Vegetto & Kefla - Conexión Potara.

28: Celebridad por accidente.

Sexto Universo.
Sadala.

Había transcurrido un día, el cual fue relativamente normal para los dos saiyajines después  de que los compañeros del joven soldado se estrellaran en las afueras de la ciudad.
Kyabe seguía "enfermo" y las ropas de la saiyajin se terminaron de secar.

Kefla estiraba sus brazos viendo el amanecer a través de la ventana, la chica abre la ventana, aspira un poco de aire y a continuación la cierra.

Kyabe terminaba de cepillarse los dientes y lavarse la cara.
Pasa muy cerca de la saiyajin y la mira por unos instantes, perdida en sus pensamientos...

—Pensé que dormirías más tiempo, se nota que te levantaste bien temprano— le pregunta curioso y continúa hacia la cocina.

Ella se vuelve hacia el y le contesta.

—No podía dormir, pero da igual porque pude descansar lo suficiente —¿Haras el desayuno?— pregunta siguiéndolo.

Sacando un cartón de huevos el saiyajin responde.

—Si, haré varios sándwiches y freire los huevos —¿Te apetece el queso fundido?— Kyabe se dirige al refrigerador, saca una bandeja con queso amarillo, una con jamón y algunos vegetales para complementar.

—Piensas resolver bien, me encanta —Pequeño cocinero— dice la chica de forma traviesa arrojándole el delantal de cocina a Kyabe.

—Muy bien, señorita —Ya que usted no es capaz de preparar una comida, permítame enseñarle cómo se hace esto...

Kefla se congela y ríe nerviosa.

—Eh, eh, eh... ¿De qué estás hablando? —Yo no pienso cocinar ni muerta, me es más fácil hacer como Caulifla y Kale, robar las provisiones ya listas o en conservas que no requieren mucho preparado.

—Se me olvidaba, toda una bandida, una chica muy mala— ríe Kyabe.

—Por cierto ¿En qué estabas pensando hace rato?— pregunta recordando a Kefla mirar la ventana, sumergida en sus pensamientos.

Apática ella le responde.

—Yo... En ellas, que son, somos... Yo —Pero a la vez no, mi nombre es Kefla y por más que me parezca a ellas o actúe como ellas, nadie me ve como... Ellas.

—Soy una extraña, la chica de la voz rara, la fenómeno —¡Ju! Pero pobre del desdichado que se atreva a decírmelo en la cara, por algo soy una saiyajin y una muy fuerte— celebra la chica pasando de la apatía a las risas.

—Precisamente porque eres fuerte sé que superarás cualquier obstáculo, ahora presta atención a lo que hago— murmura Kyabe tomando un sartén.

—Jajaja... Buen intento, pero no... Yo paso, esperaré en la sala— Kefla da media vuelta, presta a dejar la cocina.

—Bueno, entonces ya que no me vas a ayudar en la cocina y que tampoco quieres aprender, recuerdo que habíamos quedado en algo —¿Lo recuerdas?

—¿Qué cosa?— pregunta Kefla arrugando la frente.

—Yo accedí a acompañarte a repartir la comida en el pueblo y tú tenías que venir conmigo a una de mis misiones, así que ya está —Hoy no me haré más el enfermo y vendrás conmigo Kefla.