Capítulo 30

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Al llegar al palacio los esperaba una persona de estatura promedio, tenía el cabello blanco igual que Whis y Vados pero a diferencia de ellos, este sujeto tenía la aureola justo detras de la cabeza.

Daishinkan : Bienvenido Zeno Sama.

Zeno : Hum, traje a una persona para jugar.

Daishinkan : Me alegro por usted ,me presento soy Daishinkan ¿cuál es su nombre señorita?

(T/n) : Mi nombre es (T/n), un gusto.

Daishinkan : El gusto es mio, vamos Zeno Sama lo llevare dentro.

Al decir eso los teletransportó al trono de Zeno Sama.

Daishinkan : Muy buen Zeno Sama, lo dejo para que juegue con la señorita (T/n), tengo unos asuntos que atender.

Zeno : Hum bien.

(T/n) : ¿Empezaremos a jugar ya?

Zeno : Sii.

(T/n) : Perfecto, ¿que vamos a jugar?

Zeno : No lo se, esperaba que tu me dijeras.

(T/n) : ¿Yo? Bien ....¿qué le parece si jugamos a las escondidas??

Zeno : Bien, pero, como quieres que te llame ¿Son (T/n)?

(T/n) : Solo dígame (T/n).

Zeno : Muy bien, ¿y como me dirás a mi?

(T/n) : Eh.... Pues no se....

Daishinkan : Zeno Sama ¿me mando a llamar?

Zeno : Sii, quiero que juegues con nosotros.

Daishinkan : Claro Zeno Sama ¿qué quiere jugar?

Zeno : Ella a mencionado un juego muy interesante, dice que se llama escondidas.

Daishinkan : ¿Y de que trata señorita?

Zeno : Espera Daishinkan, aun no me ha dicho como me dira.

(T/n) : Mmm es más difícil de lo que pensé ¿que le parece Zeni?

Daishinkan aguantaba la risa.

Zeno : Zeni esta bien, ahora juguemos.

(T/n) : Bien, el juego consiste en que uno de nosotros contará con los ojos cerrados mientras los demás se esconden, pueden cambiar de escondite para hacer el juego más largo y más difícil para el que los encontrara.

Zeno : Suena divertido.

(T/n) : ¿Quiere que yo empiece a contar y ustedes se esconden?

Daishinkan : Suena bien.

Zeno : Si juguemos.

(T/n) : Bueno, empezare a contar.

Cuando inicio la cuenta, Zeno fue a esconderse detrás de su trono, mientras Daishinkan algo resignado se alejo un poco del lugar y apoyaba su espalda en uno de los pilares. Fie fácil encontrarlos al principio, cambiaron lugares muchas veces, el segundo en contar fue Daishinkan y por último Zeno Sama, cuando fue el turno de ella por décima vez, tras unas horas de búsqueda finalmente los encontró, se sentía algo cansada, recorrer el lugar de aquí a allá era aburrido, no habían muchos lugares dónde esconderse, Zeno decidió que había jugado suficiente, ya no sentía la misma emoción que al principio.

Zeno : Ya no quiero jugar (T/n) ¿tienes hambre?

Daishinkan : Eh escuchado que los saiyajines comen mucho ¿es cierto?

(T/n) : Jajaja si, es cierto.

Zeno : ¿Daishinkan dónde puede comer?

Daishinkan : Tendríamos que ir a algún universo, aquí no hay comida.

Sangre De DeidadDonde viven las historias. Descúbrelo ahora