Confesiones

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Escuchaba pasos hacia ella, no podía moverse, se sentía desesperada, solo quería escapar y proteger su ya abultado vientre, siente que está en peligro, tiene miedo, trata de gritar pero no puede, se siente impotente de no poder hacer nada y llora, como siempre. Ve que el peligro ya se acercó a ella, es la pelirroja con un vientre abultado igual que el de ella. Esta grita "Me robaste mi vida" y con un cuchillo oculto en su vestido, apuñala el vientre de la Platinada...

***

La chica despierta de golpe y con mucho sudor por todo su cuerpo, está agitada, ve a su alrededor, está en su habitación y a su lado una pequeña Anna aún  dormida, sonríe con ternura, ella solo estaba preocupada por su tonta hermana mayor, su momento de paz se rompe cunado siente la puerta abrirse y al ver a un castaño con una bandeja con comida en su mano, ella solo ríe nerviosa y lo saluda con la mano.

- Hola cuanto tiempo, ¿No? Me alegro que hayas despertado - dijo calmado y nervioso.

- ¿Cuánto tiempo dormí? - preguntó.

- Lo suficiente como para que hayas mejorado tu aspecto, estabas pálida, me preocupe mucho por ti - puso su mano encima de las de Elsa.

- No tenía por qué hacerlo señor Hiccup - le sonrió.

- Y dale con lo mismo, Elsa basta con formalidades, me haces sentir viejo, con Hiccup está bien - se sentó a su lado.

- Me daría mucha vergüenza ser la única sirvienta que te llame por tu nombre - dice algo tímida.

- Le he dicho a los demás pero insisten en llamarme señor - dice irónico.

- Fue... Muy valiente al enfrentarte a  la seño... Mérida de esa forma - dijo sin darse cuenta.

- Era necesario, ya no soportaba está situación, ella me presionaba para casarme con ella y el contrato me lo impedía, además de... Daysi - bajó la cabeza.

- ¿Daysi? - preguntó triste.

- Sí... Daysi, ella era mi hermana; Ella, Mérida y yo éramos amigos de adolescentes, ella siempre había decía que Mérida y yo terminaríamos juntos... Fue una promesa entre los tres, ella siempre era enfermiza desde nacimiento y sus posibilidades de salir o jugar eran escasas, cuando menos lo esperamos, ella cayó terriblemente enferma... Había desarrollado un tumor en el corazón...
Ella con su último aliento me pidió cumplir con todo lo qué habíamos prometido juntos... Yo estaba dispuesto a hacerlo, cómo una de esas promesas era estar con Mérida, y traté por todos los medios de enamorarme de ella... Pero no podía la veía como una simple amiga, luego pasó lo de mis padres y el papá de Mérida... Pensé que sería una oportunidad para intentar que eso funcione, aún que no me gustaba el contrato y las amenazas, pero Mérida había cambiado, se comenzó a fijar en mi herencia y trataba mal a mis empleados,  aparte que me amenazaba con matar a mis padres si no la obedecía en uno de sus caprichos. Ya no lo soporte y decidí romper mi promesa, yo organice la información necesaria para la operación que se realizó en el viaje, y cuando todo había salido bien tuve valor de hablar... - le confesó el castaño.

Elsa solo lo miraba con compasión y comprensión.

- Cuando ella dijo que estaba embarazada, confirme mis sospechas de su infidelidad con Hamada, él era un amigo mío del instituto, siempre me envidio, en una pelea dijo que me quitaría lo más preciado que tengo, supongo que supuso que sería Mérida, que estupidez... Te juro que yo no quería confesar en ese momento,no quería humillarla, pero sentí que era necesario hacerlo en ese momento, si no yo sería prisionero de mi pasado... Yo solo hice lo que era necesario - comenzó a derramar lágrimas de sus verdes ojos, Elsa lo abrazó con fuerza.

YO NO ELEGI MI DESTINO (hiccelsa +18)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora