La Oveja Negra En La Familia Malfoy // Harry Potter & Tú

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Después de sacar a Draco del compartimento de Potter a la fuerza, llegamos al compartimento, solo para escuchar que llegaríamos en poco tiempo y que debíamos dejar el equipaje en el tren. Aún no me había cambiado, saqué la ropa del baúl y salí a buscar donde cambiarme, dejando a Draco con sus mascotas.

Al acabar, el tren ya se había parado y era hora de salir, fui a dejar la ropa que me había sacado y bajé del tren. Seguía enojada con Draco, así que me separé de él cuando un gran hombre nos dijo que subiéramos cuatro en cada uno de los botes que había.

Alcé mi mirada y quedé realmente sorprendida que no pude ocultar mi asombro, el castillo de Hogwarts se alzaba al otro lado del lago, con sus ventanas reluciendo en el cielo oscuro, la estructura lucía grande y dominante ante sus alrededores. WOW

Subí a un bote libre, ansiosa de llegar y ver el interior del castillo, luego otros tres alumnos se subieron al bote y cuando todos estuvimos listos, todos los botes zarparon.

Llegamos a la otra orilla del lago, el gigante que nos venía guiando nos ayudó a bajar para luego conducirnos por algunos túneles que nos llevaron ante una gran puerta de madera. El gigante llamó a la puerta y salió una profesora, deduje que era McGonagall, recuerdo haber leído de ella en alguno de los libros que compré. Nos dejó entrar al castillo, nos guió por algunos pasillos hasta llegar a otra puerta que daba paso a otro espacio, el Gran Comedor.

McGonagall nos habló a cerca de las casas, pero no le presté atención, ya había leído sobre eso. Mis padres esperaban que Draco y yo quedáramos en Slytherin y la verdad, hablaban tanto de eso que me empezaba a dar igual, ni siquiera había pensado en que casa YO quería quedar. Decidí dejar a un lado esas reflexiones, volteé a ver a la profesora y la escuché finalizar su discurso:

- Les sugiero que mientras esperan se arreglen lo mejor posible.

Bueno, yo ya iba bien, siempre procuraba conservar una buena apariencia.

- ____... - oí a alguien llamándome.

- Draco - contesté fríamente al ver quien me hablaba.

- Ay, ____ ya, perdón.

- No tienes que hacer eso, es frustrante y sólo ganas peleas.

- Solamente quería poner a Potter en su lugar, no te enojes conmigo.

Lo miré con una expresión seria, mientras el ponía cara de perrito regañado, lo cual me causo gracia y comencé a reír.

- Esta... bien... debiste ver... tu cara - dije entre risas colocándole una mano en el hombro para sostenerme y no caer.

- Ja ja muy graciosa

- Así me quieres, soy tu bella hermanita.

- ¿Bella? ¿De donde sacaste eso?

- De mi mente, duh

- Mensa

- Cállate

- No quiero

- No me imp...

- La Ceremonia de Selección ya va a comenzar - me interrumpió McGonagall.

Le lancé una mirada fulminante a Draco, ya verá, hoy ganó la discusión pero se las verá en cualquier momento.

Entramos al Gran Comedor, era más grande de lo que esperaba, el techo parecía ser el mismo cielo de afuera, había cuatro largas mesas en las que alumnos mayores ya estaban sentados, la mesa de los profesores se encontraba al fondo. Nos paramos en frente de la mesa de los profesores y entre dos mesas, vi a la profesora McGonagall colocar un taburete y un sombrero viejo y remendado encima de él, al cual reconocí como el Sombrero Seleccionador, mis padres nos habían hablado un poco a cerca de Hogwarts. De repente, el sombrero comenzó a cantar a cerca de las casas de la escuela y lo que las caracteriza.