nina y Theo era sólo un bebé cuando pasó eso.
Trago saliva y golpeó la pared conforme olvido el recuerdo....