XXII

7.1K 682 89
                                    

LEMON, MAL ECHO.

...

El resto de la semana se la paso totalmente concentrado en su trabajo, YoonGi, JiMin y él estuvieron, prácticamente, viviendo juntos pues los mayores se negaban a dejarlo sólo alegando que no iban a permitir que se deprimiera.

Después de una larga pero divertida semana ya se encuentra de nuevo en su casa, cocinando el desayuno. Después de haber servido en dos platos la comida se dirigió a la segunda planta y dio un par de suaves golpes en la puerta de la habitación de JungKook.

El menor salió y salto sobre él al verlo, TaeHyung se sorprendió y se tambaleó unos cuantos pasos hacia atrás. —Hyung, te he extraño tanto— Correspondió el abrazó del azabache y sonrió.

-Y yo a ti, ven, vamos a desayunar- JungKook aumento la fuerza de su agarre en el cuello del mayor y salto enredando sus piernas al rededor de las caderas del castaño.

-Llevame- TaeHyung rodó los ojos y soltó una suave risa.

-Eres un bebe JungKook- Pero aún así lo llevó, sus manos sostuvieron al chico de la cintura dándole un soporte más.

Bajo con sumó cuidado las escaleras para evitar cualquier accidente, una vez en la cocina, el menor lo soltó y se sentó frente a uno de los dos platos con comida.

Hizo un sonido de satisfacción al degustar el primer bocado. —¿Te gusta?— Preguntó el mayor sin despegar su mirada de su plato.

-Si- JungKook notó que castaño comía en silenció, su mirada no se despegaba del plato y parecía estar incómodo o algo así. —Hyung, siento lo del otro día, de verdad no quería que tu vieras eso— El mayor levanto la vista de su plato y la posó sobre los ojos del azabache.

-Como sea- Pronunció después de varios minutos de absoluto silencio, el menor hizo una mueca ante la respuesta.

TaeHyung se puso de pie, lavó los platos que utilizó y los dejó en su respectivo lugar, se dispuso a salir e ir a su habitación a cambiarse pero, como muchas otras veces, le fue impedido por el menor.

Su mano derecha fue tomado por las del azabache, sus miradas se conectaron, ninguno decía nada, el tiempo parecía haberse detenido.

JungKook sintió que se hacia chiquito ante la fuerte mirada del mayor, lo miraba sin expresión alguna y por breves segundos parecía que hasta con molestia.

Soltó la mano de TaeHyung y antes de que este si quiera se apartara, enredo sus manos al rededor del cuello de este y junto sus labios a los del mayor. Este se sorprendió, llevó sus manos a las del azabache e hizo que lo soltara para acto seguido separarlo de su persona.

Dio media vuelta con intención de irse, los brazos del menor lo rodearon por la espalda deteniendo en él, todo movimiento. —Por favor Tae, sólo una vez y prometo dejar de molestarte, por favor— El castaño quedó en trance al darse cuenta de lo que le estaba pidiendo. —Por favor— Volvió a pedir el menor cuando el más alto intento soltarse del agarre.

¿Deberia? Tal vez era incorrecto, pero si lo hacia se libraría por fin de todos los intentos de JungKook por seducirlo y así, al fin, podría sacarlo de su corazón.

*Sólo una vez* Pensó, obligó al menor a soltarlo, este pensó que la respuesta era un no pero fue sorprendido por los labios sobre los suyos.

-Sólo una vez, jamás se repetirá ¿Entiendes?- Al grave voz del mayor lo hizo temblar, asintió con un movimiento de capaz sintiéndose incapaz de hablar.

TaeHyung le tomó de la mano y lo guió hasta la habitación del menor, una vez dentro pegó la espalda del más bajo a la puerta y atacó sus labios. JungKook jadeo al sentir una de las frías manos del mayor colarse por debajo de su camisa y acariciarle.

Casados por acuerdo. [CORRIGIENDO]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora