CLOSER [YoonMin]

9. El sello del híbrido

  —¡¿Pero cómo?!— Sorprendentemente fue Yoongi el que esta vez reaccionó exasperado—¡Jimin no tiene la sangre pura!  ¡Ser el heredero es algo prácticamente imposible para él!

La anciana cerró los ojos manteniendo una expresión tranquila como si hubiese estado esperando esa respuesta, y luego procedió a explicar la razón:

  —Bueno, permítame aclarar las cosas.  Como es de su conocimiento, el rey Sungkyu murió hace algunos años en la última guerra que hubo entre vampiros y lobos por problemas de territorio. Desde entonces fue Taeyeon la encargada de gobernar a su clan en tanto esperaban a que Jungkook tuviera la experiencia y conocimientos suficientes para ser un buen rey.
Hace poco, Jungkook viajó junto a su madre y algunos cuantos nobles a Italia que es en donde se encuentra la sede del concejo real, formado por los soberanos de todos los clanes de vampiros esparcidos por el mundo. El motivo del viaje fue para poder ser al fin coronado como el soberano oficial del clan del norte de Corea que es justamente el clan al cual ustedes pertenecen. Pero, luego de su llegada y antes de hacer la declaración oficial, Jungkook tuvo que pasar una pequeña prueba tal como todos los soberanos lo hacen antes de ser oficialmente coronados.
Nokte la obeo* es un pequeño ópalo de color negro que por siglos ha servido para determinar si un vampiro es apto para ser nombrado rey o no. El mecanismo es simple: el elegido sólo tiene que colocar la piedra en una de sus manos, encerrarla en un puño y luego volverla a abrir. Si el ópalo se ha transformado de su típico color negro a un color transparente con pequeñas refracciones de arcoíris, entonces el individuo es apto para gobernar, pero si en cambio la piedra ha mantenido su color negro, la respuesta es negativa. Además de todo eso, la piedra también pone sus condiciones en el momento de la selección; y es que una de ellas es escoger siempre al primogénito del linaje de cada clan sin importar que tan pura o impura pueda ser su sangre con tal de que sea un vampiro o tenga los genes de uno. Y fue así que cuando Jungkook hizo la prueba, el pequeño ópalo mantuvo su color oscuro y no se transformó como todos esperaban, porque al fin y al cabo el ópalo sabía que Jimin era el primogénito del linaje real ya que en su sangre también corre la sangre de Taeyeon y en ella la de Sungkyu.
Al principio todo fue un caos. Los nobles y los líderes de los clanes, que obviamente no tenían el conocimiento de la existencia de Jimin, supusieron que debían esperar un tiempo más porque creían que tal vez Jungkook aún no estaba listo, pero no era así. El mismo Jungkook sabía que no era en sí cuestión del tiempo pues había pasado todos sus siglos de existencia preparándose para cuando ese momento llegara; y fue de ese modo que una ligera corazonada le llegó y comenzó a dudar de su madre. Él estaba tan furioso por todo lo que había pasado que en un momento dado él la obligó a que le contase la verdad. Ella sin saber qué hacer le confesó que tenía un medio hermano que había nacido antes que él y que era un vampiro, pero que su sangre no era pura por lo que ése no podía ser el obstáculo de su dilema. El problema en ese momento era que Taeyeon no sabía que la pureza de la sangre no tenía nada que ver en el proceso de selección con el ópalo, pero Jungkook sí lo sabía y muy bien. Es así que comenzó su misión, buscando a un vampiro en vez de a un humano que era lo que realmente debería haber buscado desde un principio.

  —Entonces Jungkook quiere asesinar a Jimin para ser el único heredero— razonó Yoongi mientras una gran sensación de preocupación se instauraba en su corazón.

  —Inicialmente sí, solo quería eso— aseguró la mujer— pero luego sus intereses cambiaron.

  —¿Y eso qué significa?— cuestionó Chanyeol.

  —Pues para que lo entiendan, deben saber que hace tiempo existió un hechicero— recordó ella comenzando otro relato largo —. Su nombre jamás es mencionado en  ningún libro o escrito antiguo gracias a que sus acciones fueron simplemente monstruosas y tan repudiables que ninguno se atrevió a recordarlo jamás. Él trató de obtener el dominio total de los dos mundos: el humano y el sobrenatural, para lo cual recurrió a métodos poco convencionales y muy peligrosos. Conjuró bastantes hechizos y le trajo varias epidemias y pestes a la humanidad, no conforme con eso, también juntó a vampiros con diferentes clases de animales para obtener cambiantes todavía más poderosos que los hombres lobo. Incluso le vendió su alma al Diablo para convertirse en un demonio y obtener más poder, y así lo hizo, él se convirtió en un ser mitad demonio y mitad hechicero pero no completamente inmortal. Y cuando ya tuvo el poder suficiente comenzó a crear su propia raza de sirvientes y esclavos. Revivió con magia negra a los humanos que él mismo había asesinado al conjurar tantas enfermedades, utilizó a sus experimentos de vampiros con animales que habían logrado sobrevivir y los formó parte de su ejército con el cual comenzó a exterminar a todo ser vivo que existiera sobre la faz de la tierra. Humanos, vampiros, hombres lobo, híbridos y hasta la misma raza de brujas y hechiceros sucumbieron ante aquel ejército de monstruos. Fue tal el desastre en la tierra, que en el cielo, los ángeles que custodiaban el orden en el mundo bajaron para ver lo que estaba sucediendo. Bajo ellos no estaba la responsabilidad de los seres sobrenaturales como nosotros, pero sí la responsabilidad de los humanos, y al ver que muchos de ellos habían sido aniquilados pero sus almas estaban siendo retenidas para mantenerlos vivos, descendieron del cielo liderados por el arcángel Uriel a buscar a aquel hechicero que tanto desastre había ocasionado. El hechicero, que ya era mitad demonio, asustado pidió ayuda a las mismísimas huestes demoniacas, pero Satanás viendo que el día del apocalipsis todavía no había llegado y no había razón alguna de comenzar una guerra, se negó rotundamente y lo dejó solo. Fue así que el mismo Uriel lo aniquiló, lanzando su alma y su cuerpo al Inframundo que era donde pertenecía junto con sus espantosas creaciones, claro, sin contar a los muertos vivientes a quienes liberaron y llevaron al cielo para ser juzgados.
Y al final, cuando todo hubo terminado, los ángeles advirtieron que si algo así volvía a pasar volverían a la tierra pero esta vez a aniquilar a cualquier ser inmortal o sobrenatural que se arrastrara sobre el planeta.