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“Enfrentamiento”

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“Enfrentamiento”

Taehyung estaba preparado para su próxima sección, jungkook no había pasado palabra con el durante 2 horas, las cuales fueron como una eternidad para el menor, el pelinegro parecía cansado, sin olvidar el puchero que adornaba los labios de aquel desde que llegó, jungkook no sonreía, no le hablaba, simplemente nada.

Quizá fue por el beso.

Taehyung se alarmó, ¿y si el pelinegro lo odiaba?, temía lo peor, pero joder..

Fue su primer beso.

Taehyung no lo pensó, y decidió acercarse al pelinegro por impulso propio, mientras más se acercaba los nervios empezaron a traicionarle.

El pelinegro lo miro con el ceño fruncido, masajeo el puente de su nariz cerrando lentamente sus ojos y al pasar unos segundos volvió a abrirlos.

“Taehyung” fue lo único que dijo, su voz era profunda y ronca. El menor se sobresalto.

Quizá no era el mejor momento para hablar con jungkook, después de lo que pasó aquella noche no tenía el valor suficiente para enfrentarlo y hablar como hombres responsables, algo que taehyung no era.
Hizo una leve reverencia y prácticamente corrió fuera del cuarto de secciones, jungkook simplemente miro como se alejaba, no dijo nada.
Taehyung llegó a la recepción y se sentó en uno de los sofás decorativos del lugar, mordía su labio con fuerza, sus pies no dejaban de temblar, en aquel momento que prácticamente huyó del pelinegro tropezó como 3 veces seguidas, por suerte no llegó a tocar el suelo, pues la temática de hoy para las fotos tenía que vestir en baños menores y su piel descubierta se hubiese rasguñado al caer.
Inhalo tratando del calmar su respiración, sintió un toque en su hombro y perdió todo el aire que antes tenía en sus pulmones, se ahogo con su saliva, recibía pequeñas palmadas en la espalda y leves caricias en su cabeza.
Miró rápidamente a dicha persona, había cambiado demasiado, ya había pasado una semana sin ver a dicha chica, deberás esta jodidamente guapa, la mandíbula de taehyung casi tocó el suelo al ver a dicha chica con una sonrisa deslumbrante en su rostro.

“TaeTae, ha pasado mucho, ¿no?”— dijo la ahora peligris con sus mejillas ardientes al admirar el cuerpo de su menor.
Taehyung se levantó de golpe y sostuvo los hombros de dicha mujer, no tenía palabras para expresar la alegría que sentía al verla, se olvidó de todo y la abrazó fuertemente, aquella chica correspondió a su abrazo rodeando el cuello del menor con sus ligeros y delgados brazos y junto sus frentes, nadie diría nada, ella es su ¿mejor amiga?.

—“É-es..tas hermosa”— dijo mostrando su sonrisa geométrica a la chica. Aquella juró haber mojado sus panties en cuestión de segundos.
“No tanto como tú, por Dios, mira ese cuerpo, ¿has hecho más ejercicio ahora?” ella rió fuerte llamando la atención de algunos empleados, incluso la de jungkook el cual había salido a buscar a taehyung.

El pelinegro ardía, juraba botar humo por las orejas, presionó fuertemente la carpeta que tenía en mano, esa carpeta contenía las temáticas de la semana, al jungkook recordarlo rápidamente se alarmó y trató de arreglar el desastre que había hecho con esos papeles.

“No..no he hecho ejercicio, pero gracias..” taehyung rió tímidamente, se separó de la chica observando a su alrededor, pudo sentir la mirada del pelinegro sobre su nuca, le miro por unos segundos y al conectar sus  miradas volvió a mirar a la chica y tomó su antebrazo para ir a la Oficina de su padre la cual ahora se encontraba vacía, ya que su padre estaba de viaje durante un largo plazo de 3 meses.

Antes de cerrar se aseguró de que nadie lo siguiera, volvió a mirar a su mejor amiga y la abrazó fuertemente, extrañaba verla con esa radiante sonrisa.

“Ha pasado tanto, te extrañe mucho.” escupió sintiendo sus ojos arder.

—Yo también te extrañe, TaeTae, estoy muy feliz de verte, en serio” y claro que lo estaba, estaba felíz de ver a su objetivo para llegar a la fama.

Taehyung siempre fue tan ingenuo que ni siquiera notó la manera tan posesiva en la que aquella lo utilizaba, cuando lo abrazaba incluso cuando le miraba o hablaba, pero ahora las cosas serían difíciles, tenía un rival, oh si.

•••

Ya era hora de la sección, jungkook estaba buscando a taehyung por toda la empresa, no había señales de él y joder empezaba a hartarce de esto, escuchó ruidos en la oficina personal de su jefe, el padre de taehyung.

Escuchaba...¿gemidos?

“Taehyung, a-ahm.”

La piel del pelinegro se erizó, rápidamente golpeó la puerta, casi la tiraba y vió dicha escena.

Taehyung masajeaba los pies de dicha mujer.

Pobre jungkook.

Gucci.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora