Capítulo 48 - "Celos"

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N/a: No me maten, no me maten, bajen las antorchas. Lo que pasa es que ambos fines de semana fueron los cumpleaños de mi mejor amiga y mi amiga, y tenía que ir, entonces no pude escribir. Lo siento por ser tan irresponsable con esto :(, no es fácil escribir y estar pendiente de las historias, estudiar, tareas y tener una vida social. Los quiero mucho y ojalá me perdonen.



Era de noche así que no me esforcé mucho en ver a las personas que estaban al lado de Hayley y Thomas. La luz de los faroles me hubiese ayudado a verles la cara pero eso lo haría después. Mientras tanto, solo veía a Nate entrar a la piscina, ¿por qué no podía parar de mirarlo? Ah, bueno, tal vez por el hecho de que estaba sin camisa y se veía realmente bueno desde donde yo estaba. ¿En que me había convertido? Mi yo del pasado se hubiese sentido muy avergonzada de mí.

-Ese de ahí no para de mirarte – escuché a Mac a mi lado. El rubio, ya no tan rubio por el agua, estaba mirando disimulado atrás de mis hombros.

-Pues ojalá no sea a mí – me volteé disimulando y sí, estaba un chico con pelo oscuro, casi negro y unos ojos color azul. Me sonrió y yo solo sonreí de boca cerrada.

Me volteé hacia Mac.

-No está feo, – dijo. Fruncí el ceño y Mac se encogió de hombros – soy medio gay.

Reí un poco y sonreí, lo codeé y señalé al chico que me estaba mirando. Ya podía crear un shipp para ellos, aunque ni sabía él nombre del otro.

Mi pelo ya se estaba secando pero yo seguía en la piscina. Mi camisa ya se estaba pegando a mi cuerpo y mis short también. Consideré quitarme mi camisa, al fin y al cabo tenía vestido de baño debajo de ella. La atención de todos estaba en Hayley, quien estaba hablando; aproveché eso para quitarme la camisa y la tiré para que quedara cerca de una mesa que había. Era de noche así que nadie podía verme en vestido de baño, eso me haría incómoda con los nuevos que habían llegado a la finca de Hayley.

Decidí mirar hacía ellos y vi que habían 3 chicos y 2 chicas. Todos estaban en vestidos de baños como si tuvieran por seguro que los íbamos a dejar venir a la finca... bueno, así fue. Las dos chicas eran hermosas, tenían el cabello largo y de colores claros en la punta. Sus facciones eran pulidas y delicadas; ellas se veían delicadas. No es que yo no fuera delicada, solo que ellas se veían como unas princesas.

Y una estaba mirando a Nate.

Rodeé los ojos y me acerqué a la orilla mientras veía como los tres chicos entraban a la piscina. Mac no mentía, ninguno estaba mal. No eran mi tipo, sin embargo era lindos.

-¿Te animas a jugar? – me preguntó Thomas.

¿En que momento entraron todos a la piscina?

Ahora la piscina se sentía mucho más pequeña que antes y eso era porque todos estabamos en ella.

Algunos ojos cayeron en mí y me sentí incómoda.

-Eh, sí. ¿Qué vamos a jugar? – pregunté y me acerqué a un pequeño circulo.

-Verdad o reto – dijo una chica, la que estaba mirando a Nate antes. Sus ojos seguían en él.

Que poco pudor.

-Qué cliché – dije, sin pensar.

-Eh... perdón. No-no sé que más podríamos jugar – respondió, nerviosa.

¿Coincidencia?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora