Vivencias y momentos de Roberto

Capitulo 31

Evitando la soledad

Podéis venir cuando queráis
aunque yo no este . Tu tienes llaves, esta será
siempre tu casa.
Con los ojos humedecidos
Santiago, le contestó:
.- Llevamos cincuenta años
juntos y yo se, que probablemente , esto tenía
que llegar algún día.
Y.. continuo Santiago, tú también tienes que hacer
caso a tu corazón , te diré:

Tengo ojos y oídos , y se que
te estás debatiendo contigo
mismo , sufres inquietudes
y zozobras.
Pero haz caso al amor cuando llegue a tu vida.
Tienes que hacer oídos sordos a los comentarios
que pueda hacer la gente

Hazme caso amigo mío , pues solo se vive una vez
Se feliz Roberto y sigue lo
que te dicte tu corazón
-Así es que ya sabes, lo mío...
.-Lo sé, y también Maribel
estas cosas no se pueden
ocultar. Nos hemos dado cuenta hace un tiempo ,y somos como dos tumbas
VER, OIR y CALLAR a nadie
le importa esto en absoluto

.-Por otro lado te diré, lo que te dije antes
Lucía es muy buena mujer.
Hacendosa diligente, culta
e intelectualmente preparada, de buen corazón
y también guapa y hermosa también que es un poquito
rebolera.

Las circunstancias de la vida la hicieron llegar hasta aquí. Tiene muy buen
corazón, muchos y buenos
valores. Creo que cualquier
hombre sería feliz con ella

Roberto , le miraba con los
ojos muy abiertos y muy
asombrado, entonces dijo:

.-Santiago , ¡Perdóname!
no te dije nada, porque de..
todas formas nada hay
todavía,es que me siento
tan avergonzado, que ...
El Barón agachó la cabeza
como niño pillado en falta.

Esa noche cenaron los dos
solos ,Lucía y el Barón,
Pues Maribel se iba siempre
hacia las ocho , y Santiago
normalmente no cenaba
allí como casi siempre
y Maribel ,siempre dejaba
la cena medio
p

reparada, o preparada del
todo , con la mesa ya puesta

Roberto y Lucia se sentaron
a cenar . Sobre las nueve de
la noche Lucia preparó sendos platos desechables
carne  asada y  embutido con algo de vino.

Poco tiempo después,Lucía
se quedó recogiendo la cocina, mientras Roberto subía a su habitación para
regresar una hora más tarde al salón .
Una vez allí se dedicó a preparar , revisar sus partituras , y a ordenarlas
Por última vez.

Apareció Lucía muy sigilosa, se sentó en un silloncito y así le dijo
.-Roberto, si te parece muy
brevemente, podríamos
hablar de dos o tres temas
muy importantes , antes
de qué comiences, tus pruebas.

El Barón se acercó a ella
a su lado,y así la dijo :
.-Háblame Lucia y dime lo que quieras , que para mí
es un placer escucharte .
.-Roberto la miro con cierta
dulzura.

.-Vamos a ver Roberto, sabes que dentro de diez días comenzarán las obras
de la casa, voy con tu permiso a buscar y a contratar, a dos doncellas para el chalet..-También quiero que cuando puedas,
me acompañes a comprar
  dos buenos perros,para que cuiden y vigilen el chalet .Después cuando acaben las obras , yo habré
aleccionado a las dos chicas
y sacare mi pasaje para mi
marcha.
¡Ah!, se me olvidaba,
también quiero que pongas
una buena alarma.
Lucía, se calló y miro a
Roberto,esperando alguna
reacción de el.

.-Estas en todo , muchas gracias por tu dedicación, por estar tan pendiente y por tu saber estar, me parece muy correcto , y por supuesto lo acepto .Yo no
había caído en ello , quizá más adelante si...

En cuanto a tu marcha , veo
que estás decidida a irte y a
me partes el alma.
En fin recapacita , y si ves que es del todo imposible quedarte yo no te puedo
obligar.

Solo te pido que te quedes
hasta que acaben las obras
y a sus inauguración.
He pensado incluso si al final te vas , en acompañarte en un Crucero
hasta Nápoles , y despues
Volverme.

.-No, no creo que sea lo más
prudente , y sería maravilloso e inolvidable
hay descartarlo ¡Que vamos hacer!
Roberto se dirigió al piano
y empezó a desgranar , las
primeras notas de una
partitura.

Tocaba ciertamente, con mucha rabia , pero poco a poco se iba su rostro trasformando convirtiéndose en una imagen abatida , pero dulce.

En el silencio de la noche, se escuchaba el famoso ,Vals de las flores.
Con la vibración del golpeo de las teclas , la Rosa que
había dejado Lucía encima de la tapa del piano , se fue resbalando hasta caer al suelo.

Lucía se agachó y la cogió
para depositarla de nuevo,
encima de la tapa del
piano .Se cruzaron sus
miradas brevemente y
Lucia ,  se  acerco a él y le besó en la frente, con mucho cariño.

la miro con ternura
besándola en una mano.
.-Continua , continua tocando , dijo Lucía que yo
estaré aquí cerca sentada
procurando no molestarte,
no te acerques mucho a mi
pues sería mucho peor para los dos

Roberto contrariado, siguió
tocando, hasta que terminó
y colocó como despedida, en el atril la canción
* Quiéreme mucho*
desatando los nervios y la pasión de Lucia , que sin poderse controlar se acercó a el y tirando suavemente de una de sus
manos le hizo levantarse.

Bailaron despacito el famoso Bolero, mientras que Lucia desgranaba con
su voz  tan bien modulada
aquella composición tan
Bonita e inolvidable.

Roberto arrimó su mejilla
junto a la de ella susurrando
¡Querida mía , siempre
Querida!
La beso dulcemente , sin que ella lo impidiera.
Poco despues, la dejo en su
habitacion no sin antes abrazarla  pues había que madrugar.
Lo que no sabía Lucía, era
Que Roberto , la había dejado en su habitación , un paquete con un pequeño estuche al lado
Era un precioso vestido de color Rosa pálido con unas pequeñas chorreras p (rizadas en las mangas) , parte de los hombros al aire , y unos pequeños frunces donde termina el vestido *de buena marca*

La cajita era una cadenita
para el cuello , que soportaba un precioso Camafeo de Nácar, y que al
abrir la tapita, se veía la
imagen del Barón.