El príncipe árabe

Capitulo 14

— ¿Por qué Dahara?—pregunte indignada.

— vamos anímate, es una casa con lujos fiesta será genial Lauren, no seas una aburrida—respondió con frescura.

— claro que no Dahara, si Zayn se entera se molestara—se me escapo lo último.

— ¿Zayn? Uy... Lauren —burlo.

— ¿qué? –pregunte.

— ¿Son novios?—contesto con otra pregunta.

— ¡No!—reí.

— claro que si eres algo de ese príncipe odioso—acuso.

— No, como se te ocurre solo somos amigos—contrarreste.

— si Lauren soy tu mejor amiga, te conozco se nota que mueres por el príncipe—afirmo.

— no, Dahara—negué tratando de contener mi tonta sonrisa.

— a mí no me engañas ni a tu corazón—espeto.

— Por favor—reí.

Zayn

Esta visita me volvería loco no soportaba a Jadilla y para mas colmo papa me dijo que le diera a conocer más el palacio. Mientras caminaba ella solo hablaba de la boda, y de muchas cosas, que la verdad a mi no me importaban para nada.

— Zayn quiero que tengamos muchos hijos, seré más que una esposa devota—dijo emocionada.

— si Jadilla—respondí con aburrimiento.

— También quiero que nuestra habitación sea la más grande—abrió sus brazos y trazo un arcoíris

— sí.

— Zayn sabes, estamos solos—ronroneo y me arrincono en una pared.

— Jadilla, por favor, creo que te estás excediendo—regañe.

— que importa Zayn nadie nos vera, además seremos esposos y hace rato que me muero por estar contigo— puso su mano derecha en mi pecho y lo delineo un poco.

— Jadilla, es mejor esperar la noche de bodas—me separe un poco de ella, pero como pudo de las arreglo para aprisionarme.

— no Zayn quiero que me hagas tuya lo más pronto posible, además nadie se tiene porque enterar de esto.

— ¡no faltaría el respeto a tus padres! Por favor jadilla, contrólate un poco.

— ellos no se enteraran Zayn—se quieto la túnica quedando completamente desnuda.

Un lugar alejado que quedaba casi en los calabozos del palacio, ella tenía un cuerpo lindo, una piel tersa y perfecta, que con tan solo verla se notaba suave. Pero en definitiva me gustaban las chicas difíciles. O mejor dicho me gustaba Lauren, se había robado tanto mi corazón, que sería incapaz de serle infiel.

— vamos Zayn se que quieres, eres hombre y tu mente traicionara—rio con malicia.

— no jadilla por favor cúbrete—aparte mi mirada.

— sé que quieres Zayn, de todos modos serás mi esposo—bajo sus manos hasta mi entrepierna y acaricio un poco. Trague gordo, no podía apartarla de un empujón.

— ¡No jadilla por favor!—pedí.

— Sé que mueres por besarme—se acerco peligrosamente a mis labios y vacilo un poco

— No puedo con esto, se lo diré a tus padres—amenace, como pude la hice a un lado y empecé a caminar en dirección opuesta de ella.

— ¡No Zayn!—grito.