cap.3

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Cap. 3

Creo que les di, como me conocí con Justin. Lo demás es historia… No, no es historia, aquí todavía falta tela por cortar. Les daré un resumen, de cómo nos fuimos conociendo más que vecinos y más que amigos. Después de esa fiesta, nada fue igual entre nosotros. Pues digamos que… Que yo le guste, el me gusto y ya saben cómo terminan. Pero este no es caso ni es la historia. Hay algo más interesante en todo esto.

Ustedes quieren saber en qué mundo me metí y en el mundo que se metió Justin.

Es el mismo, planeta tierra y esas cosas, hablamos de algo prohibido o ¿no? Pero se lo dejo a su imaginación, ojala y le den al clavo. En este momento estoy leyendo una historia de un libro muy interesante, y… ustedes estarán aquí, conmigo. Pero primero tienen que conocer la historia; donde en realidad empieza la excursión. ¡Buena suerte!

Un mes después

Mi celular suena, tonta alarma. Debo cambiar el tono, este es muy fuerte por la mañana. Me levanto de la cama, tomo la toalla y me voy al baño, me miro en el espejo, estoy cansada. Ayer duramos hasta la una de la madrugada hablando y jugando en el departamento de Justin; si se preguntan, estoy saliendo con Justin, es buen chico, doy fe de eso… Pero hay algo que no me cuadra y lo tengo que investigar. Cada vez que le pregunto de que trabaja, me esquiva la pregunta o se enoja y me responde: “no te importa” o “no te incumbe”. Me saca de mis casillas, si él no me lo dice, lo tendré que averiguar por mi propia cuenta.

Salgo del baño, tomo algo abrigador: unos jeans negros, una camisa algo holgada, color crema, un suéter más o menos grande, color blanco, con capucha. Busco   mis converse blanca y me las pongo.

Salgo de la habitación con mi bolso en el hombro, mis audífonos y el móvil en una mano y en la otra las llaves; desde que tuve el problema con mi madre, ahora no se me olvida. Como siempre mi mamá sale primero que yo, así que me deja el desayuno listo.

Espero el ascensor con ansia, ayer me pelee con Justin, por lo mismo de siempre. A veces no entiendo y quiero entenderle, dejar de preguntar… pero no puedo, parezco: polilla al fuego. Las puertas del ascensor abren, me subo y marco planta baja. Tomo mi móvil en mano y enciendo el reproductor de música. Antes que las puertas se cierre, alguien las detiene. Justin.

-buen día- habla.

-buen día- respondo seca. No sé cómo se me da, pero funciona, a veces.

-¿sigues enojada?- pregunta. Lo miro y bufo, vuelvo a ponerme los auriculares, dejando uno guindando. Las puertas del ascensor abren, llegamos. Camino al portal, me sigue.

-no me has respondido- abro el portal y lo miro.

-algo- informo, salgo del edificio y la fuerte brisa de invierno golpea mi rostro, haciéndome estremecer. Siento el suspiro de Justin.

-ven, te llevo- sé que esta es una pelea perdida, así que lo sigo al estacionamiento. Abre la puerta  del piloto y sube, baja el seguro de la puerta del copiloto, me subo en silencio.

-llegamos- miro al instituto.

-gracias- abro la puerta, antes de bajarme, me detiene.

-sé que ayer, te trate de lo peor. Pero no quiero estar así, contigo. ¿Me perdonas?- lo dice con tanta sinceridad… No sé.

-vale, no hay problema- abro de nuevo la puerta, saco una pierna y Justin me detiene otra vez.

-espera- volteo a verle- vamos a comer algo. Después de tus clases. ¿Vale?- le sonrío, regreso a mi posición de antes y cierro la puerta.

-Justin deja de actuar así. Tan poco voy a terminar contigo- noto que relaja los hombros… ¡oh, vaya! Era eso.- y sí, vamos a comer y hablar.  Quiero que seas sincero conmigo, por favor- espero que esto funcione. Me mira y suspira.

-está bien- sonrío. El auto vuelve a la vida, es una señal que me tengo que bajar, le doy un beso y me bajo. Me quedo para verlo irse.

La clase de química es aburrida, mi mente viaja a otro lugar. Justin. ¿Por qué nuestra relación es complicada? Hace dos semanas que estoy saliendo con él, y hace un mes que quiero saber en que trabaja y no me dice. Espero que sea sincero hoy y me explique, porque no me quiere decir en que trabaja. Ya que pienso el otro tema que nos hace pelear a veces: es tener sexo, ¿el que le ve a eso? Sí, sé que es hombre, ¿no se puede esperar? Solo no estoy preparada para eso, y además: tenemos dos semana saliendo, solo tiene que esperar, solo pido eso… paciencia.

El cole ha terminado, por hoy. Justin debe estar por llegar, hoy irán a mi casa, mis amigas, más tarde, ya que le  dije que Justin me llevara a comer.

-oye Diana, nosotras estuvimos pensando sobre el trabajo de los chicos. Y hemos sacado la loca conclusión, que están con las drogas. ¿Qué opinas?- dice Jennifer.

-que es algo descabellado. Aunque razonable, hoy veremos, si me dice, se los hago saber- me siento en los bancos que están al frente del liceo. Las chicas también lo hacen, mientras ellas hablan de pistoladas, mi mente vaga otra vez; y si es cierto lo que habla Jennifer… ¡oh, no lo puedo creer! Es eso, por eso no me quiere decir. Por eso salen extrañas personas de su departamento, y cuando está hablando con los chicos, y llego se callan. A veces se comporta extraño, y sale de noche y no precisamente a una fiesta. ¡Demonios! Las chicas tienen razón. El pito del carro de Justin, me saca de mis pensamientos, me despido de las chicas, me subo al auto. Lo saludo con un sonoro beso en los labios.

-te digo algo- arranca para salir de la calle del instituto.

-dime- lo observo.

-siempre me dejas picado con tus besos- muestra una sonrisa, pero esa sonrisa no llega a sus ojos, algo le preocupa. ¿Será que me dirá? O ¿es otra cosa? Suspiro. Ojala que las cosas que hemos pensado las chicas y yo… no sean ciertas.

-¿Qué pasa?- pregunta, lo miro y me doy cuenta que esa pregunta, me hace sentir mal.

-nada, solo que… Me preocupa la universidad. Sabes ya es mi último año en el cole y quiero entrar en la mejor universidad, pero no creo ser la mejor- ¡wow! Que mentira. Toma mi mano, ese toque me manda escalofríos por todo el cuerpo, y también esa mano toca cosas indebidas. ¡Dios mío! ¿Qué pienso? Ni siquiera sé, si es verdad.

-amor deja tus preocupaciones. Eres una de las mejores, eres inteligente. También eres buena con los idiomas y la literatura… eres un genio, ideas planes. Que me sorprende que venga de esa… cabecita, ahora si me permites; deja tus inseguridades a un lado y luchas por tus sueños.- ¿Qué paso al Justin que conozco?

-¿Qué te paso? Ese no eres tu… pero gracias, no me lo esperaba… de ti-

-para que veas que tengo corazón- me lleva la mano a su pecho- y tiene dueña- le sonrío como una boba. 

gracias por los que leen: comente y voten. 

quisiera conocer a los lectores, pero ninguno comenta ;(

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