Diario de Una Paciente de Psiquiatría. ©

Día Dieciocho. Mudanzas

Fue el primer día que llegué, solo escuché su voz una sola vez, una sola  vez bastó para que me encantara.

Frank tenía la voz más hermosa que he escuchado jamás, la voz de Ian era magnifica y hacía latir mi corazón erráticamente pero Frank…

Me paré de golpe y caminé hasta mi puerta, estaba parado allí, parecía saber que estaba haciendo, no parecía ido o fuera de este planeta, estaba aquí.

—Que sensual sorpresa— saludo mientras lo tomo por el borde de su camisa.

—Me llamó Caulder— suelta de repente y  me congelo.

— ¿Disculpa?— este chico que siempre parecía ajeno al mundo no es el que tengo enfrente.

—Ayer, te llevara lejos, no es buena persona— balbucea un poco, le miro extrañada.

— ¿Qué?

—Te llevara. No es buena persona— repitió con tono neutral.

—Okay, ¿estás bien?

—Él no es bueno, Nicole, mi madre me dijo que tenía un radar para las personas malas.

— ¿Desde cuando hablas?

—Mató a Ali

Espera ¿qué? Shock es la palabra, lo miré sorprendida, sus ojos no trasmitían nada pero no daban paso a la mentira.

Le creí.

—A partir de mañana habrá fumigación de plagas

Y sí, hubo.

Lo miro darse la vuelta e irse con paso pausado, como siempre lo ha hecho desde que lo conozco.

Y algo en mí se quiebra.

No puede ser un homicida, ¿esas mismas manos pueden dar puñaladas tan certeras y mortales? Dulce amargo.

Caulder.

Veo a Jessy entrar con una bandeja, es la comida. La pone en la mesita, me debo de ver muy mal para que ella se detenga tan cerca de mí.

— ¿Pasa algo, Nicole?— pregunta preocupada, su linda frente es estropeada por ese ceño fruncido.

Mis ojos de llenan y colapso.

Todo se vuelve acuoso, después nada.

**

—Mi hermano vendrá en unos días, así que más te vale que actúes como una dama… si es que puedes

Es la tercera vez que me lo recuerda, me encuentro fuera de juego en mi cama, él como siempre, con su lindo traje negro a medida que tanto me gusta, tiene muchos parecidos pero ese, ese es el traje. Asiento mientras me seco las lágrimas, le he dicho que un cliente me ha golpeado y me repite la visita de su hermanito, no lo he visto y ya lo odio. En momentos como este recuerdo que es mi medio hermano, Ian se parece a mi madre, los ojos son los mismos; cuando me trataba bien su ternura era parecida a la de ella cuando estaba enferma.

¿Y si estuviera viva? La bastarda tal vez se hubiera llevado el secreto a la tumba de todas formas.

Pasan tres días cuando el increíble hermano menor hace acto de presencia.
Es. Jodidamente. Guapo. Como de otro mundo, aun así no se acerca a Ian.

Los días pasan y el parece saber que soy humana, se ha peleado con Ian por cómo deja que los clientes me traten, ha sacado a unos cuantos en cuanto me escucha gritar, se ha ganado golpes por parte Ian por eso pero le da igual.

Es mi héroe.

La primera vez que me metí con él Ian nos descubrió, se puso como un toro y lo golpeo como nunca he visto a alguien hacerlo, me fulminó con la mirada y el infierno incrementó.

A Caulder no le importó.

No por mucho tiempo, claro está. Hay veces en que el héroe se convierte en el villano, y el villano en héroe.

Obsesión por una mujer. Una mujer ha sido la causa de grandes guerras.

¿Y si deciden eliminarla?

**

Me levanta el ruido de mi puerta abriéndose, no recuerdo que hiciera tanto ruido antes pero este vez logra despertarme.  Veo una figura entrar.

—Es hora del traslado

Mi querido portador de malas nuevas, David Andrew.

—Feliz viaje, cariño

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¿Algo cortito,no? El próximo será largo, lo prometo ♥

GRACIAS a tod@s l@s que se tomaron un tiempo para darme ssu comentarios, aun sigue abierta la invitación :3

Les amo mucho ♥ 

Gracias por leer.