「Error」

「Resentimiento y arrepentimiento」 Pt.2

La cara de Mo Xuanyu cambió de color, tenía miedo, estaba asustado. En ese momento tenía tantas cosas que quería decir, quería levantarse y huir lo más rápido posible, pero su cuerpo se negaba a responder, sus labios se negaban a moverse. Estaba a punto de romper en llanto cuando el látigo ferozmente se lanzó contra él y golpeó con fuerza la cadena que lo aprisionaba.

El fuerte sonido del golpe resonó como un eco por toda la habitación. El cuerpo de Mo Xuanyu comenzó a temblar, las lágrimas bajaron por sus mejillas y cayeron sobre las cadenas que lo aprisionaban, pero sin hacer un solo ruido siquiera. Si antes estaba aterrado, ahora definitivamente sentía su alma escapar de su cuerpo.

Al ver la expresión de Mo Xuanyu, Jiang Cheng parecía haberse enfurecido aún más. Irritado por la vista ante sus ojos, gruñó.

—Mírate, un hombre adulto como tú llorando tan ridículamente. ¿Por qué lloras? ¿Es acaso que tienes algún cargo de consciencia?

Como si sus emociones se vieran reflejadas en su látigo, Zidian comenzó a aumentar su brillo, chispeando mientras Jiang Cheng pensaba bien qué hacer con el hombrecillo frente a él.

—Lograste la caída de una secta en una noche, te enfrentaste a cientos de cultivadores por tu cuenta, superaste a la muerte en más de una ocasión y aún así ¿debo creer que estás asustado en éste momento?

Irónicamente una sonrisa se formó sobre los labios de Jiang Cheng, a modo de burla, haciendo que Mo Xuanyu se crispara. Tan pronto como el pensamiento de peligro cruzó por su cabeza, Jiang Cheng volvió a levantar su látigo, arremetiendo contra Mo Xuanyu, sólo que ésta vez el golpe fue directo sobre su pierna, envolviéndose en ella en los segundos que Mo podía describir cómo los más atemorizantes de su vida.

“¡Voy a morir!” pensó.

Un dolor agudo subió por su pierna hasta su espina dorsal, hormigueando hasta su nuca. Estaba prisionero en la silla, por lo que sólo sus gritos pudieron delatar su dolor. Cuando Jiang Cheng retiró a Zidian, el dolor no disminuyó, en cambio, un fuerte ardor envolvió su pierna, sin poder evitar que Mo Xuanyu lloriqueara incesantemente, intentando zafarse de la silla.

—No eres ni la sombra de lo que solías ser...

Murmuró Jiang Cheng, como si lamentara sus actos, pero tan pronto como lo hizo, recordó su resentimiento.

—Dime, ¿dónde has estado los últimos trece años? ¿tienes una idea de cuánto he estado esperando por ti? ¿Sabes .. cuánto me he esforzado en encontrarte? Pero no importaba dónde, no importaba cuándo, nunca eras tú. ¿Tienes algo que decir a eso?

Por un momento la ira de Jiang Cheng había disminuido, inclusive Zidian había regresado a su primera forma. Ahora que había “descargado" su ira, parecía capaz de tener una conversación como una persona normal, sin embargo, Mo Xuanyu no comprendía la situación.

— Y-yo n-no sé de qué m-me está hablando....— no sólo su voz temblaba, también sus hombros lo hacían, delatando el miedo en todo su ser.

El gesto de Jiang Cheng se oscureció. Apretó sus puños en un intento por contener su rabia e hizo el esfuerzo por comprender.

—No te hagas el idiota conmigo, sabes muy bien a lo que me refiero.— Mencionó Jiang Cheng en palabras que salían como gruñidos de su boca. —¿O es que ya lo has olvidado?

—Yo... Yo no lo sé, no sé nada, no lo recuerdo, no lo conozco, no lo sé...— ver cómo la expresión del hombre delante suyo se oscurecía, hacia que Mo Xuanyu perdiera la noción de sus palabras, negando y lanzando respuestas al azar.

Su cabeza daba vueltas, él tan sólo quería librarse de su castigo, era la primera vez que lo veía, ¿por qué lo trataba así? Hace trece años él aún era un niño, en ese entonces ni siquiera la secta Lanling Jin tenía nada en su contra, ¿por qué ahora se encontraba en una situación así?