cap. 18

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Cap.18

Narra Justin.

-¡¿Cómo pudieron perder esa mercancía?!- grita Parker. Frunzo el ceño, la ira se está apoderando de mí, ninguno de los chicos responde.- ¡respondan!- golpea el escritorio.- ¿o el gato se les comió la lengua?- sisea.

-no sabemos cómo paso. Les dimos la mercancía a... ¡Demonios! No eran ellos.- mi mandíbula se tensa, ¿Cómo pudimos hacer esa estupidez? No nos dimos cuenta que no eran ellos.

-¿Cómo que no eran ellos?- pregunta, lo miro y suspiro.

-cuando le entregamos la mercancía, llevaban gorras y llevaban el mismo traje. No eran ellos.- digo, los chicos me miran, sé que están asustados, es mejor no cometer el mismo error dos veces o si no Parker se encargara de nosotros. Y esto es extraño, primera vez que nos pasa esto.

-es mejor que no comenta el mismo error, porque ya saben lo que pasara.- trago gordo.- retírense, nos los quiero ver.- me levanto de golpe y me voy de ese lugar, definitiva no es mi día. Hoy Diana, estaba con esa lesbiana y sexy, que cualquier hombre se le acercaba y se les caían las babas, y para rematar nos quitan la mercancía como si fuera un acto de magia. Mejor me voy a la casa, descanso y me olvido de todo esto.

-qué raro, ¿no?- dice Ryan montándose en el auto.

-demasiado extraño.- murmuro.

-más con Diana. No sabía que ella fuera... fuera...- lo miro.- mejor me callo.-

-mejor.- enciendo el auto y salimos de la mansión de Parker.

Si supiera quien fue, quienes son; juro que los hago comer el barro, aprieto el volante, mis nudillos se ponen pálidos, pero la ira se está apoderando de mí. Es que... es que si me entero de quienes son, los voy a matar, todo estaba bien, las chicas bailando, Diana bailando conmigo, viéndola tan hermosa y... ¡BAM! Esto.

Llegamos al edificio, estaciono. Ryan se me adelanta y me espera en el portal. Camino hacia donde él está.

-ya, cálmate. Sé que vamos a descubrir quiénes son y le daremos su merecido.- habla con mucha seguridad. Abro el portal y veo a Diana esperando el ascensor, sigue con ese vestido que la hace ver tan... sexy.- mira quien está ahí.- le doy en la cabeza para que deje de decir tantas babosadas, definitiva, no sé qué le pasa a Ryan hoy.

-está bien, entendí. Pero no niegues que está muy linda hoy.- sonrío, porque eso es verdad, aunque con lo que sea se ve hermosa... pero ese vestido es muy vulgar para ella, ¿Qué le paso hoy? ¿Por qué se vistió así? Espero que no haya cambiado su actitud y su forma de pensar, como es ella, me encanta.

Narra Diana.

El tonto ascensor se tarda demasiado, y me duelen mucho los pies para estar subiendo escaleras.

-hola.- una voz me asusta, volteo. Es Justin con su amigo Ryan. Suspiro.

-hola.- susurro.

-¿Qué pasa?- se puede callar, no quiero hablar con él. Hoy me di de cuenta, el tipo de hombre que es. Es igual a los demás, me duele porque pensé que era diferente, tenía la esperanza que era distinto y me aceptaba por lo que soy, por cómo me veo en realidad, pero es igual al típico hombre que le gusta una mujer curvilínea, con sexys atuendos, maquillada hasta los tuéstanos, bien peinada y sobre todo... ramera. Me enamore de una persona que no existe.

-nada... solo que el ascensor no baja, creo que se averió.- toco de nuevo el botón, no funciona... ¡qué mal! No quería subir escaleras, me duelen muchos los pies. Bueno, me quito los tacones y subo.- mejor subo escaleras, así hago ejercicios.- Ryan se ríe. Sonrío, él siempre me agrado, es buen chico y tiene mucho sentido del humor.

Perfect CrimeDonde viven las historias. Descúbrelo ahora