art ;; e. barrett

❀ O22

Mi corazón empezó a latir demasiado rápido. Ninguno de los dos dijo nada, fue un silencio que pareció durar horas. ¿Hablaba en serio?, no parecía estar jugando. Y ¿Como iba a rechazarlo? Estaba ahí, parado frente a mi,  con lagrimas rodando por sus mejillas y un ramo de rosas.

    Me acerque y limpie sus lágrimas para después besarlo con desespero. Un mes sin él fue de lo peor y ahora lo necesitaba, lo necesitaba o juro que moriría ahí mismo.
—También te amo, Emerson Barrett— Sonreí contra sus labios y el me miró a los ojos con un brillo en ellos, con la ilusión al máximo.  Como un niño recibiendo un nuevo juguete —Te amo demasiado
—Entonces si me amas tanto...— Me sujeto de la cintura —Aceptaras ser mi novia
—No se...— Acaricie su pecho con una sonrisa coqueta —Tienes que convencerme
    Él sonrió cerrando la puerta detrás de si y dejando el ramo a un lado. Luego lo pondría en agua
—Como usted desee— Me alzó sin previo aviso y comenzó a besarme con brusquedad. Como pude abrí su camisa y cuando por fin llegamos a los pies de la cama me deje caer sobre el colchón. Emerson se subió encima mio y siguió devorando mis labios mientras yo abría su pantalón. Em simuló una suave embestida sobre la tela de mis bragas que me hizo jadear. Inmediatamente adentro dos dedos por mi ropa interior hasta comenzar a jugar con mi sexo haciéndome soltar gemidos suaves. No quería que me hiciera esperar pero sus claras intenciones eran hacerme sufrir, hacerme rogar por tenerlo dentro de mi.
    Aquella noche nos quisimos de una manera distinta, más especial.

    Para la mañana, no estaba a mi lado, supe que se encontraba en la ducha pues el sonido del agua cayendo era claro. Imagine el agua caliente recorrer su espalda mientras pasaba sus manos por su cabello, inmediatamente me sonroje ante tal pensamiento y trate de alejarlo inmediatamente. Cuando pasaron quince minutos, salió del baño con una toalla al rededor de su cintura. Me mordi los labios y sonreí pícara
-¿Eso es mio?
    Sonreí ampliamente levantandome de la silla del escritorio para caminar hacia él. Emerson se acercó peligrosamente hacia mi y llevó sus manos a la toalla
-Todo esto- Dejo un suave beso sobre mis labios y se quitó la toalla para poder vestirse. Hice un enorme esfuerzo para no bajar la mirada y lo conseguí, aquel idiota parecía esforzarse para que lo viera bien, pero no lo haría,  al menos no en ese momento.

~•~

-Todos nos están mirando
    Murmuré para ambos y el rio cómo si aquello no le importará. ¿No te importa que la loca de tu ex novia y sus clones me estén matando con la mirada?
-¿Acaso es importante? Digo, que apecien lo hermosa que eres
   Rodé los ojos y senti clmo tomaba mi mano y la llevaba hasta sus labios para dejar un beso sobre el dorso de esta. Más de uno abrió la boca sorprendidos.

    Leith no tardo en llegar con su arrogancia flotando por los aires. Era un idiota que emanaba superioridad, me repugnaba, desde aquel beso empezó a repugnarme.
-Estas guapa, Danna
   Sonrió ampliamente y Emerson apretó mi mano con fuerza. Emerson por dios, tranquilo, el homicidio sigue siendo ilegal
-¿Te interesa mi novia?
    Preguntó frunciendo el ceño y soltandose de mi agarre. Emerson, controla tus nalgas.
-¿Novia?- Carcajeo cómo si aquello fuera la mayor broma del mundo. Note inmediatamente que la gente comenzaba a hacer un círculo al rededor de nosotros. Entre ellos una de las amigas de Natalie. ¡Huelo a muerta! -Claro, a ver cuanto tardas en dejarla por otra
-¿Dejarla?- Me puso detrás de él, la tensión se sentía en el aire, olía a muerto, Remington olía a muerto -No lo creo, me he enamorado de ella y ninguna otra persona puede hacerme cambiar de opinión. Busca una vida, Remington y deja de andar viendo como chupas la felicidad y la paz de la gente.
-Hablo el imbécil que deja que su papi le pegue- Soltó de gratis. Sentí como algo dentro de el castaño se removia, era un golpe verdaderamente bajo, y exponerlo así ante todos, era lo peor que Leith pudo hacer. Falto poco para que Emerson se le aventara encima como una bestia cuando alcance a detenerlo, lo hice mirarlo y lo bese con suavidad, no sabia como calmarlo pero aquello pareció funcionar pues relajo su entrecejo y una pequeña sonrisa se dibujó en sus labios
-Vamonos, el homicidio es ilegal
   Rei suavemente.

Natalie.

-¡Natalie!
   Chilló una voz haciéndome levantar la mirada con el ceño fruncido
-¿Que quieres, Rachel?
-Soy Raquel- Murmuró y continuó -¿Te has enterado?
-¿De que? Habla rápido, estoy ocupada
-¡Emerson se hizo novio de la tipa del pelo teñido!
-¿Cual de tantas? No seas imbécil, Sophie, hay como diez chicas con el pelo teñido
-Me llamo Raquel- Murmuró otra vez y continuó -¡Ugh! Dasha, Dalia...
-¡¿Danna?!
   Chille horrorizada haciéndome para atras en el asiento. Ella inmediatamente asintió

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Wele a coñiza man