Epílogo

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Epílogo

Narradora...

La azabache con la más tranquila mirada estaba recostada en su gran cama matrimonial, ya era de noche y su inútil novio de hace ya 3 años no llegaba a la casa. Frustrada Kagome cogió su celular y marco el número telefónico de su amado, el primer tono, segundo tono pero nada, llegó al tercer tono donde fue su llamada respondida.

-¿ocurre algo gatita?-se escuchó la ronca voz de su hombre.

-Inuyasha... dijiste que tardaría 30 minutos con esa lagartija... y estas ausente hace una hora entera-murmuró la azabache algo triste, su novio a estado muy distante desde hace tiempo y siempre llegaba tarde a casa.

-estoy en el tejado... acabe en 22 minutos-la azabache frunce el ceño cortando la llamada, toma su forma hanyou para saltar por la ventana, sujetarse del borde impulsandose hacía arriba.

-Inuyasha, pudiste a varme avisado que llegaste. ¡¡maldición estaba esperándote!!-hablo molesta a los pies del hombre de cabello Platinado y ojos naranjas, se mantenía serio ante su enojo.

-tenía que pensar en todo-tan sereno y frío, la azabache estaba cansada de ese comportamiento.

-si debes pensar tanto... yo, yo debo alejarme, ¿acaso soy una molestia para ti?-mencionó mostrando su tristeza.

-no vuelvas a decir eso-Inuyasha se incorporó rápidamente con la mirada sería y reprochandole lo mencionado.-te e demostrado muchas veces que te amo, te amo tonta y no me arrepiento de nada.-completamente en pie la tomo de las manos.-te amo-antes de que la azabache deje caer una lágrima el platinado la beso dulcemente.

El platinado la alza a su cintura donde ella enreda sus piernas, transformándose rápidamente en hanyou la llevó rápidamente y sin hacer ruido al cuarto que ambos compartían de la gran mención. Los besos tiernos se volvían apasionados, empezaron a darse caricias empezando a calentar sus cuerpos,  la noche acaba de comenzar ya no importaba nada sólo ellos dos o al menos asta  el día siguiente.

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Inuyasha estaba mirando a su amada dormir, había preparado el desayuno mientras ella dormía, lentamente la despertó sacudiendo su hombro ella se incorporó dejando ver sus pechos descubiertos.

-levantate, prepare el desayuno y saldremos cuando el sol baje-murmuró alegre a su amada.

-ya voy-mencionó levantándose, se dirige al cuarto de baño. Se termina de bañar y baja con una falda tubo azul oscuro y una camisa blanca, su pelo despeinado como siempre.

Bajo del cuarto al comedor donde encontró a Inuyasha atendiendo a los gemelos que tuvieron hace un año, en tan sólo tres años creo una hermosa familia inter-especie pero con el hombre que amaba. Su pequeña niña tenía ojos dorados y la cabellera tan oscura como la suya, su rasa era hanyou neko platinado y sus ojos se tornan fucsia; su otro pequeño era de cabellera igual negra pero un ojo dorado y el otro marron, era un neko manchado entre negro y platino era tan hermoso con sus ojos igual fucsia.

-anoche pensaba en ellos...-murmuró Inuyasha mientras el niño comía.-si soy lo suficiente para los tres, si seré un buen esposo y padre algún día... soy asesino y nunca se me cruzo por la cabeza tener una familia-Kagome lo entendió, todo ese tiempo el estaba preocupado.

-ma ma... maaa-la niña se sacudió en su silla para que la cogiera en brazos.

-mi pequeña Yukina-la tomo en brazos.-Inuyasha, ¿nos as fallado en estos años?-él negó pensativo-pues no debes preocuparte, nunca nos dejaras, eres el mejor-el sonrió enternesido.

-Yukitero vamos, es hora te tu baño-Inuyasha tomo a su otro hijo en brazos alejándose directo al baño.

-oye Inuyasha-se escuchó de la puerta de entrada.

-¡¡TIO INUYASHA!!-entraron dos escandalosas niñas de 2 años, igualmente ambas.

-gemelas, vengan-entró Sango igualmente.

-chicos, ¿que hacen aquí?-pregunto Kagome dejando a yukina en el suelo.

-os invite a nuestra salida... mientras tanto pasaremos aquí la tarde-hablaba desde el baño donde ya desvestía a su pequeño.

No podían pedir nada más, dos asesinos que se aman y amaban al fruto de su amor, si debian matar aL mundo no lo dudarian. El celular de Kagome sonó.

-hola Sr onigumo, si yo me encargo.-respondió Kagome a la llamada.

Si, ella volvió con su antiguo jefe castigando a las personas malas que lastimaban a personas buenas. La historia de su verdadero romance aún no se acaba, ellos apenas comenzaron su pequeña vida.

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Espero les allá gustado.
Y

os invito a pasar por mis otras historias gracias ..  besos.

Asesinos Profesionales [Inuyasha] Donde viven las historias. Descúbrelo ahora