Ian Lancaster Summers.
Un chico que llegó a mi vida cuando tenía 14.
Un chico que me dio todas mis primeras veces.
Un chico que me hizo tocar el cielo y lo más profundo del infierno.
Un chico de increíbles ojos y dulce sonrisa.
Él.
Mi medio hermano, mi primer y único amor, mi primer cuidador, mi proxeneta, todos los primeros lugares se los lleva él.
Aplaudo todo lo que él hizo, aunque no es muy difícil engatusar a una chiquilla de 14 años, cualquiera puede fingir querer, cualquiera puede cuidar a alguien solo para ganarse su confianza y su cariño para luego destruirlo en segundos, cualquiera puede decir cosas lindas y hacerse de todas las primeras veces, todo el mundo sabe fingir a conveniencia, él lo hacía muy bien.
Fingía sus miradas llenas de cariño, fingía su tono de voz al decirme que me quería, fingía sus cuidados, su protección, sus sonrisas llenas de confianza, falsa por supuesto, todo para tenerme en sus manos, para construir las cuerdas que empezaría a jalar a su voluntad haciendo que hiciera todo lo que él quería que hiciera.
Un títere enamorado, eso era yo.
Y sí, me enamoré totalmente, el primer año fue hermoso, el segundo perfecto, a principios del tercero todo cambió, me hizo una oferta para vivir mejor, para que él viviera mejor, no pude rechazarla, al principio iba a ser muy fácil, solo ser dama de compañía.
El ser humano es ambicioso, quiere más de lo que ya tiene, aunque sea suficiente y necesario, él veía que dejaba buenas ganancias, así que empezó mi verdadera tortura, fueron dos años repletos de golpes, humillaciones, violaciones, un hombre tras otro.
¿Saben que quiero decir, no? ¿O lo explico con palitos y bolitas, o con peras y manzanas?
Cuando nos enteramos de que mi padre murió no me fui al borde de golpe, Ian me ayudó, hizo que el golpe no fuera tan fuerte y me frenó cuando estaba por llegar al borde del abismo, él cuido de mí, se hizo cargo de todo, mis gastos personales, la casa, absolutamente todo, vio una salida para que cooperara y acepté.
Fue la decisión más estúpida que he tomado, pero sé que soy tan tonta que si me permitieran regresar en el tiempo lo haría y volvería hacerlo con tal de verlo feliz, de permanecer junto a él aunque yo lo pasara mal.
Aunque al principio todo era fácil, no dejaba que muchos estuvieran conmigo los primeros meses, luego le dio igual, si eran más, mejor, si me querían golpear, adelante, si me exhibían, bien, con que el cliente fuera feliz todo era perfecto, si con eso obtenía más ganancias mejor que mejor.
Luego llegó ella, Cloe, hasta nombre de puta tiene, era muy bella, al principio la vi como una cachorra más, al pasar el tiempo vi como Ian le daba más cuidados a ella, los cuidados que solía darme a mí. Hubo veces en las que le reclamaba, él solo se limitaba a decir:
No eres quién para reclamarme nada, no soy de nadie.
Y me dolía, no dejaba que lo viera en mi rostro pero él sabía leer mis ojos, le deje un instructivo para que pudiera entenderme y las claves para manejarme a su antojo, también le deje mis puntos, aquellos en los que, si quería acabarme, solo tenía que recordar qué decir y que no hacer, así de vulnerable y expuesta estaba a él, así de estúpida era.
Uso todo eso para manipularme a su antojo, por más que quisiera cerrarme a cal y canto él siempre sabía cómo, por un pequeño hoyo, entrar y herirme.
Ahora él no está y lo sigue haciendo.
Eso es lo malo del amor, más bien el estar enamorada, amar es lo malo. Todos sabemos que ‘amor’ y ‘amar’ no es lo mismo. ‘Amor’ es un sentimiento y ‘amar’ es una acción cargada de él.
