Lo hice, increíblemente encontré otra razón para llorar. Descubrí una nueva manera de sentirme sola. Lejos de vos. Arde en mi nariz y me pegotea los ojos. Me llena la cabeza de recuerdos y ahora sí es imposible escapar. Sonidos de guitarra se clavan en mi garganta y la suave voz no me reconforta. Te encontré pero nadie quiere que estés a mi lado. Ni siquiera yo. No perteneces aquí. Dejá. Sé una poesía más. No te dejes encontrar. Porque buscar no me sirve y esperar tampoco. Los inviernos se escapan y el verano nunca es suficiente. Hoy me pareció que no soy tan vieja. Eso también lo descubrí. Te descubrí siendo más que una fotografía y ansias de escribir. Pero encontrarte...ya te dije. No te dejes encontrar. Mejor vete. Sé libre como otra de mis poesías. Quizá también podrías dejarme dormir. Qué sé yo. Si vos sabés que no sé nada.