Los pasos de ambos contra los caminos de concreto entre árboles y un pequeño riachuelo rodeado de piedras era lo único que necesitaban. No había una conversación, no había risas, ni llanto, sólo su andar acompañado del agua corriendo y el cantar de las aves.
Habían visto a la jirafa usada como atracción del parque, evitaron las miradas de algunos curiosos mientras sus dedos se entrelazaban al tomarse de las manos, como un par de adolecentes descubriendo el amor, ocultando los problemas que los seguían tras esa sonrisa tranquila de ambos.
El cielo se nubló, y en un instante ambos corrieron a resguardarse de la lluvia. Keith se cubría a sí mismo con la chaqueta roja sobre su cabeza, Shiro se cubría con una chamarra obscura que había llevado por casualidad, y que no había servido de mucho, de todos modos terminaron empapados al llegar al hotel.
Dejaron sus huellas de lodo camino a la habitación que habían rentado. cerraron la puerta tras de si, y ambos suspiraron al mismo tiempo, con los ojos abiertos de par en par, y una sonrisa bien marcada. Keith se encargó de romper el silencio con una diminuta carcajada avergonzada, mientras intentaba acomodar los mechones mojados pegados contra su frente para que no cubrieran sus ojos.
-Vaya, no creí que lloviera de nuevo-. Dijo justo antes de dar un par de pasos hasta la cama individual, sin sentarse por temor a mojarla.
Shiro no reaccionó al instante, se había quedado embobado en aquella sonrisa que Keith le regalaba, pero en cuanto volvió a la realidad, supo que no podían quedarse así.
-No puedes enfermarte ahora, Keith, la última vez que nos mojamos en la lluvia terminaste con fiebre, y debido a las circunstancias no podemos arriesgarnos-. Se acercó hasta el otro poniendo su única mano contra el hombro del contrario, esa mano acarició su cuello hasta llegar a acunar su rostro, cuya mejilla fue entibiada con su tacto.
Keith asintió con la cabeza. Con una mano sostuvo a Shiro por la muñeca, pero contrario a lo que el mayor creía, no se alejó, sostuvo su mano sin retirarla de su mejilla, y giró un poco su rostro para alcanzar a besarla con los ojos cerrados.
Las mejillas de Shiro se tornaron ligeramente rosadas, pero la obscuridad que les regalaba el cielo nublado ocultó su inocente rubor. Se inclinó ligeramente hacia adelante, alcanzando con sus labios la frente perlada en pequeñas gotas de agua del menor, y dejando sobre esta, un delicado beso. Keith se sintió enternecido por tal acto, y no hizo más, no se alejó, tampoco buscó un acercamiento más íntimo, sólo elevó la mirada topando sus ojos tornasol en los de Shiro, obscuros y con esa forma delineada y rasgada que eran lo único que realmente quería ver Keith por toda la eternidad.
-Debes ir a ducharte. Yo iré por la maleta a la camioneta-. Ambos se sonrieron el uno al otro, antes de separarse y tomar su propio camino. Keith hacia el baño mientras se quitaba la playera y la dejaba por ahí tirada en el suelo, y Shiro con una sonrisa embobada aún por la cercanía tan natural, cariñosa, y pura que podía tener con el joven, salió de la habitación.
La lluvia continuaba cayendo con fuerza. Salió al estacionamiento y buscó la camioneta, al encontrarla, abrió la cajuela y sacó una maleta de mano, cerró y subió de nuevo a la habitación, escuchando el agua de la regadera caer, aunque el sonido se confundía con el de la lluvia.
Sacó de la maleta un cambio de ropa más cálido para el menor, y fue a tocar la puerta del baño.
-¿Keith?
-Puedes pasar-. Se escuchó del otro lado de la puerta.
Shiro entró y dejó la ropa sobre la tapa de la taza del baño. Podía ver la silueta de Keith aún bajo la regadera, y el vapor saliendo de esta. Sonrió aún recordando el beso que se habían dado por primera vez, y salió sin hacer mucho ruido. Conocía a Keith, y si no se equivocaba, estaba muy ocupado pensando a solas bajo la ducha.
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KURO: Mirando a las Estrellas [SHEITH]
Fanfic"Hold you in my arms I just wanted to hold You in my arms" -Starlight [MUSE] Takashi Shirogane. Keith Kogane. Ambos destinados a estar unidos incluso en el peor de los casos.