Mi Prohibida Prioridad Capítulo 67

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Mi Prohibida Prioridad

Capítulo 67

Narra Camila

Despertar por la mañana a plena luz del día y mirar a un lado de ti a la mujer de tu vida, la mujer de tus sueños totalmente desnuda envuelta en sexys sábanas blancas, es la imagen más hermosa que un ser humano enamorado puede tener en su vida. Eso mismo me paso a mi, el rostro sereno de Lauren descansaba sobre la almohada blanca justo a un lado mío, me levanté delicadamente para no despertarla y dance con cautela hasta llegar al baño completamente desnuda, necesitaba un baño urgente, necesitaba despertar por completo y darme cuenta que todo esto no se trataba de un hermoso sueño.

Me metí bajo las pesadas gotas de agua caliente y miles de recuerdos de la noche anterior venían a mi mente junto con las emociones y sentimientos que sentía en aquel momento. Parecía como si manadas de mariposas se estrellaran en mi cuerpo cada vez que recordaba la sensación de tener a Lauren de esa manera, era inevitable no suspirar y sonreír como completa idiota.


Sentí como un cuerpo desnudo se pegó al mío envolviendo sus manos por mi cintura, por un momento pensé que era una sensación que mi mente me producía al estar perdida en la sensación de mis recuerdos.

-Lauren: Jamás vuelvas a dejar sola a tu mujer en la cama sin antes despertarla con un beso de buenos días. -Lauren susurro en mi oído haciéndome salir del trance trance.

-Omg, ¿cómo entraste aquí?, ¿acaso usted está acosándome Lauren Jauregui? -Respondí girando para encararla.

-Lauren: Yo no tengo la culpa, me ha dejado adicta a usted. -En ese momento Lauren pego sus labios a los míos guiándome en un beso totalmente pasional. La mezcla de su piel y el agua caliente simplemente estaban haciendo de este momento un momento completamente erótico para mis instintos., Lauren me levanto haciéndome envolver mis piernas alrededor de su cintura mientras mi espalda se apoyaba en la pared de la ducha. Lauren atrapó mi labio inferior entre sus dientes liberándolo poco a poco...Mi sangre comenzó a encenderse ante las ardientes caricias que mi esposa estaba dejando por todo mi cuerpo, los jadeos de ambas comenzaron a invadir el lugar, Lauren llevó su boca hasta mi cuello dejando pequeños mordiscos que hacían erizar mi piel y comenzó a bajar hasta atrapar mi senos entre sus labios, arquee mi espalda en respuesta al acto y sentí como las manos de Lauren se deslizaron por mi abdomen hasta llegar a mi centro. Sentí como me invistió cuidadosamente haciéndome delirar por completo., la escena ayudaba demasiado, ya que esta había sido una de mis fantasías sexuales de las cuales Lauren no estaba enterada, pero sin saberlo, la estaba haciendo realidad. El ritmo en los movimiento de Lauren comenzó a aumentar llevándome hasta el punto máximo de placer.

-Fuck, Lauren. -No pude evitar dejar escapar las palabras al compás de un largo y fuerte gemido que no pude controlar, Incluso, pudo llegar a ser vergonzoso si en ese momento me hubieran quedado fuerzas para pensar en algo.

-Lauren: Buenos días babe. -La voz rasposa de Lauren acarició mi oído.

-¿Así que de esta manera me darás los buenos días todas las mañanas? -Pregunte aun jadeando.

-Lauren: Puede ser que si, si tu me sigues dando las buenas noches como lo hiciste anoche. -No pude evitarlo y en ese momento me sonroje.

-Entonces, es un trato, fue una excelente idea haberme casado contigo. -Guiñe un ojo para ella.

-Lauren: ¿Así que nos convertiremos en todas unas adictas sexuales? -respondió juguetonamente.

-No le encuentro el problema si eso solamente pasa entre tu y yo, ahora date prisa que aún nos falta mucho por conocer de este increíble lugar.

Sin más retrasos, tomamos la ducha juntas jugueteando un poco con algunos exóticos peinados que nos hacíamos con el shampoo, y cómo intentábamos tapar nuestro cuerpo con la espuma del jabón, como si fuéramos un par de niñas pequeñas tomando una ducha divertida.

Mi sorpresa fue de esta manera, al día siguiente Lauren me despertó muy temprano por la mañana, mire a mi alrededor y Lauren tenía las maletas preparadas, al parecer Lauren no quiso pasar la luna de miel en un solo lugar, ya que durante tres semanas estuvimos viajando por el mundo a los mejores lugares vacacionales, incluso, duramos un par de días en cuba, en donde volvía visitar el lugar donde nací. 

