CAPITULO LXI EL PASADO NO MUERE SOLO SE OCULTA

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A penas era la hora gris del día, si… esa hora gris donde no es día, no es noche, esa hora en que las abuelas solían decir que las almas regresaban a sus tumbas o a las sombras de su dolor…

Antes que el día empezara y el primer rayo de la mañana alumbrara las tierras con aroma a cafetal, Camilo ensilló un caballo pardo, con solamente su odio a cuestas, y sus deseos de vengarse en el corazón. 

Durante unas dos horas cabalgó sin descanso, hasta que llegó a un pequeño pueblo, lleno de verdor y tranquilidad,  lo había conocido muchos años antes de que llegara la explotación de las minas de jade, por aquellos tiempos era solamente un caserío sin nombre, ahora era tan diferente. 

Una hermosa mujer de altura mediana, ni flaca ni gorda, con cabello al hombro y un tinaco de agua en la cintura se atravesó a su paso, y con un sonrisa coqueta fue su primer contacto agradable con la humanidad en muchos meses.

buen día caballero, bienvenido a la estanzuela, puedo ayudarle en algo

Camilo solamente pudo pensar en su asquerosa facha y lo viejo que se sintió ante aquella joven de cuerpo voluptuoso y atrayente, hacia tanto que no tenía en sus brazos a una hembra tan hermosa – pensó para sí mismo.

Buen día hermosa señorita, estoy algo perdido, aquí todo ha cambiado, no es la sombra de lo que conocí hace más de veinte años.

La joven soltó una carcajada entre burlona y de vergüenza

no sabría decirle señor, solamente yo tengo veinte años, pero es verdad, esto ha cambiado desde que vinieron las mineras a sacar eso que llaman jade y que dicen es muy caro en el extranjero, pero si busca a alguien aquí todos nos conocemos bien.

Entiendo,  creo que si necesito ayuda o no daré jamás con la persona que busco, es más no se siquiera si se encuentra con vida todavía, lo último que supe es que se vino a este pueblo a poner una pequeña hacienda productora de lácteos

Si sé de quien me habla, es un hombre muy mayor, pero si está con vida, y no es una pequeña hacienda es toda una empresa que surte este pueblo y a seis o siete de los alrededores, pero a todo esto quien es usted

Bueno mi nombre es Camilo y soy un viejo, muy viejo amigo del señor Victoriano Moreira,

Imagino, bueno mire siga por ese camino de tierra que ve

Ese que parece no tiene fin

Si, pero no es tanto como parece, cuando llegue al primer crucero gire a la derecha, ahí vera un pequeño rotulo que según tengo entendido dice Finca Esther, yo no sé leer pero me han contado nada más que eso dice nombre, y que es por la esposa del señor

Aún está viva doña Esther?

Si, es mucho más joven que él, ahora viven solos, sus cinco hijos han migrado a la capital o se han casado

Ya, y si quisiera verte de nuevo donde te puedo encontrar?

A mi señor?

Si, no sé podría invitarte a comer, quiero tener una deferencia con tu ayuda

EL ALMA QUE ACOMPAÑA A LA MUERTEDonde viven las historias. Descúbrelo ahora