N/A: After all this time...
-¡Ponlo! – gritamos.
-Es que no puedo... - dijo Blaise.
-Creo que ahí toca... - dijo Dan.
-¡Ahí, ahí! - exclamé casi gritando.
Blaise me fulminó a mi y a Dan con la mirada por un milisegundo antes de volver sus ojos a la computadora. Sí, ahí aparecía el video, pero se trababa cada vez que tratábamos de entrar, ¿el porqué? Dios sabrá, pero parecía imposible.
-Sería muy gracioso que se eliminara el video como de la nada- dijo Nate gracioso, mirando al techo mientras daba vueltas en la silla giratoria.
-Sí, sí, muy gracioso - le dije, mirándolo mal.
No se podía eliminar el video de la nada, ¿cierto? Eso solo pasaba en películas de gente con mala suerte. Yo no tenía mala suerte... bueno, tal vez un poco, pero esto no podía salir mal ahora. Habían mucha información en ese video antiguo que nos podría ser útil – bastante útil.
Estábamos a unos pasos.
Unos simples pasitos.
Ah, pero no. Se tenía que trabar el pinche computador.
Respira, Becka.
Uno, dos, tres, cuatro...
-¡Funcionó! – excalmó Blaise.
A la mierda el uno, dos y tres.
-Eso, eso, - dije olvidando mi paciencia. Me acerqué al computador con los ojos abiertos y expectantes. Sentí la mirada de Blaise mirando como si fuera una rara - ¿Qué?
-Nada – dijo indiferente.
Sentí como el bazo de Nate me rodeaba la cintura atrayéndome hacia él. No entendía que pasaba, porque, bueno, mi cerebro estaba aún emocionado porque había funcionado el computador, finalmente. Fruncí el ceño un poco confundida y volteé a mira a Nate. No me miraba a mí; miraba a Blaise. Lo miraba serio, cuando hacía unos segundos estaba de lo más de feliz.
Entonces entendí: estaba celoso. Pero era un "celoso" que solo lo había visto unas cuantas veces, escasas veces. Normalmente podría decir que se ponía celoso cuando estaba Jared, pero sabía que hacía cosas jodiendo. Pero, esta vez si se veía serio. Tal vez era por el hecho de que creía que Blaise estaba coqueteándome, ¡Já! Si Blaise ni me miraba cuando me hablaba.
Nate no tenía de que preocuparse, él ya tenía mi corazón desde hacía tiempo antes de que yo lo asimilara.
Me volteé, me acerqué a Nate y le di un beso. Uno corto y simple, pero hizo que me mirara a los ojos. Sus ojos verdes los cuales no me cansaría en mil años de mirar, seguían enojados. Le agarré la mano y le se la apreté un poquito.
-No tienes que preocuparte – susurré con una sonrisa disimulada en mi cara.
-Pff, no estoy preocupado – dijo, mirando a otro lado.
Stopppp. Era tan tierno.
Negué frenéticamente – no, no, obvio no – dije con ironía.
Me miró y entrecerró los ojos - ¿sabes, Becka? Va a ver un día en el que te sientas así cuando otra me coquetee.
¡Já! Como si eso ya no hubiera pasado miles de veces.
-Estaré ansiosa a que llegué – mentira. Ya había llegado ese momento, desde hacía semanas.
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¿Coincidencia?
Fiksi RemajaLa mayoría de las personas creerían que una mudanza sería el escape a todos sus problemas, ¿no? Pero, para mí, no. Tuve que dejar a mis amigos, mi familia, mi vida -mejor dicho todo - para mudarme a San Diego. Por lo menos pensé que tendría un buen...