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2. Rush

Alba

Africa le pegó un codazo mientras ella cambiaba su cara de antipática total a una persona simpática y hasta buena persona.

"Hola, es un placer conocerte" Sonrió falsamente "Bueno a ti y a tu moco" Iba a saltar pero antes de que pudiera, Lea, que había conseguido subirse al taburete se giró para mirarla.

"Mi mama dice sempe hay que se educada y tú no ere educada y mama dice tamben que a pesona no educada no se contesta asi que no contesto" No pude evitar reírme de la ocurrencia de mi hija, claramente algo estaba haciendo bien "Así ben mama?"

"Muy bien mi amor" Le sonreí dandole un beso en la cabeza.

Natalia intentaba no reírse ya que claramente a su amiga no le había hecho tanta gracia como a mí y a ella.

"No... sí claramente de tal palo tal astilla, pobre niña" Susurró por lo bajini pero tanto Natalia como yo la escuchamos claramente.

"Natalia me encuentro bien así que me voy a ir poniendo en marcha" bajé a Lea del taburete y me acerqué a darle dos besos a Natalia "Muchas gracias por todo, de verdad"

"Deja que os acompañe"

En silencio fuimos las dos hacía el coche y después de meter a Lea en el coche volví a los ojos hipnotizantes de Natalia.

"Siento lo de Africa, es muy buena tía de verdad, no está ahora mismo en su mejor época"

"Tranquila Natalia no es tu culpa, no somos culpables de las acciones de nuestro alrededor y aparte yo tampoco estoy en mi mejor época así que procuro entender a que todo el mundo puede estar igual que yo"

Me sonrió, una sonrisa tan sincera que me derritió por dentro.

"Ha sido un placer conocerte de verdad, gracias por preocuparte" Repetí y me acerqué a darle dos besos.

"Te puedo dar mi numero y me escribes por favor cuando llegues a tu destino... Para quedarme tranquila de que habéis llegado las dos bien"

Asentí y le di mi móvil para que guardase su numero.

"Buen viaje"

Me metí en el coche y sonriendo a Lea por el espejo me puse en marcha. Puse la música a tope y las dos cantamos hasta entrar en la 'red de carreteras del municipio de Madrid' ahí bajé el volumen y pedí a Siri que me indicará cómo llegar a mi nueva casa. 

Llevábamos ya tres vueltas al mismo bloque, yo me estaba agobiando, Lea lloraba en el asiento de atrás ya cansada de estar tanto tiempo atada y Siri no dejaba de repetirme "Llegaras a tu destino en 2 minutos"

Aparque el coche en el primer aparcamiento libre que vi y saqué a Lea dejando que se estirase y se tranquilizase un poco antes de volver a buscar el piso. 

Era temprano aún, la casera del piso no estaría hasta dentro de un hora así que cogiéndole la mano a Lea y cerrando el coche caminamos hasta una cafetería que había en la esquina. La cafetería era muy bonita, acogedora decorada de colores rosa pastel y todo muy cuqui.

"Mama yo quero mi cuato asi rosa" Lea tiraba de mi mano intentando llamar mi atención para que mirase las paredes pintadas de rosa.

"Vale Lea, lo que tú quieras" le dije entrando en el pequeño establecimiento y sentándome en la primera mesa que vi. "¿Quieres beber un zumo?" Asintió con su cabecita y corrió hacia una estantería llena de figuras de porcelana. "Lea, más te vale no tocar nada de esa estantería, solo se mira" se volvió para mirarme pero al segundo estiró la mano para agarrar una figura. Salí corriendo de mi sitio para cogerla asustándola en el acto haciendo que se pusiera a llorar. "Lea por favor" La mecí en mis brazos mientras la chica que estaba detrás del mostrador se acercó a mí, menos mal que no había nadie más allí.