Capítulo 33: La oscuridad en nosotros.

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Capítulo 33: La oscuridad en nosotros.


"El mal es poco espectacular y siempre humano, y comparte nuestra cama y come en nuestra propia mesa." W. H. Auden.


Cafetería del Hospital de Solomon:

Con los dos café ya listos sobre el mesón, ella apuntó unos trozos de pasteles en el mostrador: uno de arándanos y otros de maracuyá, luego se giró hacia la vendedora y le extendió una Black Card* que la dependiente cogió abriendo los ojos al máximo y cogiéndola como si se tratase del Santo Grial, sonriéndole, Eowyn esperó que le cargaran los costos y se giró hacia las ventanas, sentado a una mesa y mirando distraídamente al exterior, Ian esperaba en silencio y sumido en una gran angustia. Ese chico... había cambiado... Tras un minuto la vendedora le devolvió la tarjeta metálica y le entregó las compras sobre una bandeja, la joven de la melena albina las recibió y se giró hacia el lugar donde él le esperaba. Dejándole el espresso y el pastel de arándanos al alcance, se acomodó en la silla del frente mientras ordenaba sus propios alimentos.

-¿Sigues comiendo como un monstruo...? -preguntó Ian al ver los 10 pastelitos de maracuyá ante la chica-. ¿Cómo diablos no engordas...?

-Gasto mucha energía, soy como Barry Allen.**

Ian sonrió, vio como ella guardaba una Tarjeta Centurión en un bolsillo interno de su chaqueta y se concentraba en su Caramelo Macchiato, para tener una tarjeta negra como esa seguramente a ella le estaba yendo bastante bien... seguramente mejor que Mikael en su mejor momento siendo assassin... ¡Diablos...! ¡¿Qué estaba sucediendo...?!

-¿Has escuchado hablar de los Jlystý? -preguntó ella.

Él le miró... ¡carajo! ¡¿Ya se había comido 2 de los pastelitos?! Esa chica definitivamente tenía un estómago imposible... Pero obligándose a concentrar en lo que le preguntaban, se apoderó de su café negro y removió sus recuerdos.

-Los jlystý o khlysty, que significan flagelantes o azotados -respondió Ian-, también llamados Gente de Dios, eran un grupo sectario separado de la Iglesia Ortodoxa Rusa, escisión de la Iglesia de los Viejos creyentes, el cual fue fundado por Daniil Filippovič en 1631, en la provincia de Kostromá, Rusia.

-Exactamente -asintió ella hundiendo su tenedor sin compasión en su tercer pastel-. Según su doctrina, Jesús se reencarna periódicamente en un ser humano; el intercambio físico con este elegido (en quien habita un dios o bien el fuego de dios), terminaría por abolir y transformar el pecado en virtud. Enseñaban que dentro de cada ser humano habita una pequeña chispa divina -la llama interna-, y el reconocimiento de esta esencia mágica dentro de cada hombre era suficiente para liberarse de cualquier tipo de restricciones, ya fueran sociales, sexuales o intelectuales.

La Legión del Caos (Temporada 1) [Eldarya]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora