Prostitutas. II

¿Quién eres, Víctor?

Narra Yanet: Victor tuvo que hacer un viaje de negocios. Sólo tenemos tres días  para reunir el dinero.

Estoy recibiendo una llamada...

Es de Alex.

- ¿Cómo tengo que pedirte que no me llames?

Yanet. No! Maldita sea, no! Juro por Dios que si te encuentro voy a matarte! Has llegado a tu límite! (Alex gritó) olvidé cambiar mi número ayer, bajale dos y dime que te pasa (grité con desagrado) Yanet secuestraron a mis hijos, los hombres de Víctor secuestraron a mis dos hijos y no tienen intenciones de devolvernos. Yanet vas a matarlos? Yanet, son lo único que tengo. Por Dios, dijsite que no querías saber nada de mi, ya me destrozaste, qué estás haciendo? Por Dios, no tengo ganas de vivir si quiera, me resigné a perderte, pero a ellos no, te juro que iba a alejarme de ti, mis hijos no tienen la culpa. Creí que te conocía hasta que mataste a mi suegro, pero creí que de verdad No iba por mi,

~ No nací pegado a ti Yanet. Siempre te he amado pero acabas de llegar al límite, puedes acabar con mi carrera, o limpiarte el culo con mi relación, puedes hacer lo que quieras conmigo, pero no permitiré que le pongas un dedo a mis hijos, me oyes...!?

- De qué estás hablandome?

Devuelveme a mis hijos por favor. Son lo más sagrado que tengo (gritó llorando)

- pero si yo no conozco a tus hijos si quiera...!!!

Yanet, por Dios. No me digas que esto es por Chantal aún. Yo- yo no sé como más pedirte perdón, pero con mis hijos no... por favor - decía entrecortado.

- A ver...!!! -dije.

Yanet, vinieron a mi casa, violaron la seguridad, mataron a la nana de mis hijos. Se llevaron el dinero, llamaron por telefono y lo único que dijeron fue "te manda saludos Yanet "

Se- secuestraron a tus hijos!? No! Debe haber un error, yo- no hagas esto Yanet. Estás hiriéndome (dijo).

A ver Alex, te juro por mi vida. Yo - espera. (Dije al cogar al ver que llegaba Víctor.

En qué diablos estás pensando!? (grité llena de rabia al verlo llegar) Veo que la noticia llegó primero que yo. No me gusta ser el segundo (dijo en tono de burla) son solo niños, no tienes por qué meterlos en esto (le grité) debieron pensar eso cuando secuestraron a Dilang (me dijo) esto no es por Dilang (dije al mirarlo) hay algo más (volví a decir) cálmate yanet, apuesto a que si no fueran los hijos de tu noviesito no estarías así, ni si quiera te importaría una mierda! No creas que pienso que de un momento a otro, te agradan los niños, bien? Ellos tienen algo que nos pertenece y van a devolverlo.

¿Qué harás si matan a Dilang? ¿matarás a esos niños? (me controlaba la ira en ese momento) aún sin matar a Dilang... mataré a esos niños (me contestó al irse)

- Me quedé pasmada. Realmente no reconozco este hombre. No voy a permitir que le hagas daño a esos niños! - De ningun modo.

- Me dedicó una sonrisa y se marchó.

Se me está explotando la cabeza. Victor se ha vuelto loco.

No pude dormir en toda la noche.

Al día siguiente: bajé las escaleras y me dirigí la cocina, cuando de repente escucho a Victor hablando por teléfono en la antesala:

Me acerqué y escondí detrás y debajo de una mesa que es parte de la decoración.

Sigilosamente me moví e incliné para poder escucharlo...

Deja de estar lloriqueando.

Ah, sí? Entonces... ¿por qué no hablas con tu hermanita? Después de todo ella fue quien te metió en esto, podía secuestrar a Dilang, podía matar a Yanet. Pero tuvo que ir por mi hermana, porque sabe que yo fui quien ayudó a Yanet, pero pensando como personas razonables? Crees que si hubiese querido matar a macho, o matarlas a ustedes... ¿no lo habría hecho? ¿Qué me lo impide? Hace mucho que planeaba matar a mi padre, me pareció conveniente encontrar a Yanet en la cárcel y ofrecer mi mano amiga, ambos salimos ganando, y ahora todos o casi todos los puntos donde vendía macho, me pertenecen, la mayoría de sus hombres ahora me pertenecen y si tú y tu hermana siguen vivas es porque no me habían molestado hasta ahora, Pero voy a decirte una cosa, primero voy por tus hijos, luego por ti, y cuando ella vea la gravedad del asunto...

- Me callaré y dejaré de hablar ya que quien mucho abarca, poco aprieta, si quieres que tus hijos vivan  tendrás que hacer todo lo que yo te diga.

- ¿Cómo sé que no los vas a matar?

- Te doy mi palabra como hombre.

- No creo en tus palabras.

- Creo que no estas en condiciones de libre albedrío.

De acuerdo, que me asegura que mis hijos están vivos, que los tendré conmigo, sabes que jamás me he metido contigo y mis hijos son lo único que me importa, yo haré todo lo que me pidas, pero sólo me estoy confiando en tu palabra, demuestrame que están vivos! Una foto, dime que hacer.

No puedo darte más detalles por aquí, mandaré a mis hombres a buscarte mañana, te llevarán a un lugar donde nos veremos, hablamos después.

Víctor levantó del asiento. Me levanté, me levanté rápidamente también.

- Auch! -mierda.

Me golpee la cabeza con la esquina de la mesa

Víctor escuchó y volteó a verme

¿Qué escuchaste? (preguntó enojado y a la vez sorprendido) lo suficiente (dije haciéndome la víctima) - me marché antes de que pudiera decir algo.

Detente ahí (gritó mientras me seguía) porque eso fui para ti, no...? un objeto, una marioneta la cual manipulabas a tu antojo y con el único fin ¿de qué? pudiste mandarlo a matar sin utilizarme, sin "ofrecer tu mano amiga" eres una mierda (le grité al mirarlo) Yanet, no lo entiendes (gritó) no! claro que no lo entiendo... (empecé a llorar y salí corriendo) y sabes cuando pasa esto? justo cuando empiezo a confiar en tí (dije con la voz entrecortada, con la respiración agitada, tensa, sollozando) lo dije de tantas maneras, sintiendo en extremo cosas diferentes y a la vez totalmente semejantes creía que mentía, pero lo sentía.

El se acercó para calmarme. - Ni lo intentes (alcé mis manos al nivel de mi pecho hasta hacerlo detener) no tengo como defenderme, has escuchado todo, ya lo sabes. Lamento haber dicho eso (respondió) lamentar? no es eso un sentimiento? no tienes sentimientos Víctor (lo miré con ira e indiferencia antes de marcharme).

- yo! -dijo.

- Tú nada, -interrumpí.