No sé porque tanta gente lo confunde. Pero de igual forma estar enamorada es horrible, le das tanto poder a otra persona sobre ti, le das todo de ti a esa persona, tanto que llega un día en el que no saber qué hacer contigo y estás vacía.
O tal vez eso me pasó a mí por mi soledad, le di todo porque me cuido, deje que me protegiera de todo y de todos, deje que solo él pudiera hacerme sentir bien, deje que sus palabras pudieran herirme, deje…
Le di el poder sobre mí y ahora me arrepiento.
Hace tres días de que Caulder estuvo aquí, a veces me recuerda tanto a él, con sus buenos tratos, sus caricias y su forma tan… especial de complacerme.
Ayer por la tarde, hizo que saliera al jardín, sí, ayer fue jueves, nos sentamos en una banca alejada de todos los retrasados, hablamos sobre los días antes de que él llegara, sí, le conté sobre Roger y Franky, sonreía y me miraba pícaro.
Tenía mis piernas en las suyas y el las acariciaba, estaba hablando hasta por los codos, hacía años que no hablaba como perico, las enfermeras pasaban y no decían nada, Caulder les sonreía, incluso pasó Norma y siguió de largo, no sin antes de darme una mirada llena de odio.
Nadie dijo nada aún cuando nos estábamos comiendo los morros delante de todos.
No me gusta sentirme así, él hace recordarme que soy frágil.
Hoy hizo una visita rápida en la mañana, antes de irse me susurró algo.
—A partir de mañana habrá fumigación de plagas
Se fue dejándome confundida, me deshice de eso encogiéndome de hombros.
No he salido de mi habitación para nada, Jessy me ha traído el desayuno y la comida y si sigo así, la cena. No me le he acercado, aún sigue con esa actitud recelosa, me mira con temor y vergüenza juntas, sé que es sentirse así, cariño, paso de ella como siempre.
Cuando él me hacía ver como se jodía a Cloe era horrible, ver como alguien que quieres se folla a otra y disfruta tu sufrimiento es algo que no le deseo a alguien… salvo excepto a Alice y a Gorma, como sea.
A los días siguientes Cloe se pavoneaba enfrente de mí, la muy perra tenía el descaro de restregarme en la cara que era ella la que se lo follaba.
A mí con apuro él me dirigía la mirada, cuando me quejaba de algún cliente me mandaba a ver gatitos. Si me pegaban o me dejaban fuera de juego de la forma más salvaje le daba igual.
Es tu trabajo.
Solía decirme eso, o simplemente me dejaba hablando sola, hubo una vez que me golpearon entre tres y no dijo nada, incluso cuando fui y le lloré de rodillas, le pedí que parara con todo eso, se limitó a observarme de pies a cabeza, sonrió de lado y se marchó, lloré mil mares, al otro día tuve que hacer como si nada hubiera pasado y volví a la rutina.
En cambio si alguien le ponía una mano encima a Cloe, ardía Troya. La última vez que le reclamé me dio una cachetaba tan fuerte que sangré, me jalo del pelo y me dijo mi precio y la porquería de mujer que era, me zampó contra la pared cuando terminó, eso fue enfrente de todos, las chicas se reiron de mí, Cloe fue tras él no sin antes escupirme. Me trataba peor que a una muñeca de trapo.
Todo eso cambió hasta que llegó su hermano, él me trataba bien.
Justo como Caulder lo hace.
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Aquí el otro capi :3 Foto de Ian en multimedia ♥
¿ven que los amo?
¿Les gustó?
Estrellita y comentario por fiss.
L@s amo :* ♥
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Diario de Una Paciente de Psiquiatría. ©
Mystery / ThrillerRelata todo lo que es importante, no se olvida de ningún detalle... Salvo el porqué está allí, ese es el único detalle que no recuerda. Y es el más importante. • Contenido +18* • Portada creada por @CMStrongville. . Prohibida la copia de esta obra...