Iba a escribir acerca de otra cosa, pero como siempre, cuando pienso que mi vida puede estar en calma, cuando la rutina aparece y me preocupo por mi vida en esta tierra, vos aparecés y me llevás hasta la fantasía otra vez. Y yo me dejo llevar, lo sabés. Siempre voy a tener tiempo para vos y para lo que quieras hacer de esta mísera existencia mía. Y en realidad no importa que tanto tiempo me las pase ocupada en otras cosas porque escondido en el horizonte de mis pensamientos, estás vos y tu sonrisa y todo lo que sos. Calmándome, llenándome de sensaciones que agradezco porque me permiten saber que aquí estoy y aquí sigo. Aquí estamos ¿no es maravilloso? Porque a pesar de la debilidad del pasado, ahora nos vemos fuertes y animado a continuar este camino que aunque difícil, sigue siendo el que elegimos. Y quiero que sepas que estoy muy orgullosa de vos y todo lo que lograste hasta hoy. Qué bueno que ya estamos mejor. Qué bueno que podemos otra vez, mostrar nuestras sonrisas. Al final pudimos hacerlo y hoy no nos queda más que seguir alentándonos a seguir.
Cada día que pasa, con el amanecer invadiéndome, con las obligaciones estampillándome, con el futuro atemorizándome, te amo más. A pesar de la tempestad que esta joven de 23 años tenga que pasar, te voy a amar.