CAP 47

2.1K 176 46
                                    

Es extraño llegar a casa y no ver a mi esposa en la cocina preparando la cena o en la sala viendo esos raros programas que suele ver con Isabella. Solamente hay silencio y más silencio a mi alrededor

Las luces están todas prendidas pero nadie responde a mi llamado, es todo tan extraño. Parece una escena sacada de una película de terror

Entré a la habitación confundido encontrandola sentada en la cama mirando hacia el balcón. Tenía un pequeño objeto en las manos que no pude distinguir muy bien de qué se trataba

Me aclaré la garganta intentando llamar su atención pero ni se inmutó. Confundido caminé hasta ella agachandome a su altura logrando que por fin me mire

K: Hola, amor. No te ví llegar -dejó un beso en mi frente-
R: Te grité desde abajo pero nadie respondió, y llevo rato mirándote pero ni te inmutas, ¿Está todo bien?
K: Si, cariño. Todo bien

Asentí poco conforme viendola ponerse de pie caminando hasta el baño en donde se demoró un buen rato. Es extraño porque parecía que la escuché llorar

Me cambié de ropa esperando que salgs pronto y me cuente qué está pasando pero nada. No salía y comenzaba a preocuparme

Toqué la puerta varias veces obteniendo una mínima respuesta de su parte. Lleva días así, desde que volvimos de Brasil precisamente

Algo preocupado llamé a Isabella para preguntar respecto a la actitud de mi esposa pero ella se limitó a decir que tampoco sabe que le pasa. Que quizá se trata de esos raros mareos que ha estado teniendo

Pero para mí es algo más que eso, Karol no es de ocultarme nada, y si se tratara de los mareos ella me lo dijera. Aparte, desde que llegamos a Italia sus malestares desaparecieron

K: Te llamo en cuanto la cena esté lista, y después quiero hablar contigo -asentí viendola salir-

Aproveché ese tiempo para finalizar algunos informes y demás cosas de la empresa. Aunque Leonardo comienza a integrarse no maneja muy bien las cosas

La incomodidad y ansiedad por saber qué estaba pasandole a mi esposa no se iba, y por ende comenzaba a preocuparme mucho más de lo que ya estoy. Incluso tuve que hacerle una llamada más a mi prima suplicándole que me diga lo que está pasando

Pero ella solo rió con fuerza diciéndome que la noticia me iba a encantar. Y que ya deje de llamarle a cada rato porque iba a terminar apagando el teléfono

K: Rugge, la cena está lista -avisó desde la puerta- baja pronto que tenemos visitas
R: Yo solamente quiero que me digas qué está pasandote
K: Amor, confía en mí cuando te digo que está todo bien
R: Pues con tu actitud no parece

Tomé su mano algo molesto para bajar pero ella me detuvo mirándome mal. Golpeó mi brazo y mordió mi mejilla antes de hablar

K: No me pasa nada, y sí voy a decirte lo que quieras saber pero no ahora, después
R: No quiero visitas
K: Amor, Adara está aquí -sonreí abiertamente- ahora deja tu mal humor y vamos

Bajamos corriendo hasta la sala en donde Adara jugaba y reía con Giovanna mientras Candelaria platicaba con la tía de Karol. La pequeña levantó la mirada y gritó fuertemente “papá” antes de levantar sus bracitos hacia mí

La tomé en brazos besando su mejilla antes de saludar al resto con una sincera sonrisa. Karol pidió que pasemos a la mesa y así lo hicimos

En la mesa se inició una charla respecto a nuestra luna de miel en donde Karol no dudó en contarles lo de mis conquistas. Lo que molestó a Candelaria y terminó armandome una escenita de celos

Ni siquiera Karol que es mi esposa reaccionó así cuando se enteró de todas lad chicas a las que conquisté. Pero Candelaria que no es nada para mí comienza a armarme una loca escena

Para evitar la tensión Karol cambió de tema radicalmente sonando algo molesta. Se que aún le cuesta aceptar la relación tan estrecha que estoy obligado a tener con la madre de mi hija, y me siento culpable

B: Karol, hija. Queríamos avisar que mañana volvemos a México -pude ver la tristeza en su rostro mientras asentía-
R: ¿Y por qué no quedarse?
G: ¿Quedarnos? No podemos, no tenemos nada aquí
R: Pero podrían tenerlo si quisieran. Piensenlo, podrían quedarse mientras arreglan su situación en el país aquí con nosotros. Y en cuanto ambas sean ciudadanas legales pueden armar su vida aquí

Se miraron algo indecisas mientras Karol apretaba mi mano con fuerza bajo la mesa. Se que esa idea le ilusiona demasiado

G: No tenemos el dinero para pagar un abogado
R: Mamá podría ayudarlas, estoy segura de que la va a encantar, y más sabiendo que es por la felicidad de esta niña
B: Me encantaría poder estar a tu lado para cuando vengan los niños y decidas hacerme abuela
K: Si tía, serás la abuela de mis hijos porque para mí fuiste más que mi madre
R: Entonces.... ¿Se quedan?
G: Nos quedamos

La expresión de felicidad se hizo evidente en el rostro de mi hermosa esposa quien se lanzó a abrazarlas. No paraba de repetir que esa había sido su mejor elección

Cande: Espero que quede claro que la habitación que mi hija tiene aquí no va a ser tocada
K: Nadie va a tocar esa habitación, Candelaria. Estoy segura de que a mi tía y a mi prima no les va a importar compartir habitación mientras solucionan todo
R: Pero aún así sobra una habitación
K: De eso quería hablar, y aprovechando que estamos reunidos les quiero dar una noticia -se puso de pie mirándome sonriente- se que quizá es muy pronto para ustedes, pero las cosas han sucedido así y me encanta. No planeamos esto porque nunca pensamos en cuál sería el momento adecuado
R: Dilo ya, amor
K: Estoy embarazada de dos semanas
Cande: ¡Esto tiene que ser una broma!

¿Pero qué le pasa?

¿Cómo mirarte?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora