18. Revelación

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El paisaje parecía desolador al principio. Jimin se encontraba en un desierto azul que se extendía bajo un cielo oscuro apenas iluminado por la sonrisa de una luna menguante que se le hacía familiar.

Como siempre, los sueños de Jimin tenían una cosa en común cuando la luna se hallaba en esa forma, y es que en esa ocasión estaba seguro de que “aquella  mujer” vendría a visitarlo otra vez.

Desde que tenía memoria siempre había sido así. La forma de la luna le indicaba la presencia de la viajera que se presentaba ante él y que extrañamente había tomado forma en la realidad por aquellos días.

Y justo como lo esperaba la vio acercándose desde la lejanía. Aquella mujer parecía moverse con el viento y luego de que una suave brisa removiera su cabello ella ya se encontraba frente a él, mirándolo de una manera muy diferente a la acostumbrada.

Jimin, que hasta ese entonces jamás se había enterado de su nombre, decidió hablar primero para enfrentar sus dudas.

  —¿Reina Taeyeon?— preguntó dudoso esperando una respuesta negativa ya que hasta ese momento estaba seguro de que todo era producto de una imaginación que estaba al borde de la locura o simplemente de la demencia por tanta confusión.

  —Sí— fue lo que ella respondió destruyendo por completo todas las expectativas del muchacho. — Pero también puedes llamarme de otra manera…— dijo abriéndole paso a más dudas.

La obvia pregunta que Jimin iba a hacer fue interrumpida por el rápido accionar de la mujer que antes de dejarlo hablar, dirigió una de sus manos a la frente del muchacho.

De pronto, aquel desierto en el que ambos se encontraban se desvaneció hasta dar paso a un lugar completamente diferente. Unas pequeñas casas se alzaban en medio de la nada y de una de ellas  un hombre salía al encuentro de una mujer que corrió hacia él a gran velocidad hasta que ambos quedaron envueltos en un abrazo que en ese momento transmitía emociones tan fuertes que todo lo que estaba alrededor se volvió a desvanecer. Rápidamente la escena cambió a una en la que aquella mujer sujetaba a un pequeño bebé en sus manos y escapaba hacia un lugar en el que aquel hombre la esperaba. Su encuentro parecía ser tan esperado por ambos, pero aquella esperanza que ardía en sus ojos se fue apagando cuando el camino que los conectaba se fue destruyendo con el rugido de un tormentoso rayo que hizo que ambos cayeran al oscuro abismo que había aparecido bajo sus pies.

Después todo fue silencio. Un sepulcral silencio que fue roto por los tétricos gritos de aquella mujer pidiendo piedad. Todo se tornó más claro cuando Jimin pudo ver a aquella mujer luchando por salvar a su pequeño bebé de las garras de un monstruo que terminó asesinando al niño. En ese momento Jimin quedó horrorizado hasta pasar a ver la siguiente escena en la que observó a la misma mujer enloquecida, buscando algo en la tierra. De pronto vio que luego de haber cavado profundamente, extrajo de aquel hoyo el cadáver del niño, el cual ella abrazó y protegió como si aún estuviese vivo hasta desaparecer con el viento.

Otra vez todo se volvió oscuro y silencioso hasta que una chispa de fuego intenso apareció flotando en el aire de aquella pesadilla, iluminando el rostro de Jimin.

  —Aquella mujer era yo— confesó la reina atrayendo la atención de Jimin, — y aquel bebé eras tú— repitió con la voz casi quebrada.

Un poco de silencio acompañó a la expresión de Jimin que parecía no moverse ni respirar en ese instante.

  —Eso no es cierto— Jimin dijo con incredulidad— es imposible.

  —Tú eres mi hijo— añadió Taeyeon mientras los ojos de Jimin se agrandaban y temblaban con miedo.

  —M-mi madre murió cuando yo nací— replicó Jimin en tanto unas cuantas lágrimas se formaban en sus ojos.

CLOSER [YoonMin]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora