2020

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La madre levanta el auricular con desespero, del otro lado una voz de mujer le pide que aguarde y finalmente escucha la voz de Augusto. La pequeña Winter, observa la sonrisa en el rostro de su madre, voltea la cabeza de nuevo hacia el plato y continúa comiendo. La sonrisa se vuelve una mueca desaprobación, hablan unos minutos y Charlotte ve en la gesticulaciones de su madre que no hay buenas noticias y posiblemente su padre llegue tarde. Mariel se sienta en la mesa de madera y gira dando la espalda a su hija y murmura.

- Has pasado casi 6 horas en la oficina esperando ser atendido por Genaro, amor. Regresa a casa.- suplica Mariel.

- General Genaro Bernal.- corrige a su esposa.- No, corazón, aquí me quedo hasta ser atendido, necesito una explicación. No es común que de la nada llegue soldados en la madrugada a poner globos con chips o lo que sea que tienen adentro.

- Hoy Charlie escuchó a las maestras hablar de simulacros, esto no me gusta nada, Augusto.- habla con voz baja. Tal vez es mejor no saber nada y si hemos de morir. interrumpe el marido.

- Por eso estoy aquí, Mariel, para saber a qué demonios nos enfrentamos y buscar soluciones.- responde Augusto.- Tenemos una hija de cinco años y no permitiré que dañen a mis dos únicos amores. Ha salido la asistente de Genaro, debo irme. Te amo.- Mariel cuelga el teléfono y se limpia las lágrimas, trata de componerse antes de regresar al comedor.

La mujer camina al comedor pero la comida se enfrió, Charlotte ya terminó de comer y se baja de la silla para sentarse junto a su madre. Mariel se pone de pie y pone en el microondas la comida,una vez caliente regresa a su asiento y con pocas ganas ingiere alimento. Charlie abraza a su madre, las manos alcanzan a tocar el vientre, levanta la cabeza y menciona lo siguiente.

- Quiero una hermanita, mamá.

 Deja los cubiertos encima del plato, Mariel baja la mirada a su hija, con fuerza y amor abraza a su pequeña. En su cabeza se vienen imágenes de la noche de 1980 y aunque en su interior si quiere otro ser corriendo por la casa, Mariel reflexiona y piensa en el mensaje de esa noche.

"El conflicto no tarda en iniciar. Dos compiten y uno terminará con los ojos cerrados. Aún no están listos. Caos, destrucción y supervivencia."


capítulo 2 continúa en la siguiente hoja.

Antes del conflictoWhere stories live. Discover now