Un príncipe y su guardia leal
Siendo visible solamente un punto anaranjado a la lejanía, el príncipe todavía era incapaz de apartar la vista de su navío hundiéndose y quemándose. Se abrazaba a sí mismo, ignorando por completo lo que sucedía a su alrededor, no tenía ganas ni de luchar. No veía a los criminales que atendían entre ellos sus heridas, y a su guardia quien apenas había despertado pero que no había pronunciado palabra alguna, se mantenía sentado donde le dejaron recargado.
—Hemos tenido peores heridas, HoSeok ha estado a punto de morir demasiadas veces, de hecho. —contó YoonGi a JiMin quien miraba con impresión como el controlador de aire se encargaba de limpiar y coser la herida de NamJoon con los materiales que habían traído desde su hogar.
HoSeok rió mientras NamJoon apretaba su boca para no quejarse —Si estuviéramos en nuestro hogar tendría qué darle a NamJoon para que no le doliera tanto, tengo muchas plantas que me ayudan con eso. Ya termine. —dijo dando una palmadas en el brazo de su amigo quien suspiró y se levantó de la caja en la que estaba sentado. Mientras YoonGi les comenzaba a reclamar sobre el por qué habían dejado a JiMin un momento solo, ambos compañeros de este voltearon a ver hacia los recién subidos al bote.
A su parecer, el príncipe estaba demasiado calmado. HoSeok dejó lo que había estado usando con NamJoon para caminar lentamente hacia el príncipe, fijándose en el brazo que usó para frenar la caída, preguntándose si se habría lastimado. Se detuvo a su lado analizando la ropa blanca ya bastante sucia, ya fuese por el la ceniza que les alcanzó o por la caída que tuvo. No vio sangre, pero no significaba que no estuviese lastimado.
—¿Está herido? —preguntó luego de dudar, no sabía cómo dirigirse a él pues era notable que era menor que él, pero sin embargo, era de la realeza. Pareció no oírle, sus ojos estaban atentos todavía al horizonte, justo donde vio su barco desaparecer. Estiró la mano con intención de tocarle el hombro cuando se escuchó un grito.
—¡Te atreves a tocarle y te arrancó la mano! —al parecer la calma era solamente aparentada en el guardia, ya que este se puso de pie y con una velocidad asombrosa empujó lejos al criminal y protegió al príncipe con su cuerpo.
HoSeok casi cae de no ser porque JiMin alcanzó a tomarle del brazo, viendo con el mismo asombro que JungKook y YuGyeom la valentía y dureza del guardia peli blanco, mientras que YoonGi solo suspiró y NamJoon se colocó la camisa, acercándose para posarse delante de sus compañeros, frente a frente con el guardia.
—Más te vale que te controles, nosotros somos los armados —dijo sacando su espada de la funda—. Escuchen, están secuestrados ahora, obedézcanos en todo y no morirán, ¿De acuerdo?
En el rostro del guardia se dibujó una sonrisa amplia y falsa —No son la gran cosa, no representan un peligro para nosotros, solo son otro grupo que intenta de ser más inteligente que nuestro Rey, pero no será así, ustedes no tienen idea de con quienes se han metido y las consecuencias que pagarán por lo que han hecho.
» Les van a quemar, a todos, ustedes arderán por siempre. —les condenó.
—Están aquí, en nuestro barco, bajo nuestro poder —afirmó dando un paso al frente, retando con la mirada al hombre—, y realmente quien nos sirve es el principito, tú, querido amigo, solo has venido a morir en mis manos.
Vio con gozó como el rostro del hombre comenzaba aponerse rojo mientras el príncipe le tomaba del brazo y le susurraba algo. El de cabellos blancos negó con firmeza —Yo no voy a morir por ti, te iba a asesinar y lo volveré a intentar, solo que en nuestro siguiente encuentro terminaré contigo como debió pasar.
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"DDAENG" YoonMin
FantasyHace demasiados años atrás, más de los que se pueden contar, el mundo era otro y los dioses obsequiaban la elección al hombre y a la mujer de ser humano o animal. Dividido en reinos, los seres que vivían en el agua no podían hablar con los que habit...