dos

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Había salido a buscar algo de comer,no le fue muy bien todo lo que encontro fue un insecto del tamaño de un perro adulto ¿Un insecto? ¡Que ironía! Pero así estaban las cosas y no podía quejarse. Todo era culpa suya y lo lamentaba enormemente.

Llevaba dos días en ese planeta,
escondido en una cueva, aguardando a que compañero despertará. No entendía porque lo salvó,tal vez esa fue la revancha que aquel ser,ideo para atormentarlo. Si asi era ¡felicidades! lo había logrado.

En esas horas de soledad había llorado amargamente por todas sus acciones,se lamentaba de lo que hizo y no hizo,de lo que debio hacer,de lo que debio valorar,de lo que perdió por querer conseguir algo que a esas alturas sonaba ridículo.Se lamentaba de tantas,tantas cosas que ya no tenía lágrimas ni ira que extraerle a ese cuerpo abatido.

Hubiera dado su propia vida por volver el tiempo atrás y no haber caído,como un imbécil,en las promesas de Freezer,pero es que saber lo que realmente ocurrió ese día lo saco de si. Estaba furioso todo,lo que quería era ir y encarar al responsable,pero entonces Freezer le ofreció una revancha. Le dijo que ambos tenían el mismo objetivo,que ambos querían deshacerse del señor Bills y juntos podían lograrlo,sin siquiera tener que pelear con él.Frezeer lo convenció de que no bastaba con derrotar a Bills,había que humillarlo,despojarlo de todo y hacerlo morder el polvo y la idea le pareció interesante. Más que interesante porque en el fondo estaba cansado de ser humillado por ese dios y quería,de una vez, desquitarse de ese sujeto que desde niño vio hacer lo que quiso. No pensó en las consecuencias que eso podía traerle,en las vidas que podía afectar o perder. Porque ahora todos estaba muertos,no estaban peor que muertos. Habían sido borrados por el hakai de Bills y él sabía que no fue realmente el dios, quien había eliminado la tierra junto a su familia y esos insectos. Sólo ver a uno con vida le hubiera ayudado,quizá, a sentirse mejor o bien todavía más culpable de todo.

Ella ya no estaba y sus hijos tampoco.Los amaba aunque no era él,el sujeto más afectuoso,
sabia que de algún modo su familia sentía su afecto y con eso le bastaba,pero ahora había un vacío en su corazón y un dolor diferente a las heridas de las batallas,un dolor que no se iba,que sólo aumentaba.

Volvía cabizbajo a la cueva donde él reposaba. Aquel sujeto era otra víctima de su insensatez y su sed de venganza. Nunca le resultó un sujeto relevante,
aunque reconocía que más de una ves les salvo la vida, como en su pelea con Majin buu o cuando viajo al futuro de Trunks y salvo a este y a la chica. Pero más allá de eso para él era otro insecto,
ahora en cambio,quizá,era su único aliado si es que había llegado a entender sus motivos y a disculparlo.Porque ese sujeto había ido a a la tierra para hablar lo que pasaba con él, cuando lo más sensato hubiera sido ir con Bills y así este lo hubiera destruído a él y a Freezer,pero ellos seguirían vivos. ¡Al diablo! La culpa seguía siendo suya y ahora tenía una pequeña esperanza de que ese sujeto,conociera alguna forma de al menos remediar en parte todo lo que había causado.

Si el plan de Freezer y ese viejo pervertido había resultado seguramente él, ya no era el supremo kaiosama,pero debía seguir teniendo un amplio conocimiento del universo y esas cosas así que tal vez...quizá... O bien simplemente lo dejaría solo y no podía culparlo.

Por fin regreso a la cueva y al entrar se encontró con ese sujeto,sentado abrazándo sus piernas junto al fuego que él, había dejado encendido. Al verlo llegar lo miro sin rencor y le esvoso una leve sonrisa:

-¿como está,Vegeta?-le dijo.

RevanchaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora