Vivencias y momentos de Roberto

Capitulo 24

CAPITULO 23
                 El Gran Hotel RITZ


Serian aproximadamente las siete de la tarde, cuando llegaron al célebre hotel RITZ. Allí un empleado del hotel, se hizo cargo del carruaje, y se lo llevo a espaldas del edificio.
En ese momento llegaron también Santiago y el matrimonio (Maribel y  Juan José, que así se llamaba su marido).

Santiago iba vestido normal, discreto pero elegante.
El matrimonio iba más o menos arreglado,  pero también normal.

Lucia causo sensación, pues tenía un gran porte. Elegante y muy arreglada .causo, verdadera admiración.
El Barón iba ciertamente inquieto a su lado, y miraba a hurtadillas alrededor.

En la Recepción el Barón se identifico, buscaron las reservas, entregaron algunas de sus pertenencias para el guardarropa, y a continuación les acompañaron hacia el salón principal.
Este Hotel tenía su historia. Se inauguro en el año mil novecientos diez, tenia ciento treinta y siete habitaciones era uno de los mejores hoteles del mundo, y RITZ  significaba GLAMOUR , lujo ,sofisticación , está ligado a la historia de Madrid es
De excepcional belleza y excelencia gastronómica.

Fue inaugurado por el Rey Alfonso trece, y ha sido visitado por muchos mandatarios de otros países.
Su lujo, sus atenciones eran simplemente cautivadores. Hermosos tapices, preciosas Lámparas , extraordinarios cuadros , sus orquestas de primera línea y sus famosas tardes, en las cuales se reunían para tomar el Té , y escuchar a los famosos cantantes  que venían de todo el mundo, y que amenizaban sus famosas tardes con su música y sus bailes.

No, no era fácil entrar allí, al menos entre la gente del pueblo llano
Hoy día el grandioso edificio ha sido comprado por una multinacional árabe. Sigue siendo extraordinario, pero ha perdido el GLAMOUR, que tenia antaño de la que fue su época dorada.
Fueron acomodados por un “asistente”

(Se llamaban así, porque formaban parte del protocolo).
El Barón saludo a un matrimonio que paso por su lado y tras darse la mano unos instantes continuaron su camino.



¿Quiénes son?   - Pregunto Maribel con         curiosidad.
-Son D. Santiago y su señora Silveira, dijo el Barón, muy conocido él, en casi todo el mundo

- Al ver un gesto raro en sus acompañantes, dijo el Barón: Es el señor Ramón y Cajal. Un prestigioso médico e investigador ya retirado, pues tiene ochenta y dos años.
- Descubrió, las conexiones del tejido cerebral y sus patologías .Le dieron el PREMIO NOBEL de medicina, y fue un gran científico. Hoy día  recientemente retirado.

En una mesita- velador, se acomodaron los cinco cómodamente, y alabaron las atenciones y el gran servicio que tenían
En la mesa habían colocado un jarroncito con     unas rosas frescas y casi al momento, les llevaron un carrito niquelado, con unas pastitas y unas botellas de champan-Francés.
Estaban todos inquietos y algo nerviosos, pues según decían, aquel no era su sitio *era otro mundo* al cual no podrían acceder nunca.
Sin embargo el Barón, estaba muy centrado en ellos y muy pendiente No hacía apenas caso a nada, ni a casi nadie, para que no se sintieran tan fuera de lugar, aunque el sabia que se iban a divertir.
El salón, era grande y circular. Había una lámpara gigantesca (Araña, las llamaban) que pesaría unos doscientos kilos, de muchas lagrimitas que pendían de ella. En cuatro puntos situados en la bóveda, había cuatro grandes cornucopias y que entre todas las luces daban color y alegría en todo el inmenso salón.
En una parte del salón, había como una plataforma para las orquestas y cantantes, que amenizaban, aquellas famosas tardes del RITZ.
El enorme salón, poco a poco se iba llenando, y se notaba entre muchos de ellos la alta alcurnia que tenían.
Los camareros, atentamente observados por el Metre del Hotel iban elegantemente ataviados y todos iguales :Media levita de color oscuro, chaleco de color gris, y camisa blanca con pajarita, zapatos muy clásicos, como de charol,
Llevaban guantes blancos, y estaban situados      estratégicamente y pendientes de quien pudiera requerir sus servicios.

La tarde se iba animando. Los camareros solícitos, se acercaban a las mesas para solicitar a los clientes, que deseaban tomar para servirles de inmediato.
Nuestros protagonistas en animada charla , en cosas banales sin mucha importancia iban cogiendo mas aplomo y seguridad.
Roberto acaparaba las miradas de mucha gente, pues era ciertamente conocido, sobre todo de algunas damas, que le miraban a hurtadillas.
Lucia, no se quedaba atrás .Muchos jóvenes y no tan jóvenes, la miraban insistentemente y la hacían alguna seña, para que les mirara
Ella estaba resplandeciente, sonreía a la gente y devolvía cortésmente, los saludos constantes que la dirigían.
En ese momento, entro en el salón una muy afamada orquesta, vestida de etiqueta, y que estaba dirigida por un joven, que apenas tenía una treintena de años ( Años más tarde se hizo muy famoso en casi todo el mundo) Se trataba de Xavier cugat , gran músico y director compositor.
Después que los presentaron, se sentaron, con sus instrumentos preparados, esperaron que su director les diera la señal, para poder comenzar.


En breves segundos la gente se iba emparejando y los más jóvenes, muy solícitos sacaban a bailar a las más jóvenes que solían ir acompañadas de sus padres.
Roberto les dijo en ese momento a sus acompañantes, que estaban un poco perplejos.
-Santiago, puedes sacar a bailar a cualquiera, quizás a Lucia, o bien a Maribel.
-Y tu Lucia, vendrán hacia ti, al revés que Santiago y si te apetece bailar, pues ya sabes….
Lucia contesto-¡Ya sabes que tendré que bailar , y tu también creo yo . Probablemente cada uno
por su lado, claro está. 
En ese momento, la dirección del Hotel anuncio que brevemente iba a comenzar la actuación de
la orquesta de Xavier cugat, provocando el interés de todos los asistentes.
Cuando esta iba a empezar, se noto cierto revuelo en el salón, ya que muchos de los jóvenes que allí había, se habían levantado para sacar a las señoritas a bailar. Previo permiso de sus padres.


En el mismo momento que la orquesta empezaba a ejecutar un Foxtrot, un caballero  de unos treinta y cinco años, de muy buen ver y muy elegante se acerco a la mesa de nuestros de  protagonistas, y le espeto al Barón.
-¡Caballero , me permitiría sacar a bailar a su encantadora hija? –No la conozco, ni se su nombre….
-¡Por supuesto claro, pero… ¡Dígame, ¿quién es usted?.... .-Ella se llama Lucia.
-Soy Iñigo de Braganza descendiente de una    hermana de doña Bárbara Reina consorte de   España, dijo ceremoniosamente.
-¡Muy bien! Pues yo soy simplemente un caballero español, y mi nombre es Roberto de los llanos y si mi hija quiere, podrá por supuesto bailar con ella
      
        Señorita, ¿Me hará usted el honor de inaugurar
Este baile conmigo?
Lucia asintió, y él la ofreció su brazo para que en el se apoyara.
Segundos después se incorporaron, a la pista de baile, donde ya algunas parejas estaban danzando
El Barón se levanto, y se acerco a una mesa cercana, donde estaba un matrimonio de cierta edad, y así les saludo:-Hombre don Luis, les he visto y me he acercado a saludarlos ¿Cómo se encuentran?, me alegro mucho de verles.
¡-Señor Barón, hacía mucho tiempo que no sabía nada de usted .Pero Siéntese acompáñenos, tómese algo con nosotros , y charlemos un poco.
Tendrá que ser otro día, pues he venido acompañado.
-Entonces mañana le llamo, pues quiero comunicarle algo, que seguro que le va a gustar.
-¡Estupendo, mañana pues, hablamos!
Después de estrecharse la mano, Roberto regreso a su mesa, que estaba vacía, se sentó y miro en derredor, estaba todo muy animado.