Cap. 49

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Mi cerebro no procesa esta situación, me engaño. La observo, rostro demacrado, su cuerpo flaco. Sus ojos son frio, sus labios ya no tienen color. Esa vestimenta que tiene, no es la Diana que conocí, no es ella. Cierro los ojos, puedo sentir el arma fría en mi nuca. Termínenme de matar, ya alguien mato mi corazón. Suspiro y abro los ojos, tengo al frente a Ryan, con el ceño fruncido, confundido igual que yo.

Volteo la cabeza y la miro, apunta con el arma a Parker, puedo oler el miedo de este. Nadie en su vida le ha jugado sucio de esta manera, debo de reconocer que Diana es una mente brillante pero, por el otro lado estoy herido, furioso y desorientado. ¿Por qué lo hizo? ¿Qué ganara con esto?

Yo por lo menos tengo mis excusas bien justificadas, según yo. Nunca conocí a mi padre, mi madre pues ella trabajo duro para mantenerme, la cara que puso cuando se enteró que entre a este mundo, fue como un balde de agua fría para ella, no le gusto y me echo de casa. Después de eso, termine entrando totalmente a este mundo. Pero, ¿ella? Mi Diana, la única chica que no he podido sacármela de la cabeza, la mujer que me dará un hijo, ¿De quién me vine a enamorar? De una completa desconocida, creí conocerla pero no es así. ¿Desde cuándo estará en esto?

Volteo a ver a Ryan, es el único a quien confío y me ha dado su lealtad. Creo que es la única persona a quien confiar. Cuando Diana dijo que se acostó con él, pero fue para jugarme una mala pasada, ¿Cómo se enteraría que me acosté con su amiga? ¿Jennifer se lo diría? No, no creo. Hace unos días ellas hablaron con Diana, todo estaba normal...

¡Oh por favor! Ella ya lo sabía, solo que actuaba como si no pasara nada. Después dar el golpe, como hoy. ¿Qué más vendrá? ¿Qué estará tramando? ¿Quién es ella? Otro pregunta a mi cuestionario, ¿Ese bebé será mi hijo? Con esto no le puedo creer.

– Tic Tac, tic Tac – empieza hablar. Mira a Parker con odio, eso lo puedo asegurar, no baja el arma y su pulso no tiembla, está decidida a lo que viene. Va a quitar a Parker de su camino porque sí, porque sí. – Jeremy, dime algo. Ya que tú trabajaste con Parker – ese traidor, sabía que no se le podía confiar. – ¿Qué te hizo? Para que renunciara a todo, en este lugar. – frunzo el ceño. ¿Jeremy trabajo para Parker hace años? Intento ubicarlo, pero me cohíben de moverme.

– Esto no viene al caso, Diana – está detrás de mí. ¡Mierda!

– Oh, sí. Sí que viene al caso – sonríe sínicamente. – Dilo, o sino yo hablare – sisea. Esto es una amenaza, debe tener una información de Jeremy.

– Bien – dice derrotado – Trabaja hace tiempo con Parker, fui uno que lo ayudo con sus juegos sucio. En esos momentos estaba saliendo con una mujer, mi mujer. – sisea. – Ese imbécil se quiso acostar con ella, prácticamente la quería violar. – suelta con rabia. El arma se pega más a mí.

– Creo que hay más, ¿no es así Jeremy? – se burla al hablar. ¿Qué tramas mujer?

– Yo tenía un confidente, un amigo fiel que perdí por creer que era él, quien se quería acostar con mi mujer, ya que sabía que él sentía algo por ella. Pero el solo acepto la realidad y yo me cegué. Mi mujer y yo íbamos a tener un hijo, discutimos una noche. Luego discutí con mi amigo, desaparecí. – su voz se apaga – Y fue el peor error que cometí en mi vida. Ahora por mi error, mi hijo está en las garras de este imbécil. – Solloza – trabaja para Parker. –

– ¿Nos dirán quién es? – cierro los ojos. ¿Quién será?

– La madre de mi hijo es Pattie Malltte – el corazón se me detiene cuando este hombre pronuncia el nombre de mi madre. – Mi hijo es Justin Bieber – mi alma se me vino al piso. Mi vista se nubla, la rabia me invade. ¿Qué clase de juego es este?

– Bravo, no te costó nada Jeremy – habla serena. – Baja el arma Jeremy, ya no tienes que matar a tu hijo – da la orden y no siento el arma en mí nunca – Pero, haces un movimiento en falso Justin y seré yo la que te mate, ¿No querrás que tu hijo crezca sin padre? – frunzo el ceño. Esta chica está mal de la cabeza, la miro con rabia.

– ¿Y qué más da? Puede hacerlo como yo lo hice – siseo con odio. – Sin padre – susurro.

– ¿Disculpa? – Chilla – No te escuche, puedes repetir lo dijiste – deja de jugar es lo que te pido. Mi pulso tiembla.

– A estas alturas, no sé si sea ese mi hijo – la señalo. – No sé si eres la Diana que conozco, o bueno la creí conocer. – me encojo de hombre.

– Touche – hace una mueca. Esto le parece divertido, pero a mí no. No sabe dónde se mete. – ¿Dime que se siente ser humillado y traicionado? – pregunta sin dejar de ver a Parker y no la dejo de ver, ella será mi maldita perdición.

– Esto no es juego – advierto.

– Creo que ese concepto ella no lo entiende – habla alguien entre los hombres. Frunzo el ceño

– Eso es verdad – confirma Diana – Nunca lo entiendo – niega con la cabeza divertida y sin importancia. – Deja decir cosas en vano Justin, acepta que estoy aquí jugando – ladea la cabeza y me ve por un segundo – Como tú dices – trago grueso. Nunca he mi vida he visto una mirada tan desquiciada y desubicada, perdida ella está perdida.

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Hola mis gasparines. Espero que hayan disfrutado este corto capitulo. Díganme, ¿Sigo otro capitulo narrado por Justin?  No lo sé, quizá sí, quizá no. Jejejeje... Esta semana fue larga y corta, me enferme mucho, no tenía Internet, la luz se iba y venía, el teléfono de mi mamá era el único que es avanzado y pues le cortaron el plan y me quede incomunicada... Fue una semana difícil pero la supere y salí viva!

Bueno, bueno. Tengo algo que decirle... Estoy escribiendo una novela y pues es muy diferente a esta, no sé. ¿Quieren leer un poco para ver que le parece? No sean fantasma y respondan. Les quiero mis gasparines!

Perfect CrimeDonde viven las historias. Descúbrelo ahora