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Ron y yo regresábamos a la sala común, después de haber estado ayudando a Hagrid a alimentar a Norberto. Aunque, Ron seguía quejándose por la mordida que le había dado Norberto en la mano.

- ¡Mira esto! - dijo enseñándome por milésima vez su mano - No entiendo cómo lo acaricias sin que te haga nada. ¡Y a mi me mordió! Me duele.

- No le tengas miedo, Ron. Espera, tu mano se ve peor.

- Ay gracias, eh.

- Pásamela - paré de caminar y tomé su mano envuelta en el pañuelo mientras también sacaba mi varita.

- ¿Qué vas a hacer? - preguntó.

- Tranquilo, llorón.

Le quité el pañuelo, apunté con mi varita a su mano y pronuncié un encantamiento. Luego limpié con otro hechizo el pañuelo y se lo volví a poner.

- Listo, debería dolerte menos.

- Se siente mejor, gracias.

- Bueno, vamos.

- Llegamos a la sala común y encontramos a Harry y a Hermione. Ron no tardó en enseñarles lo que le había hecho Norberto. Yo me senté en uno de los sillones.

- No podré escribir en una semana. Les aseguro que los dragones son los animales más horribles que conozco, pero para Hagrid es como si fuera un osito de peluche. Cuando me mordió, Hagrid me pidió que saliera porque según él, yo lo había asustado. Y cuándo nos fuimos, estaba cantándole una canción de cuna. Aunque, me duele menos gracias al hechizo de ____.

- ¿A ti no te mordió? - me preguntó Hermione, sospechaba algo.

- No, ¿por? - respondí lo más normal que pude. Sentía que Hermione pensaba algo y no sabía si era bueno o malo. Quizás se había dado cuenta... No.

- No, por nada. ¿Dónde aprendiste ese hechizo?

- Ah, lo escuchaba de mi mamá cada vez que Draco o yo nos lastimábamos.

- ¡Es Hedwig! - dijo Harry corriendo a la ventana - ¡Debe ser la respuesta de Charlie!

Harry, Hermione y Ron se juntaron para leer la carta pero yo me quedé donde estaba, me dio flojera pararme.

- ¿Qué dice? - pregunté cuando vi que acabaron de leer.

- Unos amigos de Charlie vendrán por el dragón. Quieren que lo llevemos a la torre más alta el sábado a medianoche - me explicó Harry.

- Oh - dije, no podía evitar sentirme algo triste, le había agarrado cariño a Norberto - Bien - dije intentando disimular un poco - ¿A qué día estamos?

- ¿En serio? Hoy es miércoles - dijo Ron.

- Tenemos la capa - dijo Harry - La capa es suficientemente grande para cubrir a dos de nosotros y a Norberto.

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Las cosas se pusieron algo mal a la mañana siguiente, la mano de Ron se había hinchado y ahora tenía dos veces su tamaño normal. En la tarde, la herida era verde. Creo que los colmillos de Norberto tenían veneno. Interesante.

- No es sólo mi mano - susurró Ron cuando fuimos a verlo a la enfermería - Malfoy le dijo a la señora Pomfrey que quería pedirme prestado un libro, y vino y estuvo riéndose de mí. Me amenazó con decirle a ella quién me había mordido (yo le había dicho que era un perro pero creo que no me creyó). De seguro se porta así por lo del partido de quidditch, no debí pegarle.

Tratamos de calmarlo.

- Oh no... - dijo Ron - La carta de Charlie, estaba en el libro que se llevó Malfoy, se va a enterar de lo de Norberto.

La Oveja Negra En La Familia Malfoy // Harry Potter & Tú Donde viven las historias. Descúbrelo ahora