One-Shots Sidlink ( Breath of the Wild - Yaoi )

Bendición

Sidon se encontraba aterrado... Su mejor amigo, y también la persona que amaba, estaba frente a él, en sus brazos, gravemente herido...

Tenía una herida en su costado que no paraba de sangrar, el rubio escupia sangre mientras sujetaba con las pocas fuerzas que le quedaban la mano del Zora.

- S-Sidon - habló con un hilo de voz.

- Shhhh... Guarda tus fuerzas... Tranquilo, e-estarás bien... - le respondió el ojiambar.

El príncipe no dejaba de culparse...

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Link dijo que podía vencer al guardián que se había instalado en  barranco de Ruto... Que estaría bien, que no se preocupara...

Pero Sidon no lo escuchó... Sabia lo feroces que podían ser los guardianes, y temía por la vida de su amado... Por lo que decidió seguirlo.

El rubio tenía la situación controlada, se había encargado de cortar casi todas las patas mecánicas del guardián para tenerlo inmovilizado y atacarlo con mayor facilidad, estaba a punto de cortar la última extremidad d guardián cuando vio a Sidon acercándose... Y no solo el lo vio, el guardián también noto la presencia del príncipe Zora y se preparo para atacar al ojiambar.

Link se abalanzó sobre el guardián y le dio una última estocada en su ojo, pero al mismo tiempo, el guardián atravesó el costado del ojiverde con la extremidad que le quedaba.

El guardián se desactivo, quedando inerte... Pero el ojiazul cayó al suelo mientras su costado comenzaba a sangrar. El Zora, alarmado corrió hacia el espadachín y lo cargo con cuidado en sus brazos.

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- S-Sidon... - el ojiazul tenía apenas un hilo de voz - N-no te preocupes... Todo estará bien -.

- ¡¿Como dices eso?! ¡E-Estas gravemente herido! - el ojiambar estaba aterrado, trataba de pensar que podía hacer... No alcanzaría a llevarlo al dominio Zora, además de que Link no soportaría el viaje. El rubio comenzó a cerrar los ojos... Sidon sentia como su respiración se agitaba.

- N-No Link... Por favor abre los ojos, quedate conmigo.... Por favor... - el ojiambar comenzó a derramar varias lágrimas que caían sobre el rostro del espadachín - Link... No me dejes... Te lo suplico - el príncipe le rogaba a las deidades protectoctoras de Hyrule que protegieran al Hyliano.

Entonces... Su plegaria se cumplió...

Unas pequeñas gotas de agua resplandecientes rodearon la herida del rubio, esta comenzó a cerrarse lentamente... Y junto al rubio estaba nada más y nada menos que el espíritu de la princesa Mipha, la campeona Zora.

- ¡¿O-Onee-chan?! - exclamó sorprendido el de dientes afilados, pero la campeona posó su dedo índice sobre sus labios, en señal de que guardara silencio.

- Shhhhh... Dejalo dormir, debe estar agotado - dijo con una dulce sonrisa en su rostro, mientras acariciaba los cabellos dorados del espadachín - Se ve tan tranquilo cuando duerme... -.

- Onee-chan... ¿P-Pero como? ¿Que haces aquí? -.

- Sidon... Pequeño, yo siempre estoy velando por ustedes - la Zora acaricio con ternura el rostro de su hermano, como si de un niño pequeño se tratase - Aún cuando tu no me ves... Yo estoy ahí... -.

El ojiambar sujeto con fuerza una de las manos de la princesa, mientras la presionaba con fuerza contra su mejilla.

- Hermana... Me has hecho tanta falta estos 100 años -.

- Lo sé Sidon, me gustaría haberte venido a ver antes... Pero mi espíritu estaba encerrado en Vah Ruta, al igual que el resto de los campeones... Por suerte Link nos libero a todos al vencer a los monstruos de Ganon que había dentro de las bestias divinas - la campeona Zora dio un pequeño suspiro - Sidon, pequeño... -.

- ¿S-Si? -.

- ¿Por qué no le has dicho a Link lo que sientes por el? - el príncipe la miro asombrado mientras se sonrojada hasta quedar del mismo color que sus escamas.

- H-Hermana... Y-Yo se que lo que sientes por Link... Y yo jamás haría algo que te lastimara - el ojiambar bajo la mirada avergonzado.

- Lo sé... Pero yo ya cumplí mi misión aquí en el mundo terrenal... Ganon fue derrotado... Es hora de que acompañe a los demás campeones en el mundo de los espíritus, pero antes de eso vine a darte mi última voluntad... - Sidon la miro atentamente - Se feliz con Link -.

- ¡¿Q-Que?! P-Pero... Tu lo amas... Tu lo amas desde hace más de un siglo -.

- Si, lo amo... Pero yo ya no estaré aquí, además Link nunca sintió ese tipo de amor por mi, el solo me ve como un hermana mayor, al igual que tu... Además, alguien más es el dueño del corazón de nuestro héroe... Tu -.

El ojiambar no podía creer lo que estaba escuchando... Link... ¿Lo amaba?.

- No permitiré que dos personas que se aman no estén juntas por mi causa... Sidon, tienes mi bendición... - la princesa se acerco a su hermano y le dio un delicado beso en su frente - Ama a Link cada día de tu vida y se feliz a su lado... Así es como honraras mi memoria - el espíritu de la campeona comenzó a desvanecerse.

- H-Hermana... Por favor no te vayas - le suplico su hermano.

- Sidon, cariño... Recuerda, yo siempre estaré aquí - la de escamas rojizas señaló el pecho del ojiambar, en donde estaba su corazón.

Y en un resplandor, la princesa se había desvanecido...

Sidon miraba como los fuegos fatuos que quedaban de apagaban lentamente... Sintió como el rubio se movía lentamente en sus brazos mientras abría los ojos.

- ¿S-Sidon? - el Zora sonrió mientras abrazaba con fuerza al ojiazul, este emitió un pequeño quejido, pues el príncipe tenía demasiada fuerza y sentía como le apretaba sus costillas sin darse cuenta.

- ¡Link! Gracias a Hylia que estas bien - el ojiambar lo tomo de las mejillas y le dio un dulce beso en sus labios, el espadachín abrió los ojos como platos al inicio, pero enseguida correspondió al beso mientras rodeaba el cuello del príncipe con sus brazos.

Sidon se levantó mientras cargaba al rubio entre sus brazos, el Hyliano lo miraba completamente sonrojado, sentía que su corazón se saldría de su pecho.

- Link... Te amo - exclamó el de escamas rojizas con una enorme sonrisa en su rostro.

- Y-Yo también te amo Sidon - le respondió el ojiazul mientras besaba su mejilla con ternura.

El Zora dejó al Hyliano en el suelo para acercarse al borde del barranco, tomó aire y puso sus manos alrededor de su boca.

- ¡Que me oiga todo el reino de Hyrule! ¡¡¡Yo, el príncipe Sidon amo a Link con todo mi corazón!!! - grito felizmente mientras Link se paraba a su lado imitandolo.

- ¡¡¡Y yo, Link héroe de Hyrule, amo con locura a Sidon!!! - exclamó con una enorme sonrisa en su rostro.

Sus voces resonaron por toda la región gracias al eco que había en el barranco. Ahora que habían sido bendecidos, ninguno tendría que seguir guardando en secreto lo que decían.

Eran libres de gritar a los cuatro vientos lo mucho que se amaban.

(Mipha es la mayor fan del Sidlink)