Historia que técnicamente no es una historia pero que podría serlo

Arte

Alguien y el amor

No me merezco ni uno ni dos ni siquiera tres poemas,
me merezco mil.

Pagaría para que alguien me convirtiera en arte.
Pagaría para que alguien me mirara
y decidiera que yo soy lo suficientemente especial como para escribir,
dibujar,
cantar
o pintar sobre mí.

Sé que nunca me va a pasar porque el amor romántico es así,
una simple farsa, una invención.

Siempre he deseado que alguien me mirara cuando nadie más lo hacía. Siempre he querido que me enviaran una carta,
o que se presentaran en mi porteria a las tantas de la noche porque
"las personas que se quieren no se pueden ir a dormir estando enfadados".

No creo que alguien sea capaz de hacerme algo de eso
porque no tengo nada especial,
nada que resalte entre la multitud. Porque no soy nadie.
No tengo unos ojos que recuerden al mar,
como tampoco tengo un cuerpo para esculpirlo,
mucho menos tengo una personalidad como para escribir sobre mí.

Cuentos de hadas y princesas que necesitan ser rescatadas.
No, no es eso lo que quiero,
solo deseo que me mires,
pero que me mires bien,
que me veas y susurres
no te vayas nunca por favor.

Nadie haría arte sobre mí,
pero aún así,
me merezco miles de poemas,
cientos de pinturas y retratos,
y muchas canciones de amor.

Todos nos lo merecemos,
porque todos en algún momento hemos visto a alguien como arte,
y es nuestro turno.