Photography

1.2K 149 49
                                    

Cuando Tata llegó, no tenía nada más que a su robot. No sabía a dónde ir o con quién hablar; estuvo muchos días merodeando por los alrededores de BT21land. Cansado de no tener éxito, decidió acostarse en el suave pasto del campo, miraba las nubes mientras comía algunos manjares de su planeta junto con su robot Van; cuando de pronto, pudo reconocer una sombra a lo lejos que lo miraba desde el bosque. Muy extrañado por lo sucedido, Tata se adentró en él y buscó alguna clase de ser vivo para ser su amiguito.

Caminaba por todo el bosque admirando las flores y abejitas cuando a lo lejos, vio a un ser extraño; Tata decidido, se acercó para entablar una conversación.

─ Hola terrícola, mi nombre es Tata y quiero ser tu amiguito─ sonrió mientras estiró su pequeño bracito.

─ Hola Tata, mi nombre es Mang pero por el momento no busco amiguitos.

─ ¿Por qué no?─ se entristeció─ Yo quiero ser tu amiguito.

─ Es que mis amiguitos siempre terminan dejándome─ Mang agachó su rostro por pena al recordar a todos sus antiguos amigos, no quería admitirlo pero aún le dolía el hecho de estar tan solo.

─ Oh Mang─ el pequeño alienígena cogió el rostro del mencionado, lo acercó hasta el suyo para poder mirarlo directo a los ojos y transmitirle la confianza que necesitaba─ Sé que recién me conoces pero prometo que seré tu amiguito y no te abandonaré, lo juro por mi honor de Tata. 

─ Gracias Tata, supongo que un amiguito no hace daño─ ambos sonrieron─ Toma, te regalo mi camarita─ le entregó el pequeño objeto.

─ ¿Para qué sirve?

─ Es para que puedas guardar los buenos recuerdos, solo presionas ese botón y listo, lo tendrás para siempre.

─ ¿Entonces puedo usarla contigo?

─ ¿Conmigo, por qué?─ preguntó extrañado.

─ Es que nunca quiero olvidarte.

─ Awn, esta bien, puedes tomarme una foto si quie...

Pero Tata sin escuchar palabra alguna de Mang, sacó todas las fotos que pudo, desde cada ángulo

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Pero Tata sin escuchar palabra alguna de Mang, sacó todas las fotos que pudo, desde cada ángulo. Tata veía a Mang y por alguna extraña razón se sonrojaba, no sabía que era ese extraño sentimiento pero le empezaba a gustar. Mang por otro lado se sorprendía de lo rápido que era Tata y como era tan tierno al sonrojarse.

✦• TataMang Adventures Donde viven las historias. Descúbrelo ahora