Draco Nos Volvemos A Ver (Parte II)

El Secreto

Draco cumpliría su promesa, a pesar de que Hermione presa de su curiosidad le había intentado sonsacar cual era ese secreto que le había confiado Odalis, pero a pesar de sus esfuerzos no logro que le contara nada.

Pero algo ocurrió que hizo que Hermione se olvidara del asunto y terminara doblada de la risa. Su querida amiga Tamy, que llevaba con orgullo el apellido Potter desde que se casara con Harry, habia hecho de nuevo sus maldades.

Para no perder la costumbre había puesto cierta sustancia extraña en la bebida en la copa de Ron haciendo que la piel de este se hiciera escamosa y de un color azul metálico que sumado a su cabellera roja le volvía a dar la apariencia de un duende en túnica de gala.

-Es solo para no perder la costumbre. -Dijo entre carcajadas Tamara que se escondía tras la espalda de Harry para que el pelirrojo no se le fuera encima.

La velada ya estaba por terminar ya solo los más allegados se encontraban reunidos y en plena carcajada por los sucedido. Era una escena irreal ver como Ron trataba de atrapar a Tamy que apenas podía correr en tacones y vestida con un bonito vestido largo en color rojo.

Draco, Harry, Axel, Blaiser y Theo eran los que más se reían al ver ese duende azul escamoso dando tumbos intentando pescar a una acalorada mujer de cabellos cortos que no paraba de reir y enseñarle la lengua a manera de burla. Chocaron sus copas para brindar por ese divertido momento, pero tras dar el primer trago se dieron cuenta que nunca debieron haberlo hecho.

En cuestión de un momento los cinco tenían el mismo pintoresco aspecto que Ron, con la diferencia de sus cabellos que tenían sus respectivos colores, rubios, negros y castaños. A sus espaldas los culpables se tapaban la boca intentando acallar las estruendosas carcajadas que terminarían delatándolos.

Pero no pudieron aguantar mucho parecía imposible, incluso un par de lagrimas ya escapada de sus ojos de tanto reír. Doblados de la risa solo atinaron a ocultarse temiendo a ese quinteto de hombres azules que los miraban furiosos.

James y Fred al mero estilo merodeador, y coludidos con Tamara habían vertido la misma poción en todas las copas. Albus y Lily aplaudían la proeza de su hermano mayor y de su primo favorito.

Scorpius, Thor, Leo, Antares, Hydra, Elden y Barlog, sumados a Hermione, Tamara, Sara, Alissa, Ginny, Luna y todos los demás Weasley, asi como sus respectivos hijos estaban atacados de la risa, incluso Tamara y Ron habían detenido su carrera y se detuvieron para romper a carcajadas ante la mirada de reproche de los cinco azules hombres.

Como medida de precaución el resto de los invitados dejaría  sus respectivas copas sobre las mesas solo por si acaso algún resto de esa peculiar poción los sorprendiera, aunque no fue necesario utilizarla, cuando en un afán de emparejar las cosas esos cinco hombres de piel escamosa más un sexto de cabello rojo, sacaron sus respetivas varitas para hechizar al resto de los invitados.

Así las últimas fotos de esa hermosa y peculiar boda mostraba a un feliz grupo de personas de pintorescos colores en piel y cabellos. La madre de la novia, Hermione   era purpura de cabellos rosas y su marido azul de cabello anaranjado, mientras que Tamara la mama del novio lucia con alegría un color verde vomito en la piel y un cabello rojo a juego con su vestido y Harry tan azul como Draco pero con el cabello rubio platinado al puro estilo Malfoy.

Odalis lucía una piel dorada y un cabello negro lo que le sentaba de maravillo, lo que no se podía decir de James que al ser el actor intelectual de ese embrollo junto con Fred, termino como un caramelo con rayas rojas y verdes en toda la piel y un cabello tan rubio como el que ahora llevaba Harry. Pero sin duda a pesar del colorido era uno de los días más felices de sus vidas.