Ruggero camina de un lado a otro desesperado mientras Antonella y bruno reprenden a la pequeña Iris por la nada agradable broma que nos hizo hace rato. Todos creímos que algo malo le pasó pero solamente estaba escondida mirando nuestras reacciones
Ese problema afortunadamente se resolvió pero quedaba la llegada de la nueva princesita que por cierto es mi hijastra, por el momento obviamente. Pueda que su padre y yo no estemos juntos en muchos años más
Pero por ahora esa nenita hermosa si es mi hijastra y ya he comenzado a amarla como si fuese mi propia hija. Algo poco común en pocos casos
K: Amor, siéntate ya que comienzas a marearme –murmuré tirando de su mano-
R: Mi pequeña hija está a punto de nacer, no sé cómo reaccionar ante eso
K: Bueno, te recomiendo que te calmes y que te sientes a esperar como el restoSu brazo rodeó mis hombros y sus labios se posaron sobre los míos haciéndome remover en la silla buscando más contacto de su parte. Pero recordé que estábamos en un hospital por lo que me alejé con rapidez
K: ¿Pensaron en el nombre? –soltó una risita besando mi frente-
R: Es una sorpresa para ti y para todos, no lo van a poder creer
K: ¿Le pondrán María Juana? A Iris le va a encantarSoltó una pequeña carcajada haciendo que varias personas voltearan a mirarnos algo molestos, y es que ellos están aquí para esperar saber de sus familiares. No para vernos reír por los nombres que elegimos para la niña que está naciendo
Recosté mi cabeza en su pecho y sus manos comenzaron a acariciar mi cabello haciéndome suspirar mientras mis ojos se iban cerrando de a poco. No sé cuánto tiempo pasó pero me quedé completamente dormida
En mis sueños no hice más que divisar lo que sería una nueva vida junto a esa pequeña, y como hace meses mis suegros me dijeron, esto también era una responsabilidad para mí. Como la novia de su padre tenía que poner un ejemplo
No quería ser una figura materna para ella, pues tiene a su verdadera madre y a sus abuelas, yo pretendía ser su amiga, una persona incondicional en la que siempre va a poder confiar. Quiero ser mucho más que su madrastra
Me ilusiona mucho tenerla porque sé que con ella podré practicar para cuando sea mi turno de ser madre, para cuando Rugge y yo decidamos que sea el momento de formar una familia juntos. Y por cierto, ese momento no es ahora, quizá en un año podamos llegar a esa conclusión
R: Amor, ya podemos pasar a ver a la niña –susurró en mi oído- nos dijeron que ya la trasladaron a la habitación de Cande, ¿Vamos?
K: Quiero conocerla, yo primeroComenzamos a correr por los pasillos riendo como dos locos mientras peleábamos por quien llegaría primero, y por cierto fue él. Y su reacción cuando vio a su pequeña hija fue simplemente perfecta
Comenzó a llorar de felicidad mientras le susurraba cosas en italiano a la pequeña, y claro está, que a todos nos conmovió lo que vimos. Todos terminamos con lágrimas en los ojos
K: Se ven hermosos juntos –susurré mirándolos con ternura-
A: ¿Cómo van a llamar a esta preciosura?
Cande: Es una sorpresa, y sé que todos van a estar de acuerdo con esto, les va a encantar
I: ¿Si le van a poner María Juana?
R: No, pequeña. Mi hija va a llamarse Adara Itzitery
K: ¿Qué?
Cande: Quiero que mi hija lleve tu segundo nombre porque tú me enseñaste muchísimas cosas, Karol. Y estoy muy agradecida contigo, y bueno, Adara fue el nombre que tanto pedías, así que se nos hizo una buena idea llamarla así
K: Me cuesta creer que la ex de mi novio le esté poniendo a su hija mi nombre
R: Las cosas en esta familia son muy raras, asi que acostúmbrate, mi amorMi hijastra se llama como yo, eso no me lo esperaba, definitivamente no....
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¿Cómo mirarte?
RomanceAmar es sólo un sentimiento más que no está incluido en mi vida. Pero... ¿Y si te pido que apuestes en mí?