Esa tarde, nuestra luna de miel terminaba, Lauren quería que nuestra última noche de luna de miel la pasaramos en ''New York'', prácticamente después de nuestros largos viajes por el mundo, estar en New York, era como estar en casa.


Llegamos al lugar en donde nos hospedaríamos, no lucía como un hotel realmente, pero sin embargo, era una casa hermosa. Lauren se adelantó para abrir la puerta, ella me pidió que esperara un poco afuera, lo que no comprendí, pero de todas maneras lo hice.

-Lauren: Muy bien, permíteme. -Lauren se acercó a mí y me elevo entre sus brazos.

-¿Qué haces? -Dije aferrándome a su cuerpo, Lauren comenzó a entrar y cerró la puerta con un empujón de su pie, observe dentro del lugar un hermosos y lujoso living frente a una hermosa chimenea. Lauren me bajo lentamente de sus brazos envolviendo sus manos por mi cintura.

-Bienvenida a nuestro nuevo hogar. -Susurro en mi oído y no puede evitar que mis ojos comenzara a humedecerse cuando vi un par de portarretratos con nuestras fotos adornando el lugar.

-Dios mío, este lugar es hermoso, ¿cómo hiciste todo esto? -Pregunte aun en shock sin poder creer que esto estuviera pasando.

-Lauren: Lo compre hace un par de meses y lo fui amueblando poco a poco, pero si no te gusta algo lo podemos cambiarlo. -Su voz sonó un poco preocupada. Gire mi rostro y la mire incrédula.

-¿Es en serio?, cada cosa en este lugar es tan perfecta como tu mi amor. -Sin dudarlo me lancé a sus brazos atrapando sus labios. - Te amo Lauren, seremos muy felices. 

El resto de la tarde vagamos por todo el lugar mirando la perfecta decoración en cada una de las habitaciones, pero sin duda nuestra habitación era la más perfecta de todo el lugar, sentí una hermosa sensación al entrar a una pequeña habitación en donde las paredes tenían cigüeñas y figuras infantiles por todo el lugar,  justo en el centro, un pequeño moisés color café se posaba dándole la imagen perfecta a esta habitación. Gire mi vista hasta Lauren quien posaba aun en el marco de la puerta sonriente mirándome atenta.

-Lauren, esto es hermoso. -Dije limpiando mis lágrimas.

-Lauren: Pero no más hermoso que el pequeño o la pequeña bebé que algún día será dueño de esta pieza. -Lauren comenzó a acercarse lentamente a mi, atrapándome entre sus brazos. -Quiero una familia contigo Camz, quiero que seamos madres algún día. -Esas palabras me llegaron a lo profundo de mi alma, nada podría terminar por hacerme más feliz que tener un hijo con Lauren.

-Algún día lo seremos y seremos las mejores, ese pequeño tendrá mucha suerte de tener una mama' como tu. 

Sin duda alguna mi vida comenzaba a ser mejor que nunca, jamás imaginé que podría ser tan feliz. Fifth Harmony seguía adquiriendo fans con el paso del tiempo, nuestros tours cada vez eran más increíbles, la banda de Nicol y Spencer nos acompañó en uno de nuestros tours más importantes que tuvimos en parte de del país y gran parte de latinoamérica. Sin duda alguna la visita a México, Colombia, Perú, argentina, chile y españa, fue una completa locura.

Sin duda, ahí se encontraban los mejores fans que podemos tener, nuestros tours con el tiempo fueron más cortos ya que ocho meses después de nuestra boda, Ally contrajo matrimonio con Troy, tres meses después, Dinah se casó con Siope y hace un par de meses, Normani se comprometió con Arin, ya que después de mucho tiempo ellos se volvieron a encontrar y arreglaron sus diferencias. Ahora su boda será en un par de meses más y en los últimos meses hemos estado metidas casi de día y noche en el estudio, trabajando en un nuevo álbum que lanzaremos en un par de días para después tomar unas largas vacaciones y cada una de nosotras poder disfrutar de nuestras parejas.

La mansión en L.A es hermosa, ya que nos hemos convertido en una gran familia.

Siope, Troy y Arin, también viven en la mansión con sus respectivas esposas, nos hemos convertido en grandes amigos y todo ha sido más divertido desde que todos vivimos juntos. Pero sin duda, extraño demasiado mi casa y mi privacidad en New York, y hoy por fin viajaremos nuevamente, por un tiempo indefinido y siento que vendrán muy buenos tiempos.

 Pero sin duda, extraño demasiado mi casa y mi privacidad en New York, y hoy por fin viajaremos nuevamente, por un tiempo indefinido y siento que vendrán muy buenos tiempos

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