CLOSER [YoonMin]

26. Confrontación

Minutos antes del amanecer y a unas decenas de metros atrás de donde se estaba librando la sangrienta pelea, un par de sombras se encontraban estáticas en el suelo mientras planeaban una estrategia que les serviría para aplazar el paso del tiempo y así evitar la salida del sol.

  —¿Estás listo Tao? — le preguntó Siwon al hombre lobo que había sido el único de los suyos que se había quedado atrás junto al consejero real.

Todos tenían el conocimiento de que Tao era uno de los pocos dentro del mundo sobrenatural que había sido bendecido con el don de controlar el tiempo, era por eso que se había quedado ahí pues a él se le había asignado la tarea de hacer que la madrugada no avanzara y por el contrario pudiera detenerse en la oscuridad para que los vampiros continuaran peleando sin ser afectados por el sol.

  —Va a ser difícil— dijo el hombre lobo quien sentado sobre la arena se llevó las manos a la cabeza antes de cerrar los ojos con esfuerzo denotando lo que le estaba costando usar su poder.

Muy pronto el cielo comenzó a hacerse más claro entre tanto Siwon observaba al hombre lobo preocupado y rogando para que el poder de Tao tuviese efecto. El tiempo pasaba y el vampiro ya se comenzaba a poner cada vez más nervioso hasta que de pronto observó con sus propios ojos que las estrellas que dejaban de brillar y la luna que se escondía detuvieron su paso y fenomenalmente volvieron a su lugar de hace unos minutos sobre un cielo que todavía permanecía oscuro.

El sol dejó de asomar su amenazante claridad y desapareció dando una señal de esperanza a todos los vampiros que se encontraban peleando en el desierto.

  —¡Funcionó! —exclamó Siwon sin recibir respuesta alguna pues el hombre lobo que controlaba el tiempo había entrado en trance. Entonces el vampiro guardó silencio comprendiendo que su obligación en esos instantes era proteger a Tao pues sabía que si su estado de trance se rompía entonces el tiempo seguiría su curso y el sol saldría nuevamente.

El repentino retroceder de la luna fue claramente notorio para los lobos que aullaron en aviso a lo que estaba pasando. Aquello también les sirvió a los vampiros de señal para que pudieran conocer el tiempo reducido que tenían para poder vencer a sus enemigos.

Siendo que ya había transcurrido un tiempo considerable desde la llegada de los refuerzos de lobos e híbridos, la batalla parecía dividirse entre dos fuerzas que se equilibraban como la luz y oscuridad. La arena del desierto era removida por los rápidos pies de los vampiros que corrían velozmente de un lado a otro atacando y esquivando con destreza y agilidad, los lobos, por su parte, desgarraban a las bestias cambiantes que poco a poco parecían extinguirse entre tanto los híbridos luchaban con sus semejantes malévolos a los que, si bien tenían cierta desventaja, pudieron eliminar a la mayoría.

Pero lamentablemente cuando al fin parecía que tenían la delantera, más cambiantes y horribles criaturas salieron de la arena sorprendiendo a la mayoría quienes ya tenían las energías muy gastadas gracias al tiempo prolongado que estaba durando la pelea. Para empeorar la situación, a pesar de haber peleado y resistido durante gran parte de la noche, ninguno había sido capaz de si quiera a cercarse al hechicero pues él se encontraba muy bien protegido por sus maléficas criaturas y por los vampiros de la élite hipnotizados por Jungkook quienes ya habían reaccionado avanzando para atacar cuando se dieron cuenta de que la noche se había detenido.

Kyungsoo había salido en la delantera corriendo rápidamente hasta noquear a cinco lobos de un solo golpe. Todos lo observaron con escalofríos preguntándose quién sería el valiente que enfrentaría a aquel vampiro que parecía ser invencible.

  —¡Estoy aquí idiota!

Un grito desafiante se escuchó a sus espaldas y Kyungsoo volteó con rapidez para ver quién se había atrevido a retarlo.