Ver ahí a mi madre hizo que en todo lo que creía se derrumbara.
—Oh mi pequeño May como has creído —contestó sonriendo.
—Estas de su lado —dije destruido.
—Siempre estuve de este lado —soltó ella.
Las luces se prendieron más fuertes dejándome ver aquel ser despreciable.
—Masón —exclamó sonriendo.
—McCall —dije con desagrado.
—Alguien puede decirnos qué sucede —pidió Nick confundido.
—Con gusto te lo digo joven Nick —contestó McCall— hace diecisiete años se inició el programa Arkansas —contó McCall— dos niños gemelos fueron criados en dos diferentes áreas.
—Ambos niños fueron criados para ver lo que la civilización puede hacer en ellos —prosiguió Dalia.
—Yo fui criado en el sector pobre —exclamé herido.
—Así es, y después de tantos esfuerzos resultaste ser más fuerte que tu gemelo —exclamó mamá.
—¿Qué? —pregunté más confundido.
—Cuando te inyectamos el virus también lo hicimos con tu hermano, queríamos demostrar la superioridad de la clase alta —contestó McCall con amargura.
—No fue así —contesté cansado.
—No, estaba decepcionada claro que si pero descubrimos algo increíble —dijo riendo a carcajadas— tu sangre es lo que nos dará el paso final a un nuevo mundo.
—Eso nunca —contestó esa voz conocida— Tu no lo vuelves a tocar.
—Miren quien tenemos aquí —gruño McCall— Aiden, por poco nos destruyes una vez.
—La primera no hice lo correcto, ahora si —contestó mirándome.
Una bala salió de su arma y se impactó en la frente de Emma.
—Quieres guerra, eso tendrás —exclamó McCall.
Las sirenas se prendieron y las balas comenzaron a llover una vez más.
—Corre —gritó Tanner al ver que McCall estaba por huir— mátalo.
Lo seguí, me llevaba una gran ventaja pero nunca deje de observarlo.
Corrimos por todo el lugar hasta llegar a una extraña habitación.
Esta era blanca, estaba solo aunque juraba haber entrado con McCall.
La habitación no era más que una habitación de proyección, está se prendió dejándome ver todo a su paso.
En una parte de el video estaba Carter con Ben en brazos, un Ben muerto.
No era el único, en la otra parte se encontraba una escena similar, Gabe lloraba sobre el pecho de su hermano Bael.
Que era un muerto más a la lista de este mundo.
Ben, Bael, Bryce, Dalton y Linden.
5 más a la cuenta, 5 amigos muertos.
—Esto tenía que pasar así —dijo McCall.
—Eran sólo niños —grité herido.
—Eran asesinos —contestó molesto, apareciendo por uno de los lados.
—Por que así los criaron —respondí explotando— No tuvimos elección, ellos no tuvieron elección.
—Siempre hay más de un camino —bufo molesto.
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Obscuridad absoluta
HorrorSEGUNDA PARTE DE CAYENDO EN UN UN ABISMO "Y QUE HAY DESPUÉS DE CAER EN UN ABISMO SI NO UNA OBSCURIDAD ABSOLUTA" Después de la tragedia que vivió Masón tendrá que ser fuerte para lo que sigue, una oscuridad absoluta luchar por el amor vencer sus mi...