KURO: Mirando a las Estrellas [SHEITH]

*~Reencuentro~*

El ambiente en Afganistán se sentía tenso hasta cuando no lo estaba. Cada paso era peor al anterior, algunas personas los miraban con extrañesa, otros más con repudio y unos pocos, con miedo. 

Shiro y Keith caminaron intentando no llamar la atención, pero era imposible, su aspecto y forma de vestir los resaltaba del resto, además había soldados por todos lados, un pequeño grupo afuera salvaguardando la seguridad de los viajeros. Era de esperarse, los problemas delictivos y terrorismo eran graves en aquel lugar, y bueno, Estados Unidos había decidido meterse una vez más. 

Shiro moría por más cercanía con Keith, más que nada, por la tensión que se colaba en su interior hacia su pecho, acelerando su corazón. Vaya que era horrible. 

El sol golpeaba con intensidad los rostros de ambos, perlando su piel en sudor. Ahí hacía un calor infernal sobre todo en esa época del año. 

-¿Quieres descansar? Podemos buscar en donde dormir-. La voz de Keith sobresaltó a Shiro, quien estaba totalmente perdido entre sus pensamientos. 

-Ah...-. Logró captar segundos después. -Será mejor que no. Debemos apresurarnos y averiguar todo cuanto antes.

-Pero Afganistán es enorme, no sabemos por dónde comenzar...

-No, nosotros no sabemos... a menos que...-. La mirada se le iluminó por unos instantes. El sitio de las estrellas, en donde estaba ubicada su base cuando estaba en la guerra. Recordaba ese enorme edificio abandonado, rodeado por una enorme extensión de arena y rocas enormes, alejada del resto de la población. 

-¿A menos que qué?

Shiro no respondió a la duda de Keith, comenzó a dar pasos más largos hasta llegar con el primer soldado que se encontró, un hombre joven afroamericano. 

-Disculpa, estamos buscando la antigua base del ejército estadounidense-. Shiro se notaba más brillante de lo que Keith esperaría. -Aquella que estaba junto a un edificio enorme abandonado y...

-¿Takashi Shirogane?-. El joven tragó en seco al verlo tan de cerca. 

-Sí, ese es su nombre, bueno ¿No dirás en dónde está la base?-. Keith llegó a la defensiva como la mayoría de las veces, defendiendo a Shiro de un peligro inexistente. 

-La base...-. Ryan Kinkade miró a su alrededor intentando recordar. -La verdad es que llegué aquí hace poco y desconozco si está bien o no dar esta información, pero al no tratarse de la base actual y de ser el verdadero Takashi Shirogane quien me lo pide... supongo que está bien-. Sacó de su bolsillo un pequeño mapa del lugar, el cual le mostró a Shiro, intentando encontrar en la hoja el lugar plasmado. Señaló a un pequeño punto tachado con tinta roja, estaba fuera de la ciudad, tal y como Shiro recordaba, así que ese debía ser. 

-Muchas gracias-. Shiro sostuvo el mapa entre sus manos y lo analizó un poco más. -Y descuida, nadie se enterará de que charlamos-. Soltó una risotada guardando el papel en su bolsillo.

-Descuida, solo debo hacer una advertencia. No sé en qué estado esté el lugar, pero deben tener cuidado, consigan un arma, cuentan que ahí ya está lleno de esa escoria humana,  y no estén por ahí solos. 

Keith se relajó al escuchar aquello, luego suspiró y sonrió alzando una ceja. -Eso no será problema para Takashi-. Y le dio un par de palmaditas al hombro del mayor antes de alejarse los dos del soldado Ryan. Lo había dicho para relajar la mente de Shiro. Confiaba en él y en que no ocurriría nada. Aún así, habría que ser precavidos. 

Pronto llegaron caminando a un área poblada, las pequeñas casas abundaban por las calles estrechas del lugar. La gente iba de un lado a otro, algunos con bolsos o canastos, comprando lo que podían con sus escasas monedas.