Capítulo 63 - "El partido II"

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N/A: nada que ver la frase con la canción xd.

"I can't, be your, only one

No, I can't, be your only one

'Cause you look twice as good as anyone I ever met

And your love is three time better, how could anyone forget".

-Only 1/ Ariana Grande.

-Becka, aquí estamos – escuché hablar a Arlet unas gradas más arriba.

Ambos me miraban tomando un smoothie como si acabaran de ver una película y estuvieran atenta a ella. Como si yo fuera el payaso. No se les veía malicia en su mirada, pero igual, no estaba de humor como para que me importara si sí.

Solté un suspiro y asentí para sentarme al lado de Blaise. Me hubiera sentado con Arlet, pero no había espacio para mí, y solo parecía haber un asiento al lado de la persona que parecía odiarme. Se puso rígido cuando mi pierna tocó la suya ya que no había suficiente espacio para ambos, entonces teníamos que quedar muy cerca.

Excelente, ahora todo el mundo tenía reacciones raras cuando yo estaba a su lado.

¿Diosito, por qué eres así?

¿Soy una broma para ti?

Apoyé mi cabeza en mis manos para ver como empezaba el partido. Ambos equipos entraron creando una bulla en el ambiente; muchas palabras de aliento para los jugadores. Se veían un poco sudados tal vez por el entrenamiento previo para calentar sus músculos, y poder dar todo de ellos. A mi lado, algunos se levantaron para hacerles barra al equipo de San Diego, aunque nunca los había visto antes. Según Thomas me había dicho antes, nuestra escuela tenía una reputación de ganar la mayoría de todos los partidos en los que había participado nacionalmente. Era prestigiosa respecto a lo deportivo y lo académico, haciendo algunas escuelas buenas estar mucho más abajo en las gráficas.

Pero yo solo estaba ahí para ver a mi novio jugar el cual, probablemente, me estaba odiado ahí mismo. Pero entonces lo vi. Allí estaba con sus amigos del equipo hablando y viendo a los jugadores del otro equipo. Nate tenía los brazos cruzados y tenía cara de pocos amigos, sabiendo muy bien donde yo estaba y evitando mirarme.

¡Muy maduro de tu parte, Nathaniel!

Teniendo en cuenta que casi besas a uno de sus peores enemigos, Becka...

O sea, sí, ¡pero no lo hice! ¡Ni estuve cerca! Literalmente detuve cualquier posibilidad de besar a Daniel porque yo estaba conciente de que tenía novio.

El ambiente estaba cálido, algo un poco extraño; aunque, con el calentamiento global, nada era normal.

El efecto invernadero es algo serio, c ñores.

Me mordí las uñas admitiendo que se veía ridículamente guapo en ese uniforme, en esa cancha y con esa cara de culo. Su cabello estaba desorganizado y más claro por el sol, hasta desde donde yo estaba podía ver sus ojos siendo lo claro que eran. Sus shorts le quedaban cortos mostrando sus músculos en sus piernas y, aunque llevaba una camiseta, podía ver como se le marcaban los músculos en ella. En ese momento me había sentido como una niña pequeña vigilando a su crush.

Como Becka siendo Becka, me quité la chaqueta que había llevado por si acaso; la cual en ese momento solo estaba haciendo que todos mis órganos internos estuvieran disfrutando de un delicioso asado interno. Una que otra persona estaba cubierta por chaquetas y bufandas como si estuviéramos en el polo norte, ¿cómo podían? Tal vez muchos de ellos estaban acostumbrados a estar a climas más calientes que eso les parecía frío.

¿Coincidencia?